El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha cifrado en 646 las rebajas a condenados por delitos sexuales y en 65 las excarcelaciones por el nuevo marco de penas que recoge la ley 'del solo sí es sí', según fuentes del Consejo General del Poder Judicial.
Este cálculo provisional ha sido elaborado por el CGPJ a partir de los datos facilitados por el Tribunal Supremo, los tribunales superiores de justicia autonómicos y las audiencias provinciales. El propio Consejo dará a conocer este martes los datos detallados en base a la información recopilada por los tribunales.
Fuentes jurídicas han señalado que los datos facilitados corresponden a aquellas sentencias ya revisadas que han experimentado una reducción de penas. De las pendientes de revisión, se dispondrá de datos más adelante al depender de los Letrados de la Administración de Justicia, que se encuentran en huelga indefinida desde el pasado 24 de enero.
Además, se proporcionarán datos de sentencias dictadas bajo la vigencia de la nueva ley del 'solo sí es sí' por delitos cometidos con la anterior ley y cuya pena se ve favorecida por la retroactividad.
El CGPJ acordó en Pleno solicitar ahora a los Tribunales Superiores de Justicia (TSJ) y a las audiencias provinciales las resoluciones dictadas en relación con la aplicación de la conocida como 'ley del solo sí es sí'.
La reforma de esta medida por parte del PSOE en solitario en un intento por frenar el goteo de reducción de penas es uno de los asuntos que más fricción ha generado con sus socios de Gobierno, Unidas Podemos.
Las numerosas reducciones de penas a acusados de agresión sexual llevó al PSOE a plantear una reforma de la ley impulsada por el Ministerio de Igualdad, medida que no contó con el beneplácito de Unidas Podemos. El debate se fue enconando y el ala socialista decidió el pasado 6 de febrero presentar unilateralmente en el Congreso su reforma con el fin de aumentar las penas cuando haya violencia o intimidación.
Desde el Ministerio de Igualdad reprochan al PSOE que con dicha reforma intentan volver al modelo anterior, que denominan el Código 'de la Manada' y que esta propuesta elimina el pilar fundamental de la ley, el consentimiento.
Los ‘morados’ siempre han sostenido que el problema de las rebajas es la "incorrecta aplicación" de algunos jueces, bien por su "machismo" o porque no aplican los agravantes que establece la ley.
En una entrevista en Telecinco este lunes, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido la reforma, al tiempo que ha mostrado su deseo de alcanzar un acuerdo con Podemos. "Ojalá podamos llegar a ese acuerdo", ha explicado. "La propuesta del PSOE es pública y la conoce todo el mundo, claramente preserva todo lo bueno de esa ley, pero corrige aquellas cuestiones que ahora mismo lamentablemente están dando paso a este malestar y esa alarma social", ha dicho.
El PSOE aboga por recuperar la horquilla de penas anterior
La reforma del PSOE de la ley 'solo sí es sí' recupera la horquilla de penas, de uno a cinco años, que se recogían para las agresiones sexuales sin penetración en el Código Penal en 2010, la última reforma que sufrió este texto antes de volver a cambiar con la norma impulsada por el Ministerio de Igualdad. Cuando sí sea violación con penetración, las penas serán de entre seis y 12 cuando sí la haya, y las condenas suben cuando hay agravantes.
Hace trece años, el Código Penal distinguía entre abuso y agresión sexual y, para esta última, que definía como "atentado contra la libertad sexual de otra persona, utilizando violencia o intimidación" recogía penas de prisión de entre uno a cinco. Además, y según recogía en el artículo 179, cuando la agresión sexual consistiera en "acceso carnal por vía vaginal, anal o bucal, o introducción de miembros corporales u objetos por alguna de las dos primeras vías", estas penas se elevaban a entre seis y 12 años de prisión, mientras que ahora la pena mínima es de cuatro.
Los socialistas quieren recuperar ahora estas horquillas con la propuesta de ley registrada en el Congreso, modificando la ley del 'solo sí es sí', aunque han dejado claro que no se va a tocar el consentimiento ni separarán de nuevo las figuras de abuso y agresión: todo es agresión.
Unidas Podemos insiste: "Nunca nos hemos levantado de la mesa"
A pesar de la propuesta de reforma socialista, desde el Ministerio de Igualdad defienden que quieren seguir negociando y que "el acuerdo es posible siempre que se mantenga el consentimiento".
Con la nueva norma, el consentimiento expreso ha pasado a ser la pieza clave para juzgar los delitos sexuales y quedó finalmente definido así en la ley: "Solo se entenderá que hay consentimiento cuando se haya manifestado libremente, mediante actos que, en atención a las circunstancias del caso, expresen de manera clara la voluntad de la persona".
Fuentes de Igualdad han reiterado en este tiempo que "la voluntad de acuerdo por parte de Igualdad es absoluta" y han mantenido que el ministerio que dirige Irene Montero "nunca se ha levantado de la mesa y la disposición a negociar siempre ha sido plena".
A pesar de estos intentos, desde Igualdad creen que es un "escenario posible" que el PSOE reforme en solitario con los votos del PP y ceda ante las "presiones" de la "derecha política, judicial y mediática" para volver al "modelo anterior".