Milán, septiembre de 1959. Han pasado ya tres años desde la trágica y triste muerte de Pietro Mori, el gran aventurero que realiza sus sueño abriendo unos grandes almacenes en la susodicha ciudad italiana. La tercera temporada de El Paraíso de las Señoras continúa enmarcada en un contexto de crecimiento económico y vorágine social, las mujeres desafían los conceptos establecidos y buscan revolucionar un sistema que les impide libertad. Ruptura de normas, transgresión y valores tradicionales que se esfuman con el vuelo del viento. Algo en apariencia positivo, pero que se verá empañado por las ideas oscuras de ciertas familias con mucho poder.
Y si no que se lo digan a Vittorio Conti, el mejor amigo de Mori, que deja su brillante carrera como publicista para continuar con el proyecto del difunto: reabrir los almacenes. El objetivo lo consigue, y esta preciosa iniciativa que se lleva a cabo gracias a la financiación de la poderosa familia Guarnieri de Milán, pronto resulta controvertida porque resulta que son gentes sin escrúpulos. Intenciones oscultas que se entrelazarán con triángulos amorosos, dificultades personales, realidades de clase social, entre otras adictivas tramas protagonizadas por personajes de lo más variopintos.
Pietro Mori en la segunda temporada
Vittorio Conti
Tras la muerte de Pietro Mori, su vida cambia radicalmente. Estuvo lejos de Milán durante unos años, primero viajando por Europa y luego encontrando trabajo en Turín con Armando Testa. Los pocos ahorros que ha conseguido en sus hazañas por el continente, decide invertirlos en honrar la memoria de su mejor amigo. Reabre ese Paraíso de las Señoras con la ayuda de un préstamo concedido por el banco de los Guarnieri. De publicista, se convierte en empresario, aunque las cosas no le serán del todo sencillas porque su prestamista tiene otras intenciones para los terrenos donde posan los almacenes.
Además de verse también envuelto en un triángulo amoroso, acabará averiguando que una persona muy cercana a él está implicada en el asesinato de Mori. ¿Podrá afrontar con calma todo lo que le repara el destino?
Andreina Mandelli
Mandelli se ve obligada a abandonar Milán tras ser acusada de cómplice de un delito mayor y premeditado. Se iba a casar, pero las circunstancias le obligan a hacer las maletas y huir alejándose de su amor. Sin embargo, habrá un hecho que la llevará de vuelta a su ciudad, aun sabiendo que puede ser capturada.
Andreina Mandelli
Umberto Guarnieri
Nació en una familia humilde de trabajadores, pero ascendió en la escala social cuando se casó con la noble Margherita di Sant'Erasmo. De modesto, a relacionarse con los más famosos aristócratas de Milán. La felicidad se nubla cuando fallece su mujer, diez años atrás, lo que lleva a su cuñada Adelaide a entrar en la casa Guarnieri y hacerse cargo de sus nietos, Riccardo y Marta. También se encarga del funcionamiento de la casa y de las relaciones comerciales de Umberto.
Habilidoso, audaz y perspicaz para los negocios, su ambición le llevará a pensar en un gigante proyecto inmobiliario que será la peor pesadilla para Conti.
Marta Guarnieri
Hija de Umberto, se quedó huérfana de madre a los diez años y, a pesar del compromiso de su tía Adelaida, crece rebelde y termina en un internado suizo para conseguir que se centre.
Vaga sobre el futuro sin ideas claras, lo que sí sabe es que no quiere casarse, siente un alma artística y afronta la realidad con el entusiasmo un poco loco e ingenuo de la juventud. Descata también por ser curiosa y pícara, no se anda con rodeos y sobre todo no considera su condición de mujer como limitante.
Pietro y Teresa en la segunda temporada
Ricardo Guarnieri
Es el hijo mayor de Umberto, crece sobreprotegido y mimado por su madre, quien trabaja para mantenerlo alejado de la presión paterna. Sin embargo, del mismo modo quen a su hermana, la muerte de Margherita le afecta y acaba siendo absorbido por la atención de Umberto y Adelaide.
Apasionado de la equitación, acaba compitiendo en el equipo olímpico, una decisión que su padre no ama.
Adelaida de Sant'erasmo
Desciende de una familia noble, ha sido educada en las tradiciones sociales de conseguir un buen matrimonio. Se caracteriza por ser ingeniosa, inteligente, vivaz y franca, estuvo fascinada por el joven y ambicioso Guarnieri, durante un tiempo espera tenerlo para ella, pero sus sueños se hacen añicos cuando Margherita se casa con él.
Adelaida nunca aceptó ese matrimonio y, cuando muere su hermana, toma su lugar, cultivando la secreta esperanza de convertirse en la segunda señora Guarnieri. Con los años, sin embargo, comparte todo con Umberto, excepto lo esperado. Manipuladora y fría, ella es la verdadera dama oscura de la familia.
Luca Spinelli
Su verdadero nombre es Daniele Fonseca y es un superviviente judío de los campos de concentración. Junto a su familia fue deportado a Dachau en 1943 debido a la denuncia que hizo Umberto Guarnieri a los nazis. Daniele solo tenía 14 años, pero ese día juró vengarse.
De regreso en Milán, quema esa parte de piel en la que está tatuado su número de registro y cambia su nombre por el de Luca Spinelli, un hábil empresario con inversiones en minas sudamericanas. Lo que sucede después hay que verlo.
Luciano Cattaneo
Leal, correcto, acostumbrado al deber más que al placer, mortificado por una vida gris y monótona. Se casó con Silvia antes de la guerra y a lo largo de los años ha perseguido el sueño de ascender a clase media, tener una casa propia, hijos que estudian y una jubilación pacífica.
Siempre ha trabajado como contador de la familia Guarnieri y ahora ha ascendido el puesto de contador jefe en Paradiso. Esta misión la acepta con abnegación, sin saber que la verdadera razón por la que Umberto lo ha elegido es bastante controvertida.
Silvia Cattaneo
Silvia es una mujer que siempre ha tenido las ideas muy claras. Ex mecanógrafa de la empresa Guarnieri, dejó el trabajo para formar una familia, con la esperanza de poder aspirar a una progresiva promoción social y económica. Ahora ella tiene un hogar impecablemente mantenido; dos hijos, un marido fiel y con un buen trabajo. Aunque en realidad está insatisfecha y acaba proyectando todos sus deseos sobre sus hijos.
Federico Cattaneo
Estudiante aparentemente ejemplar. Sus padres están orgullosos de él, pero, lo que no saben, es que lleva una doble vida. Esquiva el conflicto: ante las dificultades prefiere huir o pasar desapercibido antes que luchar. Y sobre todo es incapaz de defender sus ideas delante de sus padres. Sensible, creativo y amante de la moda.
Nicoletta Cattaneo
Creció a la sombra de su madre Silvia, quien proyectó en ella su deseo de una vida diferente, como la de las mujeres retratadas en las portadas con un buen matrimonio.
Joven, sabe muy poco sobre el mundo y obedece dedicándose a la economía del hogar, dejando atrás sus estudios. Se convierte en vendedora del Paraíso de las Señoras y acaba siendo cortejada por uno de los protagonistas.
Agnese Amato
Tradicionalista, analfabeta y obstinada: la matriarca de los Amato llega a Milán desde Sicilia en contra de su voluntad y vive allí a regañadientes la mayor parte del tiempo. Su misión declarada es mantener a la familia unida después de que su esposo Giuseppe se dio a la fuga: a pesar de no pertenecer a una familia de la mafia, se metió en problemas y fue acusado de asesinato. Para escapar de un destino ya sellado, se esconde y se convierte en la vergüenza y la cruz de Agnes quien -aunque sabe cómo fueron los hechos- no dice nada a sus hijos y mantiene un velo de misterio sobre el asunto.
Antonio Amato
Testarudo, creció rápido y desarrolló desde muy temprano una supuesta madurez que lo convirtió en el cabeza de familia incluso antes de que su padre se involucrara en un crimen. Afronta la vida con la cabeza alta y está convencido de que conseguirá el bienestar al que tiene derecho todo trabajador honesto.
También destaca por amar y proteger a su madre Agnese y su hermana menor Tina.
Salvador Amato
Simpático y audaz, sabe cómo conseguir lo que quiere de la gente. Llegó a Milán con el mismo objetivo que su hermano Antonio, que es encontrar una vida mejor que la que hubiera tenido en el campo. Pero eso es lo único que tiene en común con él.
Espíritu de seductor, positivo, divertido y de gran vitalidad. Es irresistible para todas las personas con las que tiene que tratar.
Concettina Amato
Tiene 20 años, un carácter explosivo y un físico que atrae las miradas allá por donde pasa. Vital, enérgica e ingenua, llega a Milán llena de entusiasmo y consciente de la oportunidad de construir una nueva vida. Traviesa, un poco chismosa, provocadora, su actitud contrasta con los firmes principios de su madre Agnese.
Elena Montemurro
Aún no ha cumplido los 20 años, es la novia de Antonio Amato e hija de una maestra de primaria. Inexperta, inmadura e ingenua, llega a Milán convencida por su amado de que quiere casarse con ella y espera obtener rápidamente el permiso de su familia. La suya es la historia de tomar conciencia de la realidad, incluso dura, de la vida y la madurez.
Venus
Además de todos ellos, Clelia Calligaris, Roberta Pellegrini, Grabriella Rossi o Ludovica Brancia Di Montalto son otros de los personajes cuyas tramas también nos enamorarán. Descúbrelas en la tercera temporada de El Paraíso de las Señoras, en RTVE Play.