Una boda y un desfile de moda, pues las invitadas al enlace de Carlos Fitz-James Stuart y Belén Corsini, una boda de postín, han llamado la atención por lo fabulosos que son sus vestidos. Brianda Fitz-James Stuart ha destacado con un vestido de Duyos y Alejandra Domínguez, una de las más elegantes, ahora y siempre, ha llamado poderosamente la atención con un diseño de la firma sevillana Antonio García. Y más moda española. Bárbara Mirjan ha escogido a Jorge Vázquez y ha conjuntado su vestido con una pamela de Nana Golmar.

Barbara Mirjan lleva un vestido de Jorge Vázquez, Gtres

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Alejandra Corsini, ideal, ha escogido un dos piezas de la colección que ha hecho Juan Vidal con Binami. Inés Domecq ha llevado un vestido de su propia firma. La joven está de absoluta actualidad porque hace unos días la reina Letizia llevaba un conjunto de blusa cuajada de volantes en las mangas y pantalón. Para la boda Inés ha llevado un vestido ajustado, de silueta làpiz, con juegos de geometrías en los hombros y en las caderas. Sofía Palazuelo ha llevado un vestido de Jon Taminiau, modista que viste a Máxima de Holanda.
EFE / Alejandra Ortiz
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Los días previos al "sí, quiero", la pareja confesaba que “estaban un poco nerviosos” y que en la ceremonia no habría mucha gente por “todas las restricciones del Covid”. Cayetano Martínez de Irujo ha sido el gran ausente, debido su décima intervención quirúrgica por problemas de intestino. Pero, lo que no ha faltado son las risas, la alegría y la emoción en una de las bodas más esperadas de la Casa de Alba.
Fue hace 8 meses cuando dieron la sorpresa al anunciar su compromiso. Tras dos años de noviazgo, los ya condes de Osorno se comprometieron en septiembre de 2020. Carlos de 28 años, y Belén Corsini, de 31, mostraban su deseo de casarse cuando la pandemia se lo permitiera, dos años de amor les era suficiente para estar convencidos del paso. Y, el padre del novio, el duque de Alba, estaba orgulloso de la decisión: “Con mucha ilusión porque ella es estupenda, él está muy contento y creo que va a ser una pareja muy feliz”, decía.
Carlos Fitz-James Stuart y Belén Corsini se han dado el "sí, quiero"
Corsini pertenece a una de las familias españolas más ricas
La novia, aunque se acabe de convertir en condesa de Osorno, no necesita títulos nobiliarios. Belén Corsini es hija de una de las familias más ricas de nuestro país. Sus padres son los empresarios Mónica de Lacalle Rubio y Juan Carlos Corsini y sus empresas pertenecen a sectores tan dispares como el agropecuario o el inmobiliario. Belén estudió Administración y Dirección de Empresas y trabaja en el entramado empresarial de su familia.
Los recién casados comparten formación en los negocios, pues el hijo menor del duque estudió Comercio Internacional y está involucrado en la gestión de los negocios de la Casa de Alba. Una casa en la que hoy han vuelto a sonar campanas de boda.
Belén Corsini cuenta algunos detalles de su boda
Cayetano, el gran ausente
El intestino de Cayetano Martínez de Irujo es su auténtico talón de Aquiles. Su décima intervención quirúrgica para quitarle adherencias que le provocan una grave obstrucción le tiene postrado en una cama de la Clínica de la Luz desde hace más de una semana. Sus hermanos y su novia le visitan asiduamente y es Carlos, el más expresivo al darnos el parte médico.
Lazos de Sangre - Cayetano Martínez de Irujo: las mejores declaraciones
Otras bodas de La Casa de Alba
Hasta ahora la de Fernando Fitz James Stuart y Sofía Palazuelo había sido la última gran boda en el Palacio de Liria, pero no la única en la familia de los Alba.
Varios nietos de la duquesa de Alba han elegido el palacio de Liria como escenario de sus bodas. Si nos vamos a las últimas generaciones, ya Jacobo Fitz James Stuart, hijo del conde de Siruela, se casaba allí con Asela Pérez Becerril. Corría el año 2011 y fue el primer enlace familiar al que acudía Alfonso Díez.
Muy flamenca, Doña Cayetana celebraba en Sevilla su boda más sonada con Alfonso Díez, su tercer marido
El tercer y último marido de doña Cayetana, su boda el 5 de octubre de ese mismo año dejaba imágenes para la historia. El baile de la duquesa a las puertas del Palacio de las dueñas en Sevilla escenificó el triunfo del amor. Parecía mentira, pues antes de que Alfonso apareciera en su vida estaba en silla de ruedas. Así asistía a otra de las grandes bodas familiares la de su nieto Javier con Inés Domecq en Jerez de la Frontera.
El Palacio de Liria: puertas abiertas, cuadros vacíos
Los hijos de la duquesa han tenido bodas propias de la realeza
Hijo de Alfonso Martínez de Irujo y María de Hohenlohe, el enlace de sus padres había sido todo un acontecimiento social en la Marbella de los setenta. La duquesa ejercía por primera vez de madrina.
Repetía en el papel en la boda de su primogénito Carlos, entonces duque de Huéscar, con Matilde Solís en junio de 1988 en la catedral de Sevilla. Fue lo más parecido a una boda real como sucedería una década después cuando su única hija Eugenia se casaba con Francisco Rivera.
La duquesa de Alba gastó 20 millones de las antiguas pesetas en su boda con Luis Martínez de Irujo
Si hablamos de bodas sonadas, hay que volver a la de Alfonso y la Duquesa, pero, si hablamos de bodas caras carísimas hay saltarse a Jesús Aguirre e ir al primer sí quiero de Doña Cayetana: 20 millones de las antiguas pesetas costaba en 1947 el enlace de la Duquesa de Alba con Luis Martínez de Irujo.