Rusia y China han vetado este viernes la propuesta de resolución presentada por Estados Unidos ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para un alto el fuego en la Franja de Gaza.
La proposición ha contado con el respaldo de once integrantes del máximo órgano ejecutivo de la ONU, además de con el rechazo de Argelia y la abstención de Guyana.
Nueve votos favorables bastan para aprobar una resolución, pero los votos negativos de dos miembros permanentes, en este caso Rusia y China, han impedido que su acuerdo.
Es la cuarta vez que una resolución en este sentido es vetada por algún estado miembro, en las tres ocasiones anteriores fue Estados Unidos quien ejerció ese poder, argumentando que en esos casos no se recogía el derecho de Israel a defenderse y, que permitían de hecho el rearme y reorganización de Hamás.
Una proposición "ambigua"
La resolución rechazada este viernes, que se había negociado durante un mes y necesitó al menos seis borradores, ha sido rechazada por su vocabulario equívoco, pues, en palabras del embajador ruso, Vasili Nebenzia, previas al voto, no llamaba claramente al alto el fuego, sino que se limitaba a considerar "imperativo un alto el fuego inmediato y sostenido para proteger a los civiles de ambas partes".
Nebenzia ha matizado que la resolución presentada por EE.UU. es "una iniciativa hipócrita diseñada para desorientar a la comunidad internacional". Además, ha lamentado que las propuestas rusas para enmendar el texto hayan sido sistemáticamente rechazadas por Washington y ha considerado que el texto votado "supone de hecho la luz verde para que Israel lleve a cabo una operación militar en Ráfah".
En cuanto al embajador de Argelia, Amar Bendjama, ha explicado que su rechazo no solo representaba a su país, sino "a todo el mundo árabe", y ha afirmado que el texto de la resolución de EE.UU. "no transmite un mensaje claro de paz, sino que tácitamente permite que continúen (cayendo) las víctimas civiles y carece de salvaguardas para una futura escalada" del conflicto.
El embajador chino, Zhang Jun, también ha considerado el texto votado como "ambiguo", porque "no llama claramente a un alto el fuego" y porque "se desvía del consenso de los miembros del Consejo y queda lejos de las expectativas de la comunidad internacional", además de contener condiciones para ese alto el fuego.
Negociaciones paralelas para un alto el fuego
En este momento se negocia en paralelo en el Consejo de Seguridad otra resolución con un lenguaje más claro sobre el alto el fuego y, mientras que Rusia y China han dicho que apoyará esa otra resolución, queda por ver cuál será la actitud de Estados Unidos, que podría vetarlo.
Al mismo tiempo, Estados Unidos apadrina otras negociaciones indirectas en Doha (Catar) entre Hamás e Israel con vistas a un canje de prisioneros entre las dos partes y una eventual tregua.
También este jueves la Unión Europea pidió una "pausa humanitaria inmediata" que "conduzca a un alto el fuego sostenible", primera postura común en este sentido en el club europeo, donde Israel cuenta con sólidos aliados como Alemania u Holanda.
Toda esta actividad política y diplomática se ha intensificado después de que el lunes se conociera un dramático informe de la ONU que aseguraba que 1,1 millones de gazatíes se encontraban a punto de entrar en "inseguridad alimentaria catastrófica", el grado más grave de hambruna.