Hace calor, mucho calor. Este 2022, la primera ola de altas temperaturas ha sido más madrugadora que de costumbre y ha llegado con más de 42 grados en el suroeste peninsular. Pero no demasiados se están atreviendo a encender el aire acondicionado. Este gesto ahora cuesta más de 10 céntimos más caro que el pasado año. "Ahora tiramos con lo de antes, con el típico ventilador", añade un paseante a TVE.
El precio de la electricidad está este junio por encima de los 200 euros el MWh y, según el comparador de tarifas Selectra, el aire acondicionado supone un gasto de 44 céntimos por hora en la franja más cara, mientras que en 2021 significaba 33 céntimos por hora.
De acuerdo a la directora de comunicación de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), Ileana Izverniceanu, esta subida va a significar 36 euros adicionales al mes, aparte de la factura eléctrica habitual. Datos que tienen en cuenta solo un consumo aproximado de cinco horas al día.
Ponerlo a menos de 25 grados aumenta el consumo
Además, poner el aire acondicionado a menos de 25 grados puede hacer que se resienta mucho más el bolsillo.
"Cada grado que disminuyamos la temperatura aumentará el consumo en un 8% e incrementará nuestra factura de la luz a final de mes", explica el portavoz de Selectra, Joaquín Segura, a TVE.
Por este motivo, muchos se han pasado al ventilador, un aparato eléctrico que, en el caso de los ventiladores de techo, supone un gasto de tres céntimos la hora. Un 93% más barato que el aire.
Desde las organizaciones de consumidores recuerdan, además, que el aire acondicionado es uno de los electrodomésticos que más pueden subir el recibo de los que están en el mercado regulado.
Por eso, para rebajar el consumo, los expertos recomiendan limpiar filtros, tener aparatos eficientes y mantener la casa cerrada en las horas centrales del día.