La Comisión Ejecutiva Federal del PSOE ha abierto este martes expediente disciplinario al diputado socialista y exministro de Transportes José Luis Ábalos y le ha suspendido cautelarmente de militancia tras su decisión de mantener el escaño y pasarse al Grupo Mixto.
El PSOE ha tomado esta decisión tras haber dado "por unanimidad" un ultimátum de 24 horas a Ábalos para que renunciase al acta de parlamentario a raíz de la supuesta trama de comisiones ilegales durante la pandemia que afecta a su exasesor, Koldo García. Sin embargo, el diputado ha anunciado en una rueda de prensa que mantiene su acta en el Congreso, pasando al Grupo Mixto.
Ábalos ha justificado su decisión en la necesidad de defender su "honorabilidad". "No puedo rendirme. Si yo renunciara en este momento, se interpretaría como signo de culpabilidad y solo provocaría mi estigmatización no solo política sino personal. Sé lo que es ser un apestado político", ha dicho.
Su decisión podría incurrir en faltas graves y muy graves
Ante esto, el PSOE ha emitido una resolución –firmada por el actual 'número 3' del partido, Santos Cerdán– en la que señala que desoír su petición y no renunciar al acta de diputado podría constituir una falta grave de "obstrucción a la labor y decisiones de los órganos del partido".
Además, podría incurrir en faltas muy graves por actuar en contra de los acuerdos adoptados por la dirección socialista y "menoscabar la imagen de los cargos públicos o de las instituciones socialistas", así como por el abandono del cargo público "sin la previa autorización del órgano competente del Partido" o imposibilitar la representación del PSOE en las instituciones.
En este sentido, la Ejecutiva recuerda que, conforme a los estatutos federales, el cumplimiento tanto del reglamento del partido como de las decisiones adoptadas por los órganos competentes "son un principio organizativo". Y en el caso de que un afiliado incumpla las normas de la formación, tenga una mala conducta, falte al programa o a los acuerdos, exprese públicamente sus opiniones en "términos irresponsables" o injurie o calumnie a alguna persona que pertenezca al partido, podrá ser sancionado.
Podría ser inhabilitado o expulsado del partido
Ahora, el PSOE estudiará en profundidad el caso, con la posibilidad de llegar más lejos con las sanciones previstas si finalmente se prueban algunas de las faltas imputadas a Ábalos, con medidas como la suspensión de afiliación, la inhabilitación para cargos públicos y orgánicos por un periodo de entre dos y 18 meses o de 18 meses a 36 meses, e incluso la expulsión del partido.
Por su parte, Ábalos dispone de un plazo de cinco días para hacer llegar al instructor de su expediente en Ferraz las pruebas que estime oportunas para defenderse de estas acusaciones de su propio partido.
Minutos antes de que la Comisión socialista emitiera la resolución disciplinaria, el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, ha lamentado que Ábalos haya decidido mantener el acta como diputado, a pesar de que el PSOE exigió su renuncia por el caso Koldo. "Es un día muy triste", ha afirmado Patxi López en los pasillos del Congreso a su llegada al pleno, al mismo tiempo que en la sala de prensa de la Cámara Baja Ábalos finalizaba su comparecencia sin preguntas.