El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha asegurado que los soldados rusos que luchan en Ucrania lo hacen "por la madre patria", y ha culpado a Occidente de provocar la guerra en su discurso del Día de la Victoria en Moscú.
"Es lo mismo ahora, estáis luchando por nuestra seguridad ahora en el Donbás, por la seguridad de Rusia (...) Lucháis por vuestra madre patria", ha dicho Putin en la celebración del 77º aniversario de la victoria soviética sobre el nazismo en la Segunda Guerra Mundial.
Putin se ha referido varias veces a la región del este de Ucrania, cuyo control es la prioridad de Rusia en este momento de la guerra. "Hoy las milicias del Donbás, junto al Ejército ruso, luchan en su propia tierra (...). Ahora me dirijo a nuestras tropas y milicias en el Donbás: están luchando por su patria, por su futuro, para que nadie olvide las lecciones de Segunda Guerra Mundial, para que no haya sitio para los nazis", ha declarado Putin en su discurso en la Plaza Roja.
Para los rusos, el día 9 de mayo, el Día de la Victoria, es un símbolo de orgullo nacional. Esta fiesta nacional rusa conmemora con un desfile militar por las principales avenidas de Moscú, la victoria histórica de la Unión Soviética sobre la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial.
"Era la única decisión posible"
Putin no ha hecho ningún anuncio nuevo o llamativo. Se temía que pudiera aprovechar esta fecha, de gran simbolismo en Rusia, para declarar la guerra contra Ucrania (hasta ahora, ha calificado la invasión iniciada el 24 de febrero como una "operación militar especial") y declarar una movilización general. En lugar de eso, ha reiterado las supuestas razones de seguridad de Rusia para invadir Ucrania y ha culpado a Occidente.
"En diciembre del año pasado propusimos un acuerdo de garantías de seguridad, soluciones de compromiso, pero no nos quisieron escuchar, tenían otros planes (...) Estaban preparando una agresión sobre el Donbás y en Crimea", ha subrayado.
"Hemos visto cómo se despliegan infraestructuras militares - ha afirmado Putin - cómo cientos de expertos extranjeros trabajaban en Ucrania, cómo estaban suministrando armamento de la OTAN. Estaban creando una amenaza insostenible frente a nuestras fronteras".
Ha subrayado que la guerra era "inevitable". "Era la única decisión posible, la decisión de un país fuerte y soberano", ha dicho, y ha advertido, mencionando explícitamente a Estados Unidos, que "Rusia ha cambiado, tiene un carácter diferente". No obstante, ha llamado a evitar "el horror de una guerra global".
Por otra parte, el presidente ruso ha hecho hincapié en que su país "nunca dejará de lado el amor por la patria, la fe y los valores tradicionales". "En Occidente, aparentemente, han decidido cancelar estos valores milenarios. Esta degradación moral es la base para la cínica falsificación de la historia de la Segunda Guerra Mundial, incitando a la rusofobia, aplaudiendo a traidores y burlándose de la memoria de las víctimas", ha criticado.
Putin ha asegurado que un grupo de veteranos estadounidenses querían participar en el desfile, pero su gobierno no se lo ha permitido, y ha honrado a "todos los guerreros aliados, ingleses, franceses, americanos, los partisanos de China, todos los que contribuyeron a la derrota del nazismo".
Promesa de ayuda a las familias de los soldados
El presidente ruso se ha referido a los soldados caídos. "La muerte de cada soldado y oficial es dolorosa para nosotros. El Estado hará todo lo posible para cuidar de estas familias", ha asegurado.
En otro momento de su discurso, Putin ha rendido homenaje "ante la memoria de los mártires de Odesa, que fueron quemados vivos en la Casa de los Sindicatos en mayo de 2014, ante la memoria de los ancianos, las mujeres y los niños del Donbás, los civiles que murieron a causa de los bombardeos despiadados, los bárbaros ataques neonazis".
Putin ha terminado su discurso con un grito de ánimo a los soldados y al público. "¡Por Rusia, por la victoria, hurrah!".