Los abogados del expresidente estadounidense Donald Trump han indicado este lunes que se oponen a la petición del Departamento de Justicia de seguir revisando los documentos clasificados incautados por el FBI en su finca de Florida el mes pasado en una investigación criminal en curso. "No deje al Gobierno saltarse el proceso", han dicho en un escrito de 21 páginas incluido en el expediente de este caso.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó el pasado jueves una notificación de intención de apelar el fallo de la jueza Aileen Cannon, quien accedió a que un magistrado especial revise como independiente los documentos confiscados al expresidente y quitó el acceso a los archivos a los funcionarios federales.
De esta forma, el Departamento de Justicia no puede seguir revisando el material incautado o utilizarlo en el marco de la investigación hasta que el perito no finalice su análisis o hasta nueva orden judicial.
Ahora, en una presentación judicial, los abogados de Trump se han opuesto a la apelación y han pedido a la jueza que exija al magistrado especial que incluya los aproximadamente 100 documentos denominados como altamente clasificados en su análisis.
En el escrito, los letrados han alegado que Trump disputa la afirmación del Departamento de Justicia de que los 100 registros en cuestión son clasificados, y han recordado a Cannon que un presidente generalmente tiene amplios poderes para desclasificar registros.
Sin embargo, se han abstenido de sugerir que Trump había desclasificado los documentos, una afirmación que ha hecho el expresidente en las redes sociales, pero no en presentación judicial oficial. "Sigue habiendo un desacuerdo en cuanto al estado de clasificación de los documentos", han escrito los abogados. "La posición del Gobierno, por lo tanto, asume un hecho aún no establecido", han señalado.
Trump: "Es un intento desesperado por evitar que vuelva a la Casa Blanca"
Trump está siendo investigado por retener en su residencia de Mar-a-Lago expedientes y archivos del Gobierno, algunos de los cuales estaban marcados como altamente clasificados, después de dejar el cargo en enero de 2021. Asimismo, el Gobierno de Joe Biden está estudiando la posible obstrucción de la investigación.
"En lo que en el fondo es una disputa de almacenamiento de documentos que se ha salido de control, el Gobierno busca erróneamente criminalizar la posesión por parte del 45º presidente de sus propios registros presidenciales y personales", han declarado los abogados de Trump.
"Por lo tanto, no se debe permitir que el Gobierno se salte el proceso y proceda directamente a una conclusión preestablecida", han añadido. Los abogados manifiestan, además, que la orden de la jueza es "un paso preliminar sensato hacia la restauración del orden en medio del caos".
"Los demócratas están inmersos en un intento desesperado por evitar que vuelva a la Casa Blanca, donde saben que limpiaré este desastre de nuevo", denunció Trump el pasado 4 de septiembre durante la campaña electoral para las legislativas.
El Departamento de Justicia amenazan con apelar
Por otro lado, el enfrentamiento entre el Departamento de Justicia y Trump sobre cómo tratar el material clasificado pone a Cannon, que fue nombrada en 2020 por Trump, en una situación complicada para tomar una decisión. Si decide que el Departamento de Justicia no puede seguir basándose en el material clasificado para su investigación, los fiscales han amenazado con apelar al Tribunal de Apelaciones del 11º Circuito de Estados Unidos, con sede en Atlanta.
Al fallar a favor de la solicitud de Trump de un maestro especial la semana pasada, Cannon ya rechazó los argumentos del Departamento de Justicia de que los registros pertenecen al gobierno y que porque Trump ya no es presidente no puede reclamar el privilegio ejecutivo. Y si el magistrado especial decide que parte del material está cubierto por las reclamaciones de privilegio de Trump, podría obstaculizar la investigación del gobierno.
La investigación de los documentos es una de las varias investigaciones federales y estatales a las que se enfrenta Trump por su época de presidente y en los negocios privados. Ha sugerido que podría presentarse de nuevo a la presidencia en 2024, pero no ha asumido ningún compromiso.