Pese al mal tiempo que azota a gran parte del país, las feministas han vuelto a unir sus voces este 8 de marzo para luchar por los derechos de las mujeres y exhibir fuerza frente a la violencia ejercida contra ellas. Al grito de "el feminismo era la lluvia necesaria" y '"de norte a sur, de este a oeste, la lucha sigue, cueste lo que cueste", miles de personas ya han salido a las calles de varias ciudades españolas para hacer oír sus reivindicaciones.
En Madrid, este año muchas mujeres han cambiado las pancartas de cartón por los paraguas y los chubasqueros ante el chaparrón que caía desde por la mañana en la capital y que ha hecho que en un principio la convocatoria pareciera menos multitudinaria que en otras ocasiones. Pero en los alrededores del punto de encuentro y en la estación de Atocha ya se veían las primeras señales de que la lluvia no iba a disolver tan fácilmente las protestas.
Entre turistas con maletas y otros usuarios habituales, varias mujeres se dejaban ver ataviadas con boinas y pañuelos violetas poco antes del mediodía. Otras esperaban para sumarse a la manifestación de la Comisión 8M pintándose símbolos de venus en las mejillas y los labios de color violeta.
A las 12 horas, cuando la cabecera de la manifestación ha abierto camino en dirección a la Plaza de España, una marea de miles personas -más de 80.000 según las organizadoras, 25.000 según la Delegación del Gobierno- se ha ido incorporando poco a poco y cantando "aquí estamos las feministas" o "no nos mires, únete". "Contra viento y marea, aquí estaremos", gritaba también un grupo de chicas agitando los paraguas.
"Es una lucha de todos"
"Yo creo que las mujeres somos así. Vamos a estar con lluvia, con truenos, con rayos. Da igual lo que caiga, que ya se ve aquí en las calles, que está lleno de mujeres", cuenta a RTVE.es Beatriz (40 años), una mujer del sindicato UGT del metal que ha regresado al 8M acompañada de los más pequeños de su familia porque cree que es necesario involucrar a las nuevas generaciones. "No podemos perder los derechos que nuestros antepasados han conseguido", defiende.
A la cita de este 8M han acudido mujeres y hombres de diferentes países y de todas las franjas de edad, sin distinción: desde las activistas más veteranas a los más pequeños de la casa, como una niña que aprovechaba los charcos para saltar en ellos con sus botas de agua y un cartel en el que se podía leer "no somos princesas, somos guerreras".
Dos jóvenes en el 8M de Madrid Esther Pérez/RTVE.es
"Es una lucha de todos. Que vengan hombres, que vengan mujeres, que vengan niños, porque es una lucha que nos viene bien a toda la sociedad, no solo a las mujeres", afirman Rocío, Sofía y Rachel (22 y 23 años). Estas tres amigas, aunque algo tímidas al principio, no dudan en contar los motivos que las llevan a participar en el 8M: "Marchamos por la igualdad entre el hombre y la mujer. Hasta que no haya esa igualdad, no se va a poder dejar de hacer ese tipo de manifestaciones".
Estas chicas, además, dicen ver con "rabia" el posible retroceso en los derechos de la mujer ante los discursos machistas y reaccionarios que parecen extenderse fuera y dentro de las redes sociales.
No son las únicas que se hacen eco de esto. Dos niñas de 14 años que han acudido a la marcha cuentan a este medio que han sufrido varias actitudes machistas por parte de los compañeros de su colegio. "Empezaron a decirnos que es que nos poníamos unos leggings para educación física para que ellos nos miraran el culo y cuando alguien les decía que eso no estaba bien, decían que eran halagos", expone una de ellas, que también señala que no hay un protocolo en su centro para frenar ese tipo de comentarios.
"Los profesores no tienen recursos. Muchas veces no saben qué hacer ante antes esas actitudes", corrobora Maika, que acompaña a las dos menores junto a Joselin, Jennifer, Olga, Patricia y Mari Ángeles. "A lo largo de la historia siempre ha pasado esto, después de las olas [feministas] siempre ha habido una de resistencia", sostiene Joselin, que dice tener la "esperanza" de que el machismo imperante entre los más jóvenes "no sea un reflejo de la sociedad real", sino la influencia de las redes sociales.
Grupo de mujeres con paraguas en día lluvioso. Una lleva un bebé. Ropa informal de otoño/invierno. Fondo con más personas. Irene Fedriani/RTVE.es
Este grupo de amigas cree que queda mucho por hacer aún en cuanto a igualdad se refiere y que hay que esforzarse por no perder los derechos ganados. "Hay que seguir estando aquí, aunque llueva, porque no tenemos que dar por supuesto nada. Cuando hay retrocesos de derechos, empiezan con nosotres", agrega Mari Ángeles.
'Mujeres en lucha contra el machismo global'
Este sábado es, además, el quinto aniversario de aquella huelga feminista que paralizó el país para poner el foco en la urgencia de alcanzar la igualdad de género real y efectiva. Ni trabajadoras en sus puestos, ni amas de casa haciendo labores domésticas, ni estudiantes participando en clase. Las mujeres quisieron demostrar su peso en la sociedad haciendo que su ausencia hablara por ellas. La movilización del 2018 logró además llevar a las calles a aquellas indecisas que en convocatorias anteriores no se habían atrevido a sumarse por uno y mil motivos.
Pancartas en manifestación feminista: una denuncia violencia contra mujeres; otra relaciona sexo con violencia, clientes con violadores y empresarios con proxenetas. Irene Fedriani/RTVE.es
Pero cinco años después, el ambiente es algo distinto. Como lleva ocurriendo desde 2022, el feminismo vuelve a marchar dividido en ciudades como Barcelona, Sevilla o Valencia con diferentes convocatorias. En el caso de la capital madrileña, ha habido dos: la manifestación de la Comisión 8M por la mañana y la del Movimiento Feminista de Madrid por la tarde.
La del Movimiento Feminista de Madrid ha partido poco después de las 18:00 horas desde la Plaza de Cibeles con el lema 'Mujeres en lucha contra el machismo global'. Ya sin lluvia y con algunos tímidos rayos de sol asomando entre las nubes, la marcha ha recorrido la Gran Vía hasta la Plaza de España coreando consignas como "vivas y libres, así nos queremos" o "violadores y machistas, os tenemos en la lista".
Muchas de las pancartas de esta manifestación han estado centradas además en la abolición de la prostitución, una de las principales reclamaciones de las organizadoras, y en las críticas a la pornografía. "Estamos aquí porque ninguna de nuestras propuestas han sido escuchadas ni por el PSOE, ni por el PP, ni por Vox ni tampoco Podemos", lanzaba al comienzo una de las coordinadoras de la marcha. En total han acudido 9.500 mujeres, según la Delegación del Gobierno, 30.000 según las convocantes.
Campaña Feminista marcha de manera solemne con máscaras y carteles con los nombres de las víctimas de la violencia de género Irene Fedriani/RTVE.es
Maite y Emma (17 años) regresan al 8M con esta manifestación junto a sus madres después de varios años sin participar. "La última vez que vine fue antes de la pandemia y yo quería venir, sobre todo, para ver cómo ha evolucionado", confiesa la segunda de ellas, que dice estar ahora "más informada sobre cómo está el mundo". "Es necesario hacer estas cosas nosotras que podemos, porque hay muchas que no pueden", asevera.
Su madre lamenta que haya muchos hombres que perciban estos movimientos feministas como "una amenaza" a la "posición de privilegio que han tenido a lo largo de toda la historia del patriarcado". "Responden diciendo que esto es feminazismo y que es un movimiento contra los hombres, cuando no lo es", denuncia.
Convocatorias divididas: "Deberíamos ir todas juntas"
"Es una pena que haya dos manifestaciones", opina Rosario, una manifestante que ha acudido a la de la mañana y que apunta a "los debates internos" como causa de esta bifurcación de protestas. "No nos gusta que esté dividido [el movimiento]. Entendemos los dos, pero no nos gusta que estén separados, porque divide. Deberíamos ir todas juntas", dicen por su parte Carmen, Raquel, María y Ángeles.
Son primas y han ido a la manifestación de la tarde desde Alcalá de Henares junto al resto de sus hijos y sobrinos, aunque el motivo de su elección ha sido "por horario". Otra de las integrantes de la "tribu" -como ellas se refieren a la familia- también se llama Carmen y ha decidido ir a las dos convocatorias. "Nosotros habíamos quedado por la tarde. Pero yo esta mañana me he levantado y he dicho no, yo tengo que ir a la de al lado también", afirma.
Mujeres en manifestación o concentración posan para una foto en una calle. Visten ropa oscura con detalles morados y rosas. Fondo urbano. Irene Fedriani/RTVE.es
A pesar de la división, todas se muestran decididas a continuar con el movimiento feminista: "Seguiremos luchando hasta el final porque la sociedad va para atrás". "Solo queremos, como todas las feministas, la igualdad entre hombre y mujer. Ni odiamos a los hombres ni queremos ser más que ellos. Somos personas. Somos iguales", agregan.
Otros grupos reconocen haber optado por una de las convocatorias pese a las discrepancias por el bien de la unidad. Gemma, Ana, Carol y Laura han ido por la tarde porque una de ellas sí es partidaria de la abolicionista. Otra, en cambio, dice que podría haber asistido a cualquiera de las dos porque está conforme con ambas. "Lo que no estoy es de acuerdo en que se dividan. Creo que podemos pensar con opiniones diferentes y seguir haciendo la manifestación juntas", expresa.
PSOE, Sumar y Podemos llaman a defender la lucha feminista ante "una ola reaccionaria"
Este año, la ministra de Igualdad, Ana Redondo, ha acudido a las dos manifestaciones madrileñas y ha llamado a la "unidad" del feminismo y a luchar contra "las mentiras" y "la ola reaccionaria". "La unidad hace la fuerza", ha afirmado en declaraciones a los medios por la mañana junto a las ministras de Vivienda, Isabel Rodríguez; Ciencia, Diana Morant; y para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen; y los ministros de Transportes, Óscar Puente y de Transformación Digital y de la Función Pública, Óscar López. Por la tarde, ha añadido a sus declaraciones que es necesario "avanzar hacia el abolicionismo" porque gran parte de la prostitución es ejercida "por mujeres esclavizadas".
Por parte del resto de partidos políticos, también se han visto marchas separadas. A la manifestación de la Comisión 8M han acudido representantes políticos del PSOE, Podemos y Sumar. Mientras tanto, en la del Movimiento Feminista ha habido una delegación de diputados y senadores del Partido Popular, encabezados por la vicesecretaria de Igualdad, Conciliación y Política Social, Ana Alós, así como una agrupación socialista.
Uno de los representantes políticos que se ha prodigado este 8M en Andalucía ha sido la secretaria general del PSOE-A, María Jesús Montero, en Sevilla, donde ha instado a la ciudadanía a no "bajar la guardia" frente a la ola reaccionaria que "está azotando el mundo y que nos inquieta". Además, ha subrayado que esta corriente refleja cómo "muchas veces se mercantiliza con los derechos y la dignidad las mujeres".
Suspendidas las manifestaciones en Málaga, Cádiz y Huelva
En otros puntos del país, la lluvia ha obligado a suspender las manifestaciones. Es el caso de Málaga, Cádiz y Huelva, donde han decidido aplazarlas debido a las advertencias de la Aemet y el 112 por las intensas precipitaciones previstas. En Logroño, la intensa lluvia que ha caído también ha obligado a sustituir la manifestación por una concentración en la que ante alrededor de un millar de personas se ha leído el manifiesto de la Plataforma 8 de Marzo.
Mejor suerte han tenido las de Valencia, donde las calles se han teñido de color morado, muy presente en la ropa y las banderas de numerosas manifestantes, y las batucadas, la música y los silbatos también han sido protagonistas. Allí, la dana ha estado en el centro de las dos manifestaciones, en las que también se han escuchado cánticos de 'Mazón dimisión'.
Manifestación de la Coordinadora Feminista de Valencia JORGE GIL / EUROPA PRESS
En Barcelona, la movilización feminista ha arrancado en el centro de Barcelona con la participación de varios miles de personas en las dos manifestaciones convocadas: una unitaria y otra alternativa de abolicionista y discrepante con la autodeterminación trans.
La movilización unitaria, convocada por la Asamblea del 8M, ha reunido a miles de personas, incluyendo a las asambleas feministas LGBTIQ+, las mujeres trans, las mujeres migrantes y las "trabajadoras sexuales", entre otras, además de los principales sindicatos, partidos y asociaciones estudiantiles.
Por otra parte, la marcha convocada por la Coordinadora 8M Moviment Feminista de Barcelona ha abanderado la consigna 'Somos mujeres y decimos basta'. Su recorrido se ha iniciado en la plaza Catalunya con un rechazo a la prostitución, la pornografía y los vientres de alquiler, así como a la 'ley trans' y a "los hombres en los deportes de mujer".
El centro de Zaragoza también ha congregado este sábado a miles de personas que, por primera vez divididas en dos marchas, se han sumado a la defensa de los derechos de las mujeres apelando a "no dar por hechas las conquistas logradas y seguir luchando frente a su cuestionamiento y la amenaza de retroceso".
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