Miles de personas ataviadas de blanco y con pañuelos rojos han dado la bienvenida en una abarrotada plaza del Ayuntamiento de Pamplona, a los Sanfermines 2022 con un multitudinario chupinazo, pese a la lluvia que ha marcado el regreso de la fiesta tras dos años de parón por la pandemia.
El exfutbolista Juan Carlos Unzué, encargado de prender este mediodía la mecha del chupinazo, ha dedicado el chupinazo "a todos los sanitarios, y las personas que nos han ayudado en toda la pandemia y también a todos los enfermos con ELA, especialmente a Moncho", antes de pronunciar las tradicionales palabras: "¡Viva San Fermín, Gora San Fermín!".
Sanfermines 2022 - Especial Chupinazo en Radio 5 - Escuchar ahora
"La sensación es que he vivido muchos momentos de presión, de partidos importantes, pero siempre con la sensación de que se podía repetir, este no se va a repetir, este es único e irrepetible", ha dicho Unzué en declaraciones a la prensa solo unos minutos antes del chupinazo que marca el inicio de ocho días y medio de fiesta ininterrumpida, hasta el 16 de julio.
El propio Juan Carlos Unzué acudió ya al Ayuntamiento de Pamplona este lunes para preparar el chupinazo y en su visita aprovechó para saludar y mantener un breve encuentro con el alcalde de Pamplona, Enrique Maya.
Desde que en 2020 hizo público que padecía ELA, Unzué se ha convertido en un referente de la visibilización y la lucha contra esta enfermedad, protagonizando campañas, charlas, documentales y libros en los que cuenta en primera persona su convivencia con la esclerosis lateral amiotrófica.
Un dispositivo de 2.500 agentes
Un dispositivo formado por más de 2.500 agentes, entre Policía Nacional, Guardia Civil, Policía Municipal y Policía foral vigila que todo transcurra con normalidad durante las fiestas, con una novedad, cuatro drones que sobrevuelan la zona concurrida.
Tras las suspensiones de 2020 y 2021 a causa de la pandemia, estos son los Sanfermines más esperados de la historia con un mensaje que el Ayuntamiento de Pamplona quiere transmitir a quienes lleguen estos días a la ciudad: "Bienvenidos a las fiestas más grandes del mundo".
Con la asistencia de miles de personas al chupinazo en la plaza consistorial o en los cuatro puntos habilitados con pantallas gigantes (en la Plaza del Castillo, el paseo de Sarasate, el parque de Antoniutti y la plaza de los Fueros) comienzan un año más las tradiciones propias de cada 6 de julio: almuerzos en bares, restaurantes y locales improvisados, el ambiente callejero, la comida, el Riau-Riau, los toros y las cenas.
Vuelven los encierros
Estas fiestas, que tienen un presupuesto de 1,7 millones de euros, cuentan con un programa oficial con un total de 532 actos oficiales, el primero de ellos, tras el chupinazo, la Biribilketa de Gainza, interpretada en la plaza consistorial por La Pamplonesa y los txistularis. Desde hace más de 40 años, esta pieza se interpreta dentro del zaguán del Ayuntamiento debido a la gran concurrencia de público en la plaza.
A partir de ese momento se da inicio a un amplio repertorio de conciertos, verbenas, fuegos artificiales, exposiciones, animación de calle y actividades infantiles y familiares. Tampoco faltarán las citas tradicionales como los encierros, la Procesión, las Vísperas o la Octava.
Tras el primer día de fiestas, llegarán a Pamplona los encierros, cada jornada a las 8 de la mañana, desde los corrales de Santo Domingo hasta la plaza de toros. La ganadería que protagonizará el primer encierro será Núñez del Cuvillo y a ella le seguirán en los días sucesivos Fuente Ymbro, José Escolar, La Palmosilla, Cebada Gago, Jandilla, Victoriano del Río Cortés y Miura.
Tras dos años sin fiestas por culpa de la pandemia de COVID-19, los pamploneses han dado la bienvenida a los Sanfermines con el tradicional almuerzo previo al chupinazo que ni siquiera la lluvia que ha caído desde las 8 de la mañana ha impedido que se lleve a cabo. Cuadrillas y familias han acudido a peñas, sociedades y bares a almorzar desde primera hora de la mañana. Ya de madrugada una granizada amenazaba a Pamplona, pero tras dos años de suspensión no hay nada que pare a las miles de personas que inundan ya el Casco Viejo.
Debido a las suspensiones de 2020 y 2021, estos serán los primeros Sanfermines para el Gobierno de Navarra liderado por la socialista María Chivite, quien ha invitado a disfrutar de las fiestas con "respeto y convivencia".