El presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, ha advertido que no descarta romper el acuerdo de investidura de su partido, ERC, con el Gobierno por el presunto espionaje derivado del 'caso Pegasus'. "Podría llegar a caer", ha señalado Aragonès al ser preguntado por una posible ruptura en una entrevista en TVE.
Además, ha especificado que su apoyo al Gobierno de España estará condicionado por la toma de medidas y la "asunción de responsabilidades" frente al supuesto espionaje sufrido por él y otros 60 políticos soberanistas mediante Pegasus, un programa de inteligencia israelí que solo pueden adquirir los Gobiernos.
Durante la entrevista en La Noche en 24 Horas con Xabier Fortes, Aragonès ha señalado este jueves "a los servicios de inteligencia" españoles como responsables del acto.
"Queremos saber quién dio la orden, a quién se ha espiado, con qué propósito y qué datos han utilizado y se conservan", ha recalcado el 'president'.
"El mayor caso de espionaje de las últimas décadas"
Al ser preguntado por la posibilidad de que el actual presidente del Gobierno o el anterior estuviesen al tanto de las escuchas, Aragonès ha recalcado que no puede "afirmar ni una cosa ni la otra", pero qué es importante ver "cuál será la reacción del Gobierno", para tomar decisiones, ante lo que es para él "el mayor caso de espionaje de las últimas décadas".
"Moncloa no se está posicionando. No son tajantes. Es imprescindible transparencia", ha exigido antes de señalar que "la confianza es la base de los acuerdos parlamentarios", y ahora mismo carecen de ella desde el gobierno catalán.
Respecto a la posición de su partido y cómo actuará ERC en futuras votaciones en el Congreso, el 'president' de la Generalitat ha recordado al Ejecutivo "podría caer" si no asumen responsabilidades y no son "transparentes".
El presidente de la Generalitat ha reclamado al Gobierno que haga una investigación para aclarar lo ocurrido y ha señalado que "ante un hecho de esta dimensión se necesita un procedimiento específico". "La ciudadanía tiene derecho a saber qué ha pasado y qué consecuencias conlleva", ha añadido.
No cree que todo pueda continuar "como hasta ahora"
Si ha querido remarcar que la mesa de diálogo entre el ejecutivo autonómico y el central no seguirá por el momento. "Es muy difícil pensar que todo puede continuar como hasta ahora. Esto va más allá que unas conversaciones telefónicas".
Y recalca que lo ocurrido "impide que haya las condiciones" para que la mesa de diálogo "pueda avanzar si no se restaura la confianza".
Sin embargo, no ha pedido la dimisión de Sánchez, como sí han hecho otros líderes soberanistas como Laura Borrás de JxCat. "Ahora es el momento de pedir transparencia", ha defendido.
Previamente, este jueves en una visita al Congreso de los Diputados se ha reunido con los portavoces de los partidos independentistas catalanes y vascos y con el grupo parlamentario de Unidas Podemos, a los que ha pedido una responsabilidad para "aclarar que ha pasado".
"Quiero poner en valor que Podemos sea una de las fuerzas que no se han visto damnificadas por este caso y han exigido responsabilidades", ha puesto en valor Aragonès para añadir que les han trasladado "que ellos tienen una posibilidad de incidencia que el resto no" porque "ellos forman parte del gobierno y tienen un plus de responsabilidad".