En un año marcado por la guerra en Ucrania, la OTAN ha mostrado la unidad entre los aliados en un frente común contra Rusia. La Alianza ha renovado su hoja de ruta, en la que sitúa al país presidido por Vladímir Putin como su principal "amenaza", y continúa enviando ayuda militar a Ucrania. TVE entrevista a su secretario general, el noruego Jens Stoltenberg, con motivo del primer aniversario del conflicto.
Stoltenberg: "La guerra acabará en una mesa de negociación"
PREGUNTA: Ha pasado un año ya de la guerra en Ucrania. Usted, como secretario general de la OTAN
RESPUESTA: Ha pasado un año de la guera más brutal, la mayor que hemos visto en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Nos sorprende la brutalidad, pero no tendríamos que estar sorprendidos. Esta guerra es parte de un patrón que ha utilizado el presidente Putin para utilizar la fuerza militar contra sus vecinos en Georgia, pero también en Ucrania, desde 2014, para controlar estos países. Eso es lo que estamos viendo ahora mismo en Ucrania. Pero también vemos la valentía, el valor de los ucranianos levantándose para defender su derecho de autodefensa y su propio país.
P: También ha avisado muchas veces de que fue Putin quien comenzó esta guerra, que él es el único que puede pararla. ¿Espera que lo haga?
R: No vemos señales de que el presidente Putin se esté preparando para la paz, vemos lo contrario. Está lanzando nuevas ofensivas, enviando más tropas, más equipamiento. Sacrifica a decenas de miles de soldados rusos en un intento fallido de controlar Ucrania. Por esta razón, tenemos que apoyar a Ucrania. Si el presidente Putin gana, será una tragedia, pero también será muy peligroso para nosotros y entonces el mensaje para él y para otros líderes autoritarios será que cuando utilicen la fuerza militar, cuando violan el derecho internacional, consiguen lo que quieren y el mundo. En ese caso, sería más peligroso y nosotros seríamos más vulnerables.
P: ¿Hasta dónde pueden llegar los aliados en su apoyo? Me refiero al envío de armas, pero no solo de artillería o sistemas de defensa de misiles, sino de tanques o de esos famosos aviones de combate.
R: La realidad es que esta es la única manera de lograr la paz. Posiblemente, esta guerra acabará en una mesa de negociación, pero para que eso ocurra, para que se dé esa mesa de negociación, eso depende de la situación que se dé en el campo de batalla. Si queremos una solución política negociada pacífica en la que Ucrania prevalece como nación soberana, en ese caso tenemos que apoyarles con armas.
Putin promete dar "todo" a su ejército sin límite de presupuesto
P: Hemos visto como la OTAN en este tiempo ha reforzado sus sistemas de disuasión y de defensa. Pero yo le pregunto si esto es suficiente, si hay que ir más allá, y no sólo por la amenaza que pueda suponer Rusia, sino también por otros regímenes autoritarios.
R: Sobre todo desde 2014, cuando Rusia entró en Ucrania por primera vez, la OTAN ha fortalecido su sistema de defensa colectiva y disuasión de manera significativa, sobre todo en el flanco oriental de la Alianza. España forma parte de eso, de nuestra presencia en la región del mar Báltico con más policía aérea. Lo hacemos, no para provocar un conflicto, sino para evitarlo, para preservar la paz, para que cualquier adversario potencial sepa que toda la Alianza reaccionaría, que un ataque a un aliado desencadenaría la respuesta de toda la Alianza. Uno para todos y todos para uno. Así, ningún país de la OTAN será atacado. Por supuesto tenemos que hacer lo más peligroso por esta razón. En los últimos años hemos invertido más en defensa. Y desde la cumbre de la OTAN de Madrid, decidimos hacer más, juntos. Estamos en un mundo más peligroso y tenemos que invertir más en nuestra seguridad.
P: Ha habido quien ha echado de menos al secretario general de la OTAN en Kiev, o a Vladímir Zelenski aquí, en Bruselas, cuando ha visitado la capital comunitaria. ¿Cómo tenemos que interpretar ese gesto si se diera esa foto? No sé si es que la OTAN teme que haya un malentendido.
“Estamos maximizando el mensaje de que un ataque a uno desencadenaría una respuesta de todos los aliados“
R: Siempre está el riesgo de escalada, pero si no hacemos nada... el riesgo de escalada es obvio. Porque el presidente Putin, cada vez que utiliza su fuerza, - la fuerza militar contra su propio pueblo en Chechenia o la brutal invasión de Georgia en 2008, o el caso de Alepo, en Siria, o el caso ilegal de Crimea cuando entraron en el Donbás en 2014-, siempre consigue lo que quiere. Ahí sí que hay riesgo de escalada. Yo creo que la forma de minimizar ese riesgo de escalada es ser firmes, ser claros. Y eso es lo que están haciendo los aliados de la OTAN aumentando su presencia en el flanco oriental en Polonia, en los países bálticos, en Rumanía. Envían un mensaje claro a Moscú y hace que entienda completamente que lo que estamos haciendo es proteger a nuestros aliados. Estamos maximizando el mensaje de que un ataque a uno desencadenaría una respuesta de todos los aliados.
P: Usted se va a ir ya a casa. No sabemos si es en octubre, si será en abril, pero ya ha hecho público que no va a renovar su mandato después de casi nueve años y, sobre todo, con esta guerra inesperada a las puertas de Europa. ¿Cuál diría usted que ha sido el gran cambio de la OTAN durante todo su mandato?
R: El gran cambio es que nos hemos dado cuenta de que el período tras la Guerra Fría ha acabado. Creíamos que era posible construir una mejor relación con Rusia. Hemos buscado eso durante muchos años. Eso se ha deteriorado en los últimos años, por supuesto, con la invasión, a escala total, de Ucrania por Rusia. Rusia decidió alejarse de cualquier tipo de alianza con la OTAN. Por lo tanto tenemos que estar juntos como aliados Norteamérica y Europa para preservar la paz.