Tino era la estrella de Parchís, el grupo musical que marcó a una generación en los años '80. Era la ficha roja, el líder indiscutible del grupo y arrasaba entre las fans. Tanto era el éxito que recibía más dinero que los demás y que finalmente quiso volar en solitario. En 1985 dejó Parchís para iniciar su carrera como solista un intento que no llegó a buen puerto como hemos visto en el documental de Lazos de sangre.
Adicto al éxito
Llegó a Parchís con 12 años y se convirtió en el líder de las fichas, por eso su color era el rojo, el más poderoso. Le gustaba mandar y acaparar la atención, se sentía el rey sobre el escenario y el éxito de Parchís le hizo ser más ambicioso. Creció junto a sus compañeros y poco a poco se convirtió en un adolescente que conquistaba a niñas y mujeres allí a donde iba. No tenía reparos en confesar lo ligón que era ni tampoco en compartir con sus compañeros del grupo cuáles eras sus tácticas de ligue. "Yo llevaba a las chicas a mi habitación y dejaba a Frank y a David en el armario mirando por una agujerito para que vieran mis artes", dice Tino en el documental cuando habla de esa etapa. Una historia que confirma Yolanda, que hace la entrevista junto a él.
Con estas referencias os podéis hacer una idea de cómo era Tino, un chico que triunfaba y al que le gustaba que le mirasen cuando hacía algo bien o cuando sabía más que el resto. Por eso no es de extrañar que quisiera continuar su carrera en solitario y en 1983, con 16 años, decidió abandonar Parchís. Creía que las canciones del grupo ya no eran las adecuadas para alguien de su edad y que, al igual que sus fans, él había crecido y ya no era el momento de cantar aquellas canciones que le habían hecho famoso y que tenían un toque infantil.
Sacó tres discos en solitario y aunque los primeros tuvieron una buena acogida, no se acercaron ni de lejos al éxito que consiguió con Parchís. Su tercer y último disco no tuvo la misma suerte que los primeros y cayó en el olvido casi al instante. Justo en ese instante tuvo que hacer el servicio militar que le obligó a dejar los escenarios por un tiempo y a su regreso, por mucho que lo intentó, ya no tenía espacio en el mundo musical.
Fue entonces cuando intentó encontrar su sitio en otros trabajos como en algunos programas de radio y televisión, pero tampoco tuvo que éxito que le habría gustado y después de trabajar como comentarista deportivo, un oficio en el que también fracasó, ahora se dedica a algo completamente diferente. Se retiró de los focos y comenzó a trabajar en una distribuidora comercial. "Empecé por abajo y ahora soy accionista de la empresa", comenta Tino en el documental.
¿Y qué fue de Parchís?
Frank, Gemma y Yolanda han contado que se sintieron muy traicionados por Tino cuando abandonó el grupo. Para ellos eran una familia y no entendieron la decisión de Tino, "¿Qué cómo tomamos los otros cuatro integrantes que se fuera Tino? Mal obviamente", dice Yolanda durante su entrevista.Su amistad se resquebrajó en aquel momento y durante muchos años perdieron el contacto, pero a veces algo malo trae cosas buenas y el accidente en coche de Tino hizo que el grupo se volviese a unir.
Un día al salir del trabajo Tino tuvo un accidente tratando de esquivar a un coche que conducía de forma irregular. Esto hizo que el vehículo se metiera en el carril contrario y chocase con otro vehículo. En un acto reflejo, Tino levantó un brazo para intentar esquivar el golpe y acabó perdiendo el brazo izquierdo. Cuando Gemma, Frank y Yolanda se enteraron de lo ocurrido no dudaron en mostrarle su apoyo y reconciliarse con él. "En esos momentos te das cuenta de que hay cosas que están por encima de todo", dice Yolanda. Eso demuestra una vez más que lo que ellos vivieron fue mágico, fueron una familia durante muchos años y eso no se olvida jamás.