La primera jornada del paro indefinido de la Plataforma Nacional en Defensa del Sector del Transporte en Madrid ha transcurrido este lunes sin incidencias, mientras los transportistas se han manifestado en las calles de Madrid al estar “hartos de engaños y de ser saqueados por todos lados”. Por su parte, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, ha considerado que no hay razones para la movilización.
Raquel Sánchez llama a los transportistas a "no sumarse a un paro que no contribuye a nada"
Pese al poco seguimiento, el presidente de la Plataforma, Manuel Hernández, se ha mostrado "satisfecho" con el desarrollo de la primera jornada de paro, que ha arrancado en Madrid con una manifestación desde Atocha hasta el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. La concentración ha congregado a cerca de 1.500 transportistas, según los cálculos policiales, y a decenas de miles, de acuerdo con los cifras aportadas por los convocantes.
Los transportistas han aparcado los camiones cerca del Wanda Metropolitano y han marchado a pie por las calles de Madrid, con un recorrido por el paseo del Prado, Cibeles, Recoletos, plaza de Colón y Castellana. La manifestación ha arrancado en el paseo de Infanta Isabel y ha finalizado en Nuevos Ministerios, lo que ha provocado cortes de tráfico en la zona centro.
La movilización arrancó a medianoche, la convoca la misma plataforma que en marzo protagonizó un paro del transporte que duró veinte días y provocó problemas en la cadena de suministro. De momento, es la única organización que respalda estas movilizaciones. Las principales patronales se han descolgado (Fenadismer, Fedetrans, CEOE, Cepyme y ATA). "Es una convocatoria extrema y la situación no lo justifica" ha dicho en La noche en 24 horas Julio Villaescusa, presidente de Fenadismer.
La plataforma convocante, que agrupa a autónomos y pequeñas empresas, aunque no se conoce su número de asociados, denuncia que las autoridades no han vigilado lo suficiente el cumplimiento de la Ley de costes y de la Ley de carga y descarga, que controlan y evitan que los transportistas trabajen a pérdidas.
Normalidad en los nodos logísticos
La jornada también ha transcurrido con normalidad en las principales plataformas de distribución, como en el Puerto de Algeciras, donde no se han notado los efectos del paro.
El mercado central de abastecimiento Mercamadrid ha estado funcionando con "absoluta normalidad" en la entrada de mercancías y presencia policial. La entrada de productos también ha sido normal, "la misma que todos los lunes", en referencia a que el primer día de la semana hay menos actividad y parte de sus instalaciones están cerradas. En el acceso había "presencia policial", pero la situación ha sido muy diferente a la de marzo, cuando Mercamadrid llegó a ver reducida hasta un 50% la entrada de sus productos algunos días.
En la Zona Franca de Barcelona, la dinámica ha sido la habitual de un lunes y se ha desconvocado una concentración que estaba prevista. En Mercasevilla, no se ha producido ningún incidente, la tranquilidad era la tónica dominante.
El equipo de TVE acompaña a un transportista para ver cuál ha sido el efecto de la ley aprobada por el Gobierno, si es suficiente o si faltan cosas por hacer.
Denuncian la falta de compromiso del Ministerio de Transporte
Tras no ser recibidos por ningún representante del Ministerio de Transportes, Hernández ha advertido de unas "Navidades muy oscuras" si no se buscan soluciones para que se garantice el cumplimiento de la ley, aprobada hace unos meses, que prohíbe que los transportistas trabajen por debajo de costes.
"Lamentablemente no hemos recibido ninguna llamada, así que vamos a seguir el paro cada transportista desde su provincia", ha dicho a los medios de comunicación.
Sin embargo, ha explicado que no es intención de su colectivo que la protesta se prolongue tanto como la del pasado marzo, que duró 20 días y puso contra las cuerdas a la cadena de distribución logística española, a la vez que asegura que la protesta no busca "hacer daño" a ningún sector.
La huelga ha sido convocada para este lunes 14 tras una votación interna de la Plataforma Nacional en Defensa del Sector del Transporte en la que el 96% de los votos refrendaron la convocatoria. Los sindicatos mayoritarios, UGT y CC.OO., han rechazado estos paros y no secundarán la convocatoria, al igual que el Comité Nacional del Transporte por Carretera.
El paro es de carácter indefinido y se produce muy cerca del 25 de noviembre, día del Black Friday, una fecha en la que el consumo se dispara y, por tanto, las entregas de reparto. En el horizonte está también la campaña de Navidad.
Por su parte, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, ha calificado de "mínima" la incidencia de la protesta, con un total de 14 incidencias registradas a primera hora de la mañana que no han evitado que la jornada haya transcurrido con absoluta normalidad.
Sánchez ha agradecido a todos los transportistas que han decidido no secundar el paro convocado por la Plataforma, y ha vuelto a recordar que éste "carece de justificación", ya que no contribuye a solucionar los problemas del sector y "puede dañar los intereses de otros sectores económicos y al conjunto de la sociedad".
Un coste estimado de 600 millones al día
Al tratarse de un cese de actividad ante periodos de gran consumo, el paro indefinido podría costar a la economía 600 millones de euros al día, según la previsión del profesor de OBS Business School Eduardo Irastorza, con datos extraídos del informe sobre el Black Friday, durante el cual se calcula que las ventas en España se incrementen en un 706%.
El aumento de los precios, especialmente del combustible, ha provocado un aumento en el coste de la actividad de los transportistas, que exigen al Ministerio que cumpla con la normativa aprobada para evitar que trabajen a pérdidas.
En marzo, la huelga de transporte llegó a paralizar parcialmente parte de la economía al ralentizar o detener los repartos. El efecto de este nuevo paro dependerá del número de transportistas que secunden la convocatoria y de su duración.