El coordinador federal de Izquierda Unida y ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha cargado este sábado contra el presidente de Castilla y León y candidato del PP a la reelección en este comunidad autónoma, Alfonso Fernández Mañueco, al que ha calificado de "candidato de las macrogranjas" y ha afirmado que estas explotaciones son "un modelo industrial absolutamente perverso".
En un discurso telemático para exponer su informe político durante la reunión de Coordinadora Federal de IU, Garzón ha analizado los comicios en Castilla y León y ha acusado a Mañueco de llevar a cabo una campaña "de mentiras y bulos" destinada a "no hablar de la gestión del PP" en esta región, donde gobierna "desde hace más de 30 años".
El líder de IU -que se encuentra confinado en su domicilio tras dar positivo en coronavirus- ha indicado que la estrategia del Partido Popular calca "la estrategias de la extrema derecha internacional" para "desgastar al adversario" y que "no se hable de los problemas" de Castilla y León. Entre ellos ha citado la despoblación, la precariedad y "el deterioro de los servicios públicos".
"Amenaza para la ganadería tradicional"
Garzón ha insistido en sus críticas a las macrogranjas, "un modelo industrial absolutamente perverso" por razones ecológicas pero también "sociales y económicas", ya que suponen "la principal amenaza de la ganadería tradicional, extensiva y familiar".
"Cuando el PP se posiciona al lado de ese modelo, se posiciona en contra de la mayoría de la población que vive en esos municipios", ha afirmado el ministro de Consumo, quien ha añadido que el "campo de mentiras" que ha generado no solo no ha logrado penetrar en la sociedad sino que ha tenido el efecto contrario, provocando "una huida hacia adelante" por parte de los populares.
Por eso, Garzón ha planteado que la candidatura de Unidas Podemos que encabeza Pablo Fernández tiene por delante el reto de explicar que hay "alternativa" al Ejecutivo del PP y a su "candidato centralista", en alusión Mañueco.
Llamamiento a apoyar la reforma laboral
Durante su intervención, el coordinador federal de IU también ha hecho un llamamiento "a todas las izquierdas", en especial a los socios de investidura, para que apoyen la reforma laboral, aprobada por el Gobierno pero pendiente de su ratificación parlamentaria esta semana. Según Garzón, esta normativa supone un "punto de inflexión" para recuperar los derechos de los trabajadores y "desmontar" las "políticas regresivas" del PP.
Garzón ha destacado que el nuevo marco laboral, liderado por la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, "va a contramano" de todas las aprobadas en los 30 últimos años y "marca un punto de inflexión" ya que, ha dicho, recupera derechos para los trabajadores que estaban recogidos en la Constitución y el Estatuto de los Trabajadores.
Por eso ha pedido a todos los partidos "comprometidos" con los intereses de la clase trabajadora que "empujen" para hacer realidad ese "cambio de ciclo que supone la reforma laboral".
El pasado jueves, ERC, Bildu, CUP y BNG amenazaron con tumbar la reforma laboral si el Gobierno no acepta negociar cambios en el real decreto acordado con la patronal y los sindicatos.
La Coordinadora Federal de Izquierda Unida ha aprobado el Informe Político de coyuntura presentado por Garzón con 98 votos a favor (82%), 18 en contra (15%) y cuatro abtenciones (3%).