Ana Obregón ha vuelto a poner a sus seguidores con los pelos de punta. La presentadora ha tirado de archivo y ha publicado en su cuenta de Instagram unas viejas fotografías donde aparece junto a su hijo Álex y su expareja, Alessandro Lequio. "Tu primer día en el zoo", ha señalado en el post, donde hace una reflexión sobre la vida y la felicidad.
"Haber sido intensamente feliz, tanto que ya no importa no serlo jamás. He aprendido que al final tenerlo todo no significa nada material, nada que puedas etiquetar, ni el éxito, ni el poder, ni nada que conlleve la intoxicación del ego. Tenerlo todo es poder dar todo tu amor a las personas que quieres. Y yo tuve todo porque pude darte todo mi amor. La existencia es un día corto. Hay que llenar todos los recuerdos de amor por si algún día te hacen falta para poder seguir viviendo", ha escrito en la publicación.
Como es habitual, sus seguidores le han mostrado su apoyo a través de los comentarios. Algunos famosos también le han mostrado su cariño, como Colate o Marta Torné. "¡Qué fotos tan bonitas!", ha escrito la actriz.
En las imágenes llaman la atención muchos detalles, desde el carrito en el que llevan a Aless, que ahora por seguridad no estaría permitido, y sobre todo, el vestuario de Ana y Alessandro. Ana lleva una 'chupa' perfecta con cremalleras en cuero negro, muy ajustada, con el cinturón enrollado. A juego las botas militares y los pantalones vaqueros destacan por tener el talle alto. En esos años, a principios de los 90, era casi el uniforme de moda. El conde Lequio lleva jersey de cuello alto, una de las piezas icónicas de su armarios, y cazadora vaquera oversize a juego con el pantalón. Pero lo mejor es el outfit de Aless, que va vestido igual que su madre, con chupa de cuero, vaqueros y botas.
Su lucha contra el cáncer
Después de que su hijo falleciera a causa del cáncer, la presentadora se ha volcado en la lucha contra esta enfermedad y no ha parado de reivindicar la necesidad de más recursos para la investigación.
"Mi hijo, en los dos años que luchó contra esta enfermedad con una sonrisa me transmitía siempre un mensaje, el mismo mensaje de esperanza que nos mandan esos niños desde los hospitales donde algunos llegan a estar ingresados años. Un mensaje que brota de su sonrisa entre sondas y químios, diciéndonos - “Que estos tiempos difíciles PASARÁN “. ANIMÁNDONOS!!!!!", escribió en una de sus últimas publicaciones con motivo de la celebración del Día Internacional del Cáncer Infantil.
"Nunca me cansaré de pedir más ayuda para investigación y cuando acabe con el proceso de creación de la fundación de mi niño me dedicare a ella en cuerpo y alma para seguir con su legado", aseguró.