Tras la dimisión de Mario Draghi, Italia acudirá a las urnas este domingo 25 de septiembre. Enrico Letta -que fue primer ministro entre 2013 y 2014- encabeza la candidatura del Partido Democrático (PD). A dos días de los comicios, ha ofrecido una entrevista en el informativo 24 horas de Radio Nacional de España.
Los últimos sondeos publicados auguran una clara victoria del bloque de derecha y extrema derecha. La Liga de Matteo Salvini, Forza Italia de Berlusconi y los Hermanos de Italia de Giorgia Meloni acordaron concurrir unidos bajo el lema Por Italia. Para Letta, "Italia juega una partida fundametal para su futuro". Concretamente, cree que una victoria de "la derecha populista cambiaría el destino de Europa" y alejaría a Italia de la posición europeísta que Draghi había conseguido mantener. "Si Italia se pone al lado de Hungría y Polonia para debilitar a Europa, sería un mensaje pésimo con consecuencias muy negativas para todos", lamenta Letta.
La crisis energética se cola en la campaña
La crisis financiera de 2008 -seguida de la migratoria, la pandemia o la invasión de Ucrania- han hecho, según Letta, mella en el electorado italiano. Esta tendencia habría escalado durante la presente campaña: "El coste de la energía, que en Italia es insoportable, es una de las causas de este descontento". La guerra energética de Putin, según explica Letta, "está ayudando a las fuerzas populistas en Italia".
“La guerra energética de Putin está ayudando a las fuerzas populistas en Italia“
Tras Hermanos de Italia, los sondeos sitúan a la formación de Letta como segunda fuerza. Sin embargo, la alianza de Meloni con Salvini y Berlusconi dejan al bloque derechista como ganador. Tras sufrir importantes escisiones, el Movimiento Cinco Estrellas comparece en solitario a los comicios. También el centro-izquierda se encuentra facturado, con el Partido Democrático como formación principal. Preguntado por la posibilidad de sumar con el resto de fuerzas, Letta insiste en que el sistema electoral italiano es muy mayoritario y, por tanto, "no es una cuestión de alianzas", sino de convencer a los electores. Con todo, carga contra Giuseppe Comte, líder del Movimiento Cinco Estrellas, por haber dejado caer el ejecutivo de Draghi: "Hicieron una irresponsabilidad tremenda y la derecha se ha aprovechado de ello".