La líder depuesta y nobel de la paz birmana Aung San Suu Kyi fue condenada este viernes por parte de la junta militar a tres años de cárcel por fraude electoral en 2020, unos comicios que su partido ganó con mayoría absoluta. Esta nueva pena se suma a los 17 años de prisión a los que fue sentenciada anteriormente por diversos cargos de los que ella se declara inocente.
Un tribunal de Naipyidó halló culpable a Suu Kyi y a otros dos miembros de su partido, la Liga Nacional para la Democracia (LND), de fraude en las elecciones de noviembre de 2020, tres meses antes del golpe militar de febrero de 2021 que la derrocó, informó el medio Khit Thit.
Según fuentes conocedoras del caso a la agencia AFP, la exlíder birmana "fue condenada a tres años de prisión con trabajos forzados".
Condenada en varias ocasiones
Suu Kyi, de 77 años y bajo arresto desde el golpe, ha sido condenada por variopintos cargos desde entonces. La última condena fue hace solo un par de semanas, cuando le impusieron seis años de cárcel por diversos casos de corrupción que le atribuyen, y no se descarta que sume más años de prisión ya que tiene varios cargos pendientes.
La líder derrocada recibió en abril una pena de cinco años de prisión por aceptar sobornos por valor de 600.000 dólares y 11,4 kilos de oro por parte del exgobernador de Rangún Phyo Min Thein, quien testificó en octubre contra ella.
En enero, fue condenada a cuatro años de prisión por saltarse las medidas contra la propagación de la COVID-19 y por la importación ilegal de dispositivos de telecomunicaciones
Y en diciembre de 2021 fue condenada a cuatro años, rebajados a dos por un indulto parcial de la junta militar, por vulnerar leyes contra la pandemia e incitación contra las autoridades.