menú principal Noticias
Elecciones México | Análisis

Claudia Sheinbaum, una presidenta continuista que hereda de AMLO los grandes problemas de México

Claudia Sheinbaum, la sucesora de López Obrador: ¿qué retos tiene la primera presidenta de México?
MIGUEL CHARTE / VÍDEO DIGITAL
Tiempo de lectura 9 min.

Claudia Sheinbaum se convertirá en la primera mujer en dirigir México tras su victoria en las elecciones celebradas este domingo. Aparte de este hecho histórico, lo cierto es que ella misma ha repetido durante la campaña que su política continuará la de su mentor, jefe de su partido (Morena) y actual presidente, Andrés Manuel López Obrador (al que muchos llaman con las siglas de su nombre, AMLO).

"Le debe buena parte de su carrera, y sí parece que es una convencida de sus políticas", explica a RTVE.es María Fernanda Somuano, doctora en Ciencias Políticas e investigadora del Colegio de México. Sin embargo, "claramente no tiene su carisma".

Junto con el cargo, Sheinbaum herederá también los grandes retos del país que siguen pendientes, como la seguridad, la financiación pública o la inmigración. "La prioridad debería ser una reforma fiscal. El Estado no tiene recursos", subraya el doctor en Gobierno y Administración Pública y profesor en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) de México Ignacio García.

Continuismo respecto a López Obrador

La carrera de Claudia Sheinbaum (Ciudad de México, 1962), doctora en Física y exacadémica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), ha discurrido a la sombra de López Obrador desde el 2000, año en que se incorporó al gabinete de AMLO como gobernador de Ciudad de México. En 2018 se convirtió en la primera mujer en ocupar ese cargo.

Durante la campaña y en los debates con los otros candidatos (Xóchitl Gálvez, de la coalición Fuerza y Corazón, y Jorge Álvarez Máynez, de Movimiento Ciudadano), Sheinbaum se ha dedicado a defender los logros de AMLO, así como su propias credenciales como exgobernadora de Ciudad de México.

Elecciones en México: ¿quién es Claudia Sheinbaum?

"Todo lo que ha dicho públicamente en el último año ha sido un claro seguimiento de López Obrador. Todo lo que se sabe públicamente es que va a seguir sus pasos", confirma Ignacio García. "Su administración, al menos en los dos primeros años, se definirá por una gran continuidad - abunda - A partir de los dos años, cuando se tiene que renovar una parte del legislativo, podríamos ver algún cambio, y sobre todo hacia el final del mandato".

García destaca además que, aunque abandone la Presidencia, AMLO seguirá teniendo el control de Morena. "Muchos senadores y diputados pueden ser más 'lópezobradoristas', como ellos mismos dicen, que 'morenistas'".

"Claramente, Sheinbaum no tiene el carisma, no es capaz de aglutinar las fuerzas y los diferentes bloques que aglutina López Obrador - coincide María Fernanda Somuano - A ella se le van a exigir resultados".

Carlos Malamud, investigador del Real Instituto Elcano, ha explicado en el Canal 24 Horas de TVE que la ganadora "ha logrado beneficiarse del gran apoyo popular de López Obrador, que es uno de los presidentes latinoamericanos con un gran prestigio entre la gente, en gran medida por la reducción importantísima de la pobreza, y por la forma en que se ocupó de la pandemia. Pero a la vez tiene grandes desafíos comenzando por la violencia". 

"El problema es si va a poder ir más allá. - ha añadido Malamud - En campaña solo podía declararse ferozmente continuista. La gran pregunta es si, como ocurrió en otras fases de la historia mexicana, va a poder 'matar al padre', romper con la gestión de López Obrador. Pero su gestión le deja ataduras, como la gran subida de las pensiones va a hipotecar una buena parte de las políticas públicas".  

La gran novedad es que será la primera vez que una mujer está al frente del Estado en un país donde el 90% de los feminicidios y violaciones quedan impunes.

“Esto sí es algo histórico, es una muy buena noticia”, opina Somuano. Para García, tiene una importancia "simbólica". "Hablamos de uno de los países con una mayor tasa de feminicidios en todo el mundo, y donde la situación de las mujeres en el país es muy precaria”.

Carlos Malamud (RIE): "Sheinbaum se ha beneficiado del gran apoyo que tiene López Obrador"

Inseguridad, deuda y servicios públicos precarios

El primer reto al que se enfrentará Sheinbaum es el de la creciente inseguridad, un asunto que ha marcado la campaña, con asesinatos políticos y renuncia de candidatos. También aquí la candidata ha defendido la perspectiva de AMLO.

"Habla de continuidad incluso en las cosas que se cuestionan más, como la militarización de la estrategia de seguridad, que ha sido absolutamente un fracaso”, explica Somuano.

El otro gran problema será el de la financiación del gasto público. Durante el mandato de AMLO, la presión sobre las cuentas públicas ha aumentado por los programas de atención social y por las obras de infraestructuras faraónicas, que han sido su marca personal (el Tren Maya, el nuevo aeropuerto de Ciudad de México y la Refinería Olmeca, entre otras). Al mismo tiempo, servicios como la sanidad y educación se mantienen en un estado precario.

El Estado se financia con créditos: el Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó el 15 de noviembre de 2023 un nuevo acuerdo de dos años por un valor de 35.000 millones de dólares (32.000 millones de euros). Al terminar 2023, la deuda del sector público se situó en el 44,6% del PIB. Según el organismo, en 2028 podría llegar al 50,2%.

"La prioridad debería ser, en primer lugar, una reforma fiscal", considera Ignacio García. "México es el país de la OCDE donde se recauda menos en relación con el PIB. Los impuestos o la carga fiscal son relativamente bajos, pero la evasión fiscal es muy alta. El Estado no tiene recursos, y precisamente por eso López Obrador ha utilizado muchos fondos que el Estado tenía para emergencias o pensiones, etc., porque no ha querido aumentar los impuestos, y el Estado no tiene recursos económicos. Sin esta reforma fiscal es imposible hacer una lucha creíble, por ejemplo, contra la violencia o contra la pobreza, o el fortalecimiento de políticas públicas”

“La presión sobre el gasto va a ser muy alta porque López Obrador nunca quiso hacer una reforma fiscal, ni siquiera la propuso - coincide la investigadora del Colegio de México - De algún lado van a tener que sacar el dinero para continuar con los programas sociales y para concluir las obras”.

En su senda continuista, lo más probable es que Sheinbaum siga apostando también por las grandes empresas públicas de petróleo y electricidad (Pemex y CFE). Algunas declaraciones sobre energías limpias y lucha contra cambio climático pueden hacer pensar que la nueva presidenta podría ser más ambiciosa en este aspecto. 

Morena, en el camino del PRI

Otra prioridad política del sexenio de Sheinbaum debería ser tender puentes, buscar consensos políticos. La campaña ha puesto de manifiesto la polarización política mexicana. Sin embargo, los temores a que no se reconociera el resultado los ha disipado la misma Sheinbaum al asegurar que había recibido las llamadas de felicitación de sus rivales Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez.

El propio López Obrador ha tenido varios choques con la oposición y con el poder judicial y mostró su voluntad de eliminar el Instituto Nacional Electoral (INE), el organismo autónomo que organiza las elecciones.

Ignacio García recuerda que "la dictadura mexicana del siglo pasado se basó en gran parte en el hecho de que el gobierno organizó las elecciones y el PRI [Partido de la Revolución Institucional] fue el partido ganador en comisiones que no eran creíbles. Esta es una amenaza muy grave para la democracia mexicana”.

Los resultados del conteo rápido del INE apuntan a que Morena podría tener una "supermayoría", o "mayoría calificada", en ambas cámaras. ¿Podría Morena acabar convirtiéndose en el PRI, el partido que gobernó México durante 70 años apoyándose en la corrupción y el fraude electoral?

García piensa que “estamos en ese camino". Somuano destaca que muchos antiguos priistas militan ahora en el partido de AMLO, pero puntualiza que todo dependerá de si los resultados del sexenio de Sheinbaum permiten al partido ganar un tercer mandato. “Morena es el partido de López Obrador, cuesta trabajo pensarlo como un partido institucionalizado (…) Una vez que se vaya el líder, si es que se va, no estoy segura de que logren mantenerse unidos. Sheinbaum claramente no es la figura que los va a unir".

La inmigración, la gran ausente

La inmigración es otro de los grandes asuntos de México y el que más influye en las relaciones con el vecino del Norte. Sin embargo, ha sido la gran ausente de las elecciones, en la que los candidatos solo se han acordado de los mexicanos que viven en EE.UU. y que pueden votar. En este asunto tampoco se prevé que Sheinbaum introduzca cambios.

Según la Organización Internacional de Migraciones (OIM), en 2023 se alcanzaron cifras "nunca vistas" de tránsito y llegada irregular de migrantes. Más de 2,5 millones fueron interceptados en la frontera con EE.UU. En su mayoría son centroamericanos, entre ellos, menores no acompañados y mujeres, que son víctimas de violencia sexual.

Los mexicanos, sin embargo, no perciben que la situación les afecte. Según una encuesta elaborada en 2021 por el Centro de Investigación y Dodencia Económicas (CIDE), la inmigración ocupaba el penúltimo puesto en una lista de 12 preocupaciones personales. Al mismo tiempo, el 69% estaba en desacuerdo con la construcción de muros que impidan la entrada al país, y el 76,6% creía importante invertir más en recursos para dar refugio a los extranjeros. 

"Hay tantos problemas que la migración ni está en la agenda ni la sociedad la percibe como uno de los principales", explica a RTVE.es Elena Sánchez-Montijano, coordinadora del grupo de investigación sobre Migraciones del CIDE.

La investigadora destaca que Sheinbaum solo se ha comprometido, como hizo AMLO, a atajar las “raíces” de la inmigración mediante la cooperación con los países centroamericanos, además de apuntar a una reforma sin concretar del Instituto Nacional de Migraciones y la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR). "La cosa va a seguir absolutamente igual - se lamenta - O sea, gente pasando, jugándose la vida, muriendo, y ningún acuerdo con otros países de América Latina, ningún acuerdo más igualitario con Estados Unidos”.

La política migratoria vendrá precisamente marcada por la relación con el vecino del norte y con quien ocupe la Casa Blanca tras las elecciones de noviembre. El actual presidente, el demócrata Joe Biden, comenzó el mandato revirtiendo algunas políticas de su antecesor, Donald Trump, pero con el tiempo se ha acercado a las propuestas del republicano.

Carlos Malaud vaticina que, en caso de que gane Trump, la relación bilateral puede atravesar "turbulencias muy marcadas".

Biden ha prometido "cerrar la frontera" con México. Si gana Trump podría presionar a México para que recibir a migrantes expulsados en deportaciones masivas.