El nuevo secretario de Defensa de EE.UU., Pete Hegseth, ha afirmado este miércoles que "no es realista" que Ucrania pueda volver a sus fronteras anteriores a 2014, cuando Rusia empezó a ocupar sus territorios, ni que pueda ingresar en la OTAN como resultado de un acuerdo de paz. “Queremos, como ustedes, una Ucrania soberana y próspera, pero debemos empezar por reconocer que volver a las fronteras de Ucrania anteriores a 2014 es un objetivo poco realista", ha subrayado.
Según el jefe del Pentágono, "perseguir este objetivo ilusorio solo prolongará la guerra y causará más sufrimiento”. En marzo de 2014, Rusia se anexionó la península de Crimea, en el Mar Negro, perteneciente a Ucrania, y luego respaldó a los separatistas prorrusos en una insurgencia armada contra las fuerzas de Kiev en la región oriental de Donbás, en Ucrania. Moscú controla actualmente cerca del 20% del territorio de Ucrania, principalmente en el este y el sur.
Hegseth ha señalado que cualquier paz duradera debe incluir "garantías de seguridad sólidas para asegurar que la guerra no comience de nuevo", pero ha descartado que la inclusión de Ucrania en la OTAN sea una "solución realista como resultado de un acuerdo de paz negociado", así como un posible despliegue de tropas estadounidenses en el país. Esas garantías deben ser respaldadas por "tropas europeas y no europeas capaces", ha matizado. "Si estos soldados se envían como fuerzas de paz a Ucrania en cualquier momento, deberían ser desplegadas como parte de una misión no perteneciente a la OTAN y no deberían estar cubiertas por el Artículo 5", ha añadido en referencia a la cláusula de defensa mutua de la alianza.
El titular de Defensa de la Administración Trump ha hecho esas declaraciones en una reunión en Bruselas del Grupo de Contacto de Defensa de Ucrania, que aglutina a unas 50 naciones y se formó después de que Rusia lanzara la invasión a gran escala en 2022. A veces se le denomina Grupo Ramstein, por la base aérea estadounidense en Alemania, donde se reunió por primera vez. El secretario de Defensa de Reino Unido, John Healey, preside esta nueva cita del grupo.
Primera reunión entre los titulares de Defensa de Ucrania y de EE.UU.
Horas antes, el ministro de Defensa ucraniano, Rustem Umerov, ha confirmado que en la mañana de este miércoles ha mantenido una primera reunión con el nuevo secretario de Defensa de Estados Unidos, de la Administración de Donald Trump, quien ha insistido en la necesidad de poner fin a la guerra de Ucrania y ha amenazado con cortar la ayuda militar al país.
Esta reunión es parte del viaje de una semana de Hegseth a Alemania, Bélgica y Polonia para intercambiar con sus aliados europeos sobre el fortalecimiento de la disuasión, el apoyo a los combatientes y el avance de los intereses de seguridad nacional de Estados Unidos. Hegseth ha adelantado que busca presionar a estos socios para que gasten más en defensa.
El esperado encuentro entre ambos se produce tras la liberación de Marc Fogel, un maestro estadounidense de 63 años detenido en Rusia en 2021 por ingresar al país con cannabis medicinal y condenado en 2022 a 14 años de cárcel. Fue recibido la noche del martes por el presidente de EE.UU., Donald Trump, en la Casa Blanca.
El Kremlin ha confirmado este lunes su excarcelación como parte de un canje con Estados Unidos, que en los "próximos días" pondrá en libertad a un nacional ruso. "Este ciudadano ruso será devuelto a Rusia en los próximos días. Cuando se encuentre en territorio ruso se conocerá su nombre", ha señalado el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa telefónica diaria.
Peskov ha destacado que en los últimos días se han intensificado los contactos entre Moscú y Washington, cuyo resultado ha sido este nuevo canje de prisioneros, el primero con la Administración Trump. El portavoz del Kremlin ha considerado que este acuerdo supone "cierto paso hacia el incremento de confianza mutua, que ahora se encuentra en su punto más bajo", aunque ha descartado que suponga un "punto de inflexión". Por su parte, la Casa Blanca celebró el martes en un comunicado la liberación de Fogel como un presagio de la mejora de las relaciones con Rusia y un posible avance en las negociaciones para poner fin a la guerra en Ucrania.
Mientras se mantienen contactos de alto nivel de EE.UU. tanto con Rusia como con Ucrania, continúan los ataques mutuos. Rusia ha llevado a cabo la madrugada de miércoles un ataque con misiles balísticos que ha causado explosiones múltiples en Kiev. Las autoridades ucranianas han confirmado un muerto y cuatro heridos. Horas después, Ucrania ha respondido con un ataque con drones en la región rusa de Belgorod, donde ha muerto una mujer por el impacto de uno de los proyectiles contra su vehículo, ha confirmado el gobernador de la región, Vyacheslav Gladkov.
Rusia también ha acusado este miércoles a Ucrania del lanzamiento de un dron que habría impactado cerca de la central nuclear de Zaporiyia, en la localidad de Energodar. El dron ha caído en un aparcamiento a 300 metros de uno de los reactores, según ha declarado el gobernador instalado por Rusia en el área bajo su control en la región de Zaporiyia, Yevgueni Balitski. Los gestores de la planta han informado de que no se ha producido ninguna violación de la seguridad y que los niveles de radiación en la zona son normales.
Zelenski, abierto a un intercambio de territorios
Además, el Kremlin rechazó este miércoles un posible canje de los distritos fronterizos ocupados por Ucrania en la región de Kursk por territorios bajo control del Ejército ruso en Ucrania. "Esto es imposible. Rusia nunca abordó ni abordará el asunto del intercambio de nuestro territorio", ha asegurado Dmitri Peskov en su rueda de prensa diaria. "Por supuesto, las unidades ucranianas serán expulsadas de este territorio, todos. Aquellos que no sean expulsados, serán liquidados", ha subrayado el portavoz ruso en referencia a las recientes declaraciones del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, quien por primera vez se ha mostrado abierto a la posibilidad de un intercambio de territorios en el marco de unas futuras negociaciones de paz con Rusia.
En una entrevista con el periódico británico The Guardian, publicada el martes, el mandatario ucraniano afirmó que, si se diera el caso, estaría dispuesto a renunciar al territorio que Kiev mantiene en la región rusa. "Intercambiaremos un territorio por otro", declaró Zelenski, aunque no aclaró qué parte de las tierras ocupadas por Rusia pediría Ucrania a cambio: "No lo sé, ya veremos. Pero todos nuestros territorios son importantes, no hay ninguna prioridad".
El pasado 6 de febrero se cumplieron seis meses de la incursión ucraniana en Kursk, audaz operación que cogió totalmente desprevenida a la guardia fronteriza rusa. Desde entonces, los rusos han conseguido recuperar más del 60 % del territorio bajo control ucraniano, pero no han podido expulsar al enemigo. Zelenski ha dejado claro desde el inicio de esa ofensiva que Kiev se planteaba utilizar Kursk como "moneda de cambio", sin precisar el objetivo de dicho canje. En estos momentos, Rusia controla algo menos del 20% del territorio de Ucrania, mientras que las tropas ucranianas resisten en unos 450 kilómetros cuadrados en la región de Kursk.
Sus declaraciones se producen días antes de la Conferencia de Seguridad de Múnich (Alemania), que comienza este viernes y donde se espera que Zelenski se reúna con el vicepresidente de Estados Unidos, J.D. Vance, para abordar el arreglo al conflicto.