España ha atravesado este verano tres grandes olas de calor en la Península y Baleares cuyo efecto ya se ha notado en la agricultura, en las reservas de agua y en la mortalidad. Han sido 42 días con los termómetros por encima de lo normal, que suponen en torno al 45% de la duración del verano climatológico, según el balance provisional de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) al que ha tenido acceso DatosRTVE. Por su parte, Canarias ha registrado otras dos olas de calor, de tres días cada una, que se han concentrado en el mes de julio.
Los termómetros de la Península y Baleares compenzaron a subir el 12 de junio, en una primera ola de calor especialmente temprana que se extendió hasta el día 18 del mismo mes. La segunda abarcó casi todo el mes de julio, provocada por una dorsal de altas presiones asociada a aire cálido, y produjo la anomalía térmica más alta de la serie peninsular: 4,6 ºC. Además, una tercera ola de calor afectó a 27 provincias entre el 30 de julio y el 15 de agosto.
Aunque no existe una definición única de ola de calor, la AEMET considera como tal los episodios de tres o más días consecutivos en los que las temperaturas máximas suben por encima de un determinado umbral. Según este criterio, hasta junio de 2022 se han registrado 110 olas de calor en el conjunto de España.
Una ola de calor temprana y la anomalía térmica más alta
La primera ola de calor del verano de 2022 llegó a la península el pasado 12 de junio, convirtiéndose en la más temprana desde 1981. Duró siete días, con una anomalía térmica de 3,2 ºC. Y los datos provisionales obtenidos por la AEMET indican que es la tercera más extensa de la serie, ya que afectó a 39 provincias de la Península y Baleares.
El 9 de julio comenzó la segunda ola de calor de 2022 en territorio peninsular. Las altas temperaturas nos acompañaron durante 18 días, y el 16 de julio llegaron a afectar a 43 provincias. Según el avance de AEMET, esto la convierte en la más extensa de la serie histórica. Asimismo, esta ola de calor destaca por registrar una anomalía térmica de 4,6 ºC, la más elevada en la Península y Baleares desde 1975.
La tercera ola de calor registrada en la Península comenzó apenas cuatro días después del final de la anterior y se extendió durate 17 días, entre el 30 de julio y el 15 de agosto. La jornada más calurosa y con más territorios afectados fue el 2 de agosto, cuando los termómetros alcanzaron los 36,1 ºC y la ola se extendio a 27 provincias.
Por su parte, Canarias registró dos olas de calor en el verano de 2022. La primera se produjo entre el 9 y el 11 de julio y la segunda entre los días 24 y 26 del mismo mes.
Olas más tempranas, frecuentes y duraderas
La serie histórica de olas de calor de AEMET arranca en 1975. Su análisis permite encontrar desde la ola que más días duró, 26 días entre junio y julio de 2015, hasta la más extensa, que afectó a 43 provincias de toda España en julio de este año.
A la espera del balance de 2022, el verano de 2003 es el más caluroso hasta la fecha, con una temperatura media a nivel nacional de 23,6 ºC. Sin embargo, 2022 ya ha sido el año que más días de olas de calor ha tenido. Las 42 jornadas de anomalías térmicas en la Península y Baleares de este verano quedan a mucha distancia de las 29 registrados en 2015 o las 25 de 2017.
En cuanto a número de olas registradas cada año, destaca 2012, con siete olas de calor: tres en la península, Baleares, Ceuta y Melilla y cuatro en Canarias. Sin embargo, 2022 ha superado a ese mismo año en número de provincias afectadas. En total, 43 territorios han sufirdo temperaturas anormalmente cálidas entre los meses de junio y septiembre.
En Canarias, 1976 es el año con más días de ola de calor: 25. También el que tiene la ola más larga, con 14 días de duración. En cuanto a las temperaturas medias de cada ola, la más alta se alcanzó en junio de 2012, con 39 ºC.
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De la ola de calor más larga a la más extensa
El verano de 2015 destaca por registrar la ola más larga desde el comienzo de la serie. Del 27 de junio al 22 de julio de aquel año, España vivió un periodo de temperaturas excepcionalmente altas que afectó a 30 provincias de la Península y Baleares.
Durante los 26 días que duró aquella ola, los termómetros tan solo dieron un pequeño respiro el día 2 y el día 11 de julio. Si bien la AEMET indica que “hubo zonas en las que prácticamente no se notó”, en cualquier caso, el respiro “no llegó a ser suficiente para interrumpir la ola de calor”.
La segunda ola más larga desde que hay registros se produjo en julio de 2022. Con 18 días de duración, esta anomalía se ha convertido además en la más extensa de la serie. Con una anomalía térmica de 4,6 ºC, esta ola afectó a 43 provincias. Son significativas las máximas registradas en el municipio sevillano de Morón de la Frontera (45,2 ºC), en el cacereño de Navalmoral de la Mata (44,9 ºC) o en Talavera de la Reina, en Toledo (44,9 ºC).
En cuanto a Canarias, la ola de calor más destacable es la que afectó a la provincia de Santa Cruz de Tenerife entre el 28 de agosto y el 10 de septiembre de 1976, con 14 días de duración. Además, todo el archipiélago se vio afectado por una ola de calor que se extendió durante 11 días, entre el 5 y el 15 de agosto de ese mismo año.
Metodología
Para elaborar esta información se utiliza la definición de ‘ola de calor’ recogida en la actualización de junio de 2019 del registro de Olas de calor en España desde 1975 del Área de Climatología y Aplicaciones Operativas de la Agencia Estatal de Meteorología, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO).
“Se considera ‘Ola de calor’ un episodio de al menos tres días consecutivos, en que como mínimo del 10% de las estaciones [con un mínimo de dos en Canarias] consideradas registran máximas por encima del percentil 95% de su serie de temperaturas máximas diarias de los meses de julio y agosto del periodo 1971-2000”.
La fuente explica que solo se estudia el periodo comprendido entre el 1 de junio y el 30 de septiembre de cada año. Además, en sus cálculos, AEMET solo tiene en consideración las estaciones que están actualmente en funcionamiento y que tienen una serie suficientemente larga para poder calcular sus percentiles.
La ‘temperatura máxima de la ola’ es un dato representativo que la Agencia Estatal de Meteorología calcula como la media de las temperaturas máximas de las estaciones con algún día de episodio cálido durante la ola de calor.
Los datos que aparecen en las tablas y mapas de temperaturas máximas han sido extraídos del cruce de los datos climatológicos procesados y agrupados para cada día en la web de datos abiertos de la AEMET con el listado de Provincias afectadas por las olas de calor de 2021. Para ello, se ha recurrido a la librería de R Climaemet, desarrollada por Manuel Pizarro, Diego Hernangómez y Gema Fernández-Avilés en 2021.