El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado que si no se termina de concretar el gasoducto MidCat, que supondría la interconexión de la Península Ibérica con Francia, entonces el Ejecutivo apostaría por abordar un gasoducto con Italia.
Así lo ha expresado durante una rueda de prensa ofrecida desde Colombia durante su gira por Latinoamérica. "Si no se puede hacer con Francia, hay una alternativa que es hacer la interconexión con Italia".
"Si no sale adelante el plan A, pues habrá que buscar el plan B, y el plan B es la interconexión de la Península Ibérica con Italia", ha destacado Sánchez.
El líder del Ejecutivo ha destacado que dentro del proyecto RePowerEU figura la interconexión pirenaica de la Península Ibérica con Francia, y ha trasladado la determinación del Gobierno para afrontar esta infraestructura prioritaria.
El Gobierno francés cree que "no respondería a la crisis actual"
"Si no se puede hacer por dificultades de política doméstica, hay una alternativa que está también inscrita en el proyecto que es hacer la interconexión de España con Italia", ha subrayado el presidente.
La semana pasada, el gobierno francés valoró que el MidCat "tardaría mucho en estar operativo" y "por tanto, no respondería a la crisis actual".
Alemania planteó recuperar el proyecto de transportar gas desde Portugal y España hacia el resto de Europa, tras años de apostar por una energía barata rusa y escarmentada ahora por su dependencia energética de Moscú.
Crisis energética
Con la mirada puesta en el invierno, la Unión Europea busca formas de hacer frente a la crisis energética derivada de la guerra en Ucrania.
Desde España y Portugal han abordado el alza de los precios con la excepción ibérica, medida que permite abaratar el precio de la luz. Esta medida posibilita a ambos países poner un tope al precio del gas en el mercado mayorista.
Francia, por su parte, ha hecho una gran apuesta por la energía nuclear para mantener su independencia energética y construirá, en principio, seis nuevo reactores, además de ampliar la vida a los ya existentes.
Por el contrario, el canciller aleman, Olaf Sholz, aseguró que "no dará más vida" a las nucleares y apostó por la interconexión gasística entre Francia y la Península Ibérica. Sholz indicó que ese gasoducto que no ve claro el gobierno de Macron "hubiera contribuido masivamente a relajar la situación actual" de problemas de abastecimiento que afronta su país y otros del centro y del este de Europa, y que ese conducto que "hubiera podido construirse" ahora "se echa de menos".