Es el alimento más antiguo del mundo. La leche materna un gran misterio para la ciencia y uno de los compuestos más complejos que existen en la naturaleza. Jamás ha podido replicarse en laboratorios y parece una fuente inagotable milagros: factor crucial en el desarrollo del sistema inmune de los bebés, así como en el cognitivo, su importancia en los primeros meses de vida es crucial y podría esconder, además, el secreto para el tratamiento de otras enfermedades. Sus impresionantes cualidades y usos potenciales se exploran en 'El boom de la leche materna', el documental que ya está disponible en RTVE Play.
No obstante, la lactancia se ha visto afectada por las modas, las argucias publicitarias y los juicios que, por exceso o por defecto, parecen afectar a todas las madres lactantes: como se explica en 'Los pechos al descubierto', otro documental disponible bajo demanda, su relación con el pecho de la mujer y los intereses de diversos agentes sociales la han convertido en algo controvertido.
1. Hay tres tipos diferentes de leche
Hay tres etapas en el proceso de formación de la leche. Entre el primer y el quinto día de vida del recién nacido, la madre produce el calostro, una leche amarillenta que se produce en pequeñas cantidades y está cargada de sustancias que contienen elementos esenciales para el sistema inmune. Es una de las leches más importantes para el desarrollo del bebé, pero apenas tiene poder nutritivo: es en la segunda semana de vida del bebé, entre los seis y los quince días, cuando la leche de transición comienza a venir cargada de grasas y carbohidratos para el crecimiento del bebé. La leche madura, que dura el resto del tiempo de la lactancia, contiene muchos menos anticuerpos y tiene más capacidad nutricional, adaptándose a las necesidades de los bebés en cada momento.
2. Cada toma incluye 'tres platos': primero, segundo y postre
Pero esto, si ya de por sí fascinante, no es lo más llamativo de la capacidad de adaptación de la leche. ¿Sabías que cada toma incluye en sí misma tres tipos distintos de leche? Como en un menú de tres platos, el 'entrante' es una primera leche acuosa para saciar la sed. El 'plato principal', una leche donde aumenta el contenido en grasa. Y el 'postre', una leche más dulce, rica y saciante.
3. En países secos, la leche de la madre es más hidratante
Como lo oyes: una de las funciones de la leche es saciar la sed del bebé, y se ha observado que en lugares donde el clima es muy soleado y la necesidad de hidratación es mayor, como en África o las zonas tropicales, la leche materna sacia más la sed. Además, la leche que produce cada madre varía en función del sexo del bebé: es más abundante cuando se trata de una niña, y más nutritiva en el caso de los niños.
4. Cambia de sabor en cada toma, y eso es bueno para el bebé
Tomar leche materna en lugar de leche de fórmula también favorece las experiencias sensoriales del bebé: algunos sabores y rasgos de la comida ingerida por la madre se transmiten en la leche, que cambia de sabor en cada toma. La fórmula de la leche sintética, sin embargo, sabe siempre igual, estimulando menos al bebé.
5. Aún se desconocen sus componentes
Pese a los esfuerzos científicos dedicados a desentrañar los secretos de la leche materna y la proliferación de laboratorios dedicados a su estudio e investigación, la leche materna sigue siendo el gran desconocido de la ciencia: debido a la gran cantidad de moléculas que la componen, y pese al descubrimiento de muchas de ellas, siguen existiendo grandes incógnitas acerca de los componentes de la leche materna. Se cree que muchas de estas moléculas desconocidas pueden ser, precisamente, las responsables de sus propiedades más importantes, y que descubrirlas puede ser crucial para avanzar en el tratamiento de muchas enfermedades como, por ejemplo, el cáncer.
6. ¿El secreto para la lucha contra el cáncer?
Científicos de la universidad de Lund han descubierto en la leche materna un conjunto formado por una proteína y un ácido graso que es capaz de matar células tumorales. Una sustancia que ha sido bautizada como HAMLET y cuyos efectos se descubrieron por casualidad. Catharina Svanborg, inmunóloga de dicha universidad, comenzó la investigación que ha mostrado resultados prometedores. Aún se están realizando los ensayos clínicos, pero los primeros experimentos demostraron cómo pacientes de cancer de colon excretaban células tumorales a través de la orina después de que se les administrase este compuesto, que no dañó a ningún otro conjunto celular.
7. Las bacterias, uno de los secretos de la leche
Las bacterias de la leche materna son una de las claves que benefician al recién nacido: la leche cruda tiene propiedades bioactivas y una de ellas es el entrenamiento del sistema inmune del bebé. La flora intestinal es fundamental para el buen funcionamiento del organismo, y la colonización del intestino del bebé por las bacterias que se transmiten a través de la leche es como una primera vacunación con efectos a largo plazo. El intestino es uno de los órganos más importantes del niño y, gracias al uso de leche materna para el tratamiento de neonatos, se evitan muchas enfermedades gastrointestinales y se previene que, en el futuro, el individuo desarrolle enfermedades como la colitis ulcerosa o la enfermedad de Crohn.
8. La mejor medicina para bebés prematuros
De sobra conocidos, aunque quizá no lo suficientemente reivindicados, son los efectos beneficiosos de la leche materna sobre los bebés: menos problemas gastrointestinales, menos infecciones, mejor desarrollo mental, menos riesgo de sufrir alergias u otros trastornos respiratorios y un mejor sistema inmune son algunas de las ventajas probadas de la lactancia. Pero no todo el mundo sabe que la leche materna se ha probado como una 'medicina' clave en el buen desarrollo de los bebés prematuros, que a menudo sufren de problemas intestinales que pueden ser mortales cuando se los alimenta con fórmula y donde la alimentación con leche materna, de la propia madre o de donante, disminuye drásticamente los índices de mortandad.
9. ¡Hay que donar más leche!
Por eso, la donación de leche materna está en auge, y los bancos de leche son una parte fundamental para la prevención de enfermedades y el cuidado de los recién nacidos. Tienen una larga tradición en las sociedades europeas: en Alemania, por ejemplo, todas las ciudades estaban obligadas a tener su propio banco de leche, aunque la aparición de sustitutos industriales fue reemplazándolos paulatinamente. En países como Francia o Italia también están establecidos, y la vuelta de los bancos de leche es una tendencia en todo el mundo, también en España. El principal problema es el alto coste del proceso: la donación de leche debe ser supervisada médicamente para realizar análisis y suplementos y evitar la transmisión de bacterias peligrosas para los bebés, por lo que la inversión es fundamental. Ahora mismo, sólo se utiliza de forma generalizada para tratar a bebés prematuros.
10. La donación está prohibida en algunas culturas
Otro obstáculo en la donación de la leche tiene que ver con la tradición: pese a que cada vez más familias toman la decisión individual de 'saltarse' las normas, hay religiones como el judaísmo o el islam que no permiten dar de mamar a hijos de otras familias. Esto se debe a que, en culturas más antiguas, se contempla 'el parentesco de leche' como un lazo entre individuos que puede ser tan importante como la sangre, considerándose incestuosa la relación entre dos individuos que copartieron leche.
11. Existe un 'mercado negro' de la leche
Distintos grupos poblacionales, como los culturistas, obtienen leche materna de internet, donde muchas mujeres ofrecen la suya propia a cambio de dinero. El mercado de la leche materna no se encuentra debidamente regulado y, en Estados Unidos, adquirir leche materna por internet ya es una práctica muy extendida, aunque puede ser peligroso. Al analizar la leche, científicos como Daniel Klotz se han dado cuenta de que, aparte de las bacterias buenas para el recién nacido, hay muestras contaminadas con bacterias intestinales y otras sustancias que hacen que la leche no sea apta para el consumo.
12. Y su explotación afecta más a las mujeres negras
El gobierno Camboyano tuvo que prohibir la exportación de leche materna debido a este 'boom' de demandantes de leche. Empresas norteamericanas, para aprovechar este mercado, recurren a mujeres vulnerables en situación de necesidad para comprar su leche materna, en países africanos pero también localmente: en Detroit, la asociación de madres negras lactantes denunció esta práctica recordando el hecho histórico de que, antaño, las esclavas negras eran abusadas como nodrizas para amamantar a los hijos de los esclavistas.
13. La contaminación pone en peligro la lactancia
Estudios científicos sobre la presencia de sustancias quimicas de origen industrial en la leche materna han mostrado que, en las sociedades posindustriales, hay presencia de elementos químicos que interactúan con nuestro sistema hormonal y se transmiten a través de la leche: sustancias como los retardantes de llama, el perclorato o el bisfemol-A, presente en envases y en el plástico de las botellas, afectan a la calidad de la leche. Luchar contra la contaminación y el abuso de los plásticos y las sustancias químicas es crucial, también, para proteger el desarrollo de los bebés, que se produce con menos riesgo cuando se sigue una alimentación orgánica.
14. La leche tiene muy 'mala prensa'
En los países pobres, por culpa de la agresiva publicidad de las empresas productoras, la leche sintética tiene muy buena prensa y hay madres capaces de producirla que son engañadas para no utilizarla. Por eso hay iniciativas locales, en países como Ghana, dirigidos a sensibilizar e informar a las madres sobre los beneficios de la leche materna. Pero no sólo en África: los beneficios de la leche materna han sido escondidos en función de las modas, y concienciar sobre su buen uso es una tarea pendiente también en Europa.
15. ¿Y si tengo dudas?
Las madres lactantes reciben juicios por exceso y por defecto y, en una sociedad que aún esconde la lactancia y donde no todas las mujeres tienen las mismas características, las preguntas se acumulan: ¿Hasta cuándo es conveniente dar de mamar a un bebé? La recomendación de la OMS es que hasta los dos años o hasta cuando se pueda, aunque haya prejuicios sociales contra el amamantamiento de bebés más mayores. ¿Es mi culpa si no tengo leche? No. El proceso de dar de mamar puede ser frustrante y está lleno de altibajos, y por eso profesionales como las cosultoras de lactancia, disponibles para acompañar a las madres en este proceso, son fundamentales para la salud infantil.
Algunos de los recursos disponibles en España son e-lactancia, LactApp, la Asociación Española de Consultoras Certificadas en Lactancia Materna (IBCLC), el Comité de lactancia de la Asociación Española de Pediatría, IHAN: Iniciativa para la Humanización de la Asistencia al Nacimiento y la Lactancia, La Liga de la Leche o FEDALMA: la Federación Española de Asociaciones pro Lactancia Materna.