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El PSOE se hunde en Andalucía con su peor resultado histórico

ROCÍO GIL GRANDE
6 min.

El PSOE, lejos de remontar en el que hasta hace cuatro años era su principal bastión autonómico, sigue hundiéndose en Andalucía. La candidatura de Juan Espadas ha conseguido en estas elecciones autonómicas su peor resultado histórico con 30 escaños, tres menos respecto a los que consiguió su antecesora, Susana Díaz, en 2018. Con un 24,09% de los votos, los socialistas se han dejado 3,85 puntos porcentuales respecto a hace casi cuatro años, cuando ganaron los comicios aunque no consiguieron formar gobierno. Los 30 escaños del PSOE son menos que los 32 que el PP ha conseguido nuevos en estas elecciones y que le permiten gobernar en solitario con mayoría absoluta de 58 escaños.

El candidato ha destacado tras conocer los resultados que “lo más importante” es “saber levantarse” de las derrotas y ha dicho que, desde este lunes, seguirá “en pie para volver a recuperar la confianza en Andalucía”. Así, ha prometido ejercer una “oposición contundente, eficaz y útil”: “Vamos a seguir defendiendo, con más fuerza que nunca, los servicios públicos, los derechos de las mujeres, el empleo de calidad, el Día de Andalucía y la democracia”. Pero ha avisado: “Dentro de cuatro años el PSOE volverá a ser un partido de gobierno en Andalucía”.

A su juicio, la derrota socialista y el mal resultado de la izquierda (Por Andalucía se queda en 5 diputados y Adelante Andalucía en 2) se debe a la “desmovilización”. Cuando baja la participación, ha dicho, “pierde la izquierda”. Y es que el dato de participación en estos comicios ha sido del 58,35%. También ha achacado su derrota al adelanto electoral, ya que el PSOE ha tenido “siete meses” tras las primarias de hace un año para conformar su proyecto político tras las primarias de hace un año, y a que Moreno “no ha dudado en usar la propaganda y toda la Junta de Andalucía para ir cocinando la opinión pública y un relato que no se corresponde con la Andalucía real”.

El PSOE no se recupera de la pérdida del gobierno en 2018

Espadas no ha logrado hacer remontar al PSOE tras el ‘shock’ que supuso en 2018 perder por primera vez el gobierno de la Junta en casi cuatro décadas con el que ya entonces fue su peor resultado histórico. Al menos entonces los socialistas ganaron las elecciones, pero este 19J Espadas ha llevado a los socialistas a su segunda derrota en Andalucía (la primera fue en 2012 ante el PP de Javier Arenas, pero entonces el PSOE pudo gobernar con el apoyo de IU).

El candidato, que era alcalde de Sevilla, tan solo lleva un año al frente del PSOE-A, tras imponerse a Díaz en las primarias de hace un año en una apuesta de Ferraz y del presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez. Díaz había tratado de aferrarse al cargo, pero Sánchez movió ficha para desterrar, por fin, al ‘susanismo’ del PSOE. Apostó por Espadas, que no era muy conocido entre los andaluces (pese a su buena reputación entre los alcaldes), pero el cambio de liderazgo se hizo con poco tiempo para que pudiera desarrollar e impulsar su candidatura antes de estos comicios, que Moreno adelantó unos meses a junio.

Finalmente, Espadas no ha logrado despegar y se han cumplido los peores pronósticos para el PSOE, que tampoco puede sumar con los dos partidos que tiene a su izquierda: Por Andalucía (cinco escaños) y Adelante Andalucía (dos). Sin duda, es un mal resultado para la izquierda, que se queda muy lejos de los 58 escaños que ha logrado el PP de Juanma Moreno, que se ha impuesto como vencedor incontestable con mayoría absoluta.

Y los socialistas, pese a sus victorias electorales pasadas, llevan en caída desde 2004. Ese año obtuvieron una aplastante mayoría con el 50,36% de los votos. Bajaron al 48,41% en 2008, al 39,56% en 2012, al 35,41% en 2015, y al 27,94% en 2018. Ahora, se ha dejado casi cuatro puntos porcentuales respecto a entonces.

El fracaso del PSOE andaluz se suma también al currículo de derrotas de Sánchez en las elecciones autonómicas que ha habido en España en los últimos dos años. Es la tercera derrota consecutiva ante el PP desde las elecciones en Madrid en mayo de 2021. Perdió también los comicios de Castilla y León el pasado mes de febrero. Y antes, el PSOE retrocedió considerablemente en Galicia (donde pasó a ser tercera fuerza tras En Marea). Al menos, los socialistas lograron la victoria con Salvador Illa en las catalanas de 2021 (sin poder gobernar ante la suma del independentismo) y mantuvieron el tipo en las elecciones vascas de 2020.

Precisamente, Sánchez ha felicitado en Twitter a Juanma Moreno por su victoria, pero también al candidato socialista por "el gran trabajo realizado", así como a los andaluces que han "confiado" en el PSOE. "Nuestro partido será siempre garante de los servicios públicos, la igualdad y los derechos sociales", ha zanjado.

Ferraz ha criticado que éstas han sido unas elecciones "diseñadas, pensadas y convocadas por el PP contra Espadas", como ha asegurado la vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, que también ha mencionado una "estrategia" del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, para consolidar su poder en los territorios. Pero ha desligado los resultados del escenario político nacional: "El PSOE sigue liderando las encuestas nacionales, el PP mantiene tres gobiernos que ya ostentaba y cambia de aliados, de centro a ultraderecha en Castilla y León. Es el único cambio del camino emprendido por Feijóo".

Ni una provincia teñida de rojo

Los socialistas no se han impuesto en ninguna de las ocho provincias andaluzas, que dejan un mapa de un azul uniforme con la victoria indiscutible del PP. Un mapa muy distinto al de 2018, cuando el PSOE fue la primera fuerza en todas las provincias salvo en Almería, donde se impuso el Partido Popular.

Los tres escaños menos que tiene el PSOE los ha perdido, respectivamente, en Sevilla, Córdoba y Cádiz. En estas provincias ha logrado cinco, tres y tres diputados. Y en el resto de provincias mantiene los mismos asientos que consiguió en 2018: tres en Almería y cuatro en Huelva, Málaga, Granada y Jaén.

Llama la atención también que los socialistas han conseguido menos de la mitad de los votos que ha logrado el PP en Cádiz, Málaga y Almería.

Respecto a los municipios, el PSOE no consigue imponerse tampoco en ninguna de las ocho capitales de provincia, donde ha ganado el PP. Con ello, los socialistas pierden la hegemonía en las capitales de Málaga, Sevilla, Huelva y Cádiz.

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