Las parejas que van al baño juntas, permanecen juntas. Esta cita no es célebre, no consta autor ni tampoco firma, pero, si la tuviera, seguro que sería la de Meghan Trainor. La cantante y su marido, Daryl Sabara, se casaron en 2018 y parece que han alcanzado el colmo de la intimidad. Lo que para cualquier otra pareja es un tema tabú, para ellos es algo tan natural que incluso lo pueden compartir. Ahora acaban de comprar una casa nueva y están reformándola a su gusto. Ha sido durante una entrevista en un programa de radio cuando han desvelado su particular petición. "Nadie sabe esto, pero en nuestro baño, había un inodoro, y mucho tiempo en medio de la noche cuando estamos con el bebé, tenemos que orinar al mismo tiempo. Así que pensé: '¿Podemos tener dos baños uno al lado del otro?'", confiesa Trainor.
La artista admite que su contratista pensó desde un principio que se trataba de una broma, pero terminó accediendo y añadió un nuevo inodoro al lado del que ya estaba. Meghan Trainor se reafirma ahora en su decisión, muy práctica en base a su experiencia. "Tenemos dos baños uno al lado del otro, y solo hemos hecho caca juntos dos veces, pero orinamos mucho al mismo tiempo", añade. Demasiados detalles, Meghan.
Meghan Trainor y su esposo Daryl Sabara GTRES
'Dear future husband'... ¿Quién te iba a decir a ti que acabarías compartiendo vida, aunque no retrete, con tu esposa? Casualidad o no, la pareja pasa por su mejor momento. Ella se deshace en halagos cuando habla de Daryl Sabara. "Se preocupa mucho por mí, mi bienestar, mi estado emocional, mi físico, todo. Solo quiere hacer todo lo posible para mejorarme y hacer mi vida más fácil", reconoce. El pasado mes de febrero dieron la bienvenida a un nuevo miembro de la familia, el pequeño Riley, su primer hijo en común.
Meghan Trainor, su esposo Daryl Sabara y su hijo Riley INSTAGRAM
¡Padre e hijo son como dos gotas de agua! Está claro que ha salido a Daryl. La pareja comparte a través de sus redes sociales algunos momentos familiares de lo más tiernos. Riley no puede ser más risueño. Pero la maternidad no ha sido un camino de rosas para Meghan Trainor. La cantante de 27 años confesó hace unas semanas que no se sentía sexy tras dar a luz: "Estoy cubierta de cicatrices y estrías en nuevos lugares que no sabía que podían estar las estrías. Hay cosas que no van a desaparecer nunca, y tengo que aprender a amar eso". Su historia es la de muchas mujeres, por eso es tan importante que famosas como Ashley Graham utilicen sus redes para mostrar la realidad.