Los sueños lúcidos son aquellos en los que una persona es consciente de que lo que sueña no es real mientras está dormido. Con el tiempo, puede llegar a modificar el contenido de lo que su subconsciente ha creado y cambiar la trama de la historia. En 'Para Todos La 2', el psiquiatra Javier García Campayo explica dos beneficios que este tipo de experiencias puede aportar.
Aplicación en terapias
Según García, los sueños lúcidos son muy eficaces para combatir fobias, duelos y traumas en las terapias psiquiátricas. Además, permiten conocer e interpretar mejor los conflictos internos que el paciente pueda tener. Una técnica que recomienda el doctor para controlarlos es, cuando se está despierto, preguntarse si lo que se está viviendo es real o tirarse de una parte del cuerpo como el dedo para notarla. Así, cuando se esté durmiendo, si no se puede hacer lo mismo, detectará que es un sueño.
“Hay que preguntarle amablemente al monstruo qué nos quiere transmitir“
Muchos de los pacientes de Javier García tienen pesadillas con monstruos que les persiguen. El especialista no les aconseja que se despierten, ya que es una manera de reforzar el pánico, y les recomienda que sigan el sueño: "Hay que preguntarle amablemente al monstruo qué nos quiere transmitir, cuál es la enseñanza. No hay que confrontarlo agresivamente". El experto afirma que el enemigo en el sueño se transforma en alguien valioso para la persona. Son figuras referentes, como el padre o la madre, que transmiten algo importante para el individuo. Cuando reciben el mensaje positivo, es cuando despiertan.
Hombre teniendo un sueño lúcido.
Creatividad
“Muchos artistas se han apoyado en los sueños lúcidos para realizar sus trabajos“
El otro punto a favor de los sueños lúcidos es que potencian la creatividad: "Muchos artistas, literatos, pintores e inventores se han apoyado en los sueños lúcidos para realizar sus trabajos". No siempre todas las obras artísticas son alegres, y según el psiquiatra tiene que ver con que el 15% de estas imaginaciones controladas nacen de pesadillas. Algunas personas experimentan un hecho desagradable a la par que surrealista, se dan cuenta de que están soñando y, conscientemente, continúan la actividad en vez de despertarse físicamente. Cuando se desvelan, transforman y plasman todo lo imaginado en arte, de tal forma que de algo negativo generan una proyección positiva.