Confianza ciega y deseo es el principal motor que guía a hosteleros, agencias de viajes y compañías de transporte. El turismo se encuentra en plena recuperación desde que el coronavirus hundiera todo el sector y dejara datos demoledores capaces de destruir los cimientos que llevan construyéndose desde hace muchos años. El año 2020 se convirtió en la peor pesadilla de los desplazamientos tanto dentro como fuera del país, pero ya se empieza a ver la luz al final del túnel.
La pandemia ha marcado un punto de inflexión en todos los aspectos de la vida, pero principalmente ha perjudicado a este sector. Según los últimos datos del INE, hasta octubre España recibió 24,8 millones de turistas extranjeros frente a los 17,8 millones de 2020. Aunque en fechas previas a la pandemia este dato superaba los 74 millones de turistas extranjeros, la recuperación tiene una tendencia positiva.
Por su parte, las pernoctaciones en hoteles registradas en octubre han experimentado un incremento de sus ingresos de un 38,9% respecto al 2020, según el INE. La demanda de habitaciones para turistas nacionales y extranjeros ha supuesto unos 23,8 millones de euros, es decir, siete millones menos de lo registrado en octubre de 2019, antes de la pandemia.
El PIB turístico ha caído un 43,9 % respecto a su valor previo a la pandemia, mejorando así sus cifras respecto a 2020 que se desplomaba un 65,4%. El cierre del año está marcado por un mercado internacional más débil unido al incremento de gasto turístico de los españoles, que han impulsado el PIB turístico hasta los 87.000 millones de euros.
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Las restricciones han sido el gran obstáculo de los españoles para viajar al extranjero. Los desplazamientos fuera de España en 2019 llegaron a superar los 7,2 millones, mientras que en 2021 la cifra se aproxima al millón, según el INE.
El turismo nacional se encuentra en el lado contrario y vive un momento favorable dada la complejidad de visitar lugares en el extranjero. La ministra de Economía, Nadia Calviño, aseguró en el Consejo de Ministros del pasado 14 de diciembre que "el turismo nacional ha registrado ya niveles superiores a los previos a la pandemia". Además, la vicepresidenta del Gobierno apunta que también "se va recuperando el turismo extranjero".
“El turismo nacional ha registrado ya niveles superiores a los previos a la pandemia“
El verano salva el turismo
A pesar del tardío inicio del turismo de los meses de verano, que se retrasó a finales de julio, el PIB turístico estival de 2021 ha supuesto un 73% del PIB del verano previo a la pandemia. Entre julio y septiembre se alcanzaron valores de 42.632 millones de euros. Agosto fue el mes más demandado para los españoles y el comportamiento de los viajes nacionales en septiembre sufrió una ligera ralentización.
El turismo doméstico se ha recuperado en este año. El consumo turístico de los españoles ha superado un 3,4% los niveles registrados en 2019 debido a la gran aceptación de la población durante los meses de julio y agosto. Las pernoctaciones hoteleras mejoraron sus reservas un 4,2% y los alojamientos reglados suben un 10,8% en relación con el verano prepandemia.
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La eliminación de las restricciones de movilidad entre comunidades autónomas ha sido clave para volver a emprender viajes dentro de la península y en las islas Canarias y Baleares. Esta fuerte apuesta por el mercado interno ha conseguido que los sectores relacionados con el turismo hayan incrementado su actividad en la web ofreciendo ofertas vía online.
Los turistas españoles se han inclinado por organizar sus viajes en coche particular, a la vez que el fenómeno staycation ha cogido fuerza. Este fenómeno se caracteriza por la obligada concentración de viajar a destinos nacionales por las múltiples restricciones sanitarias en lugares extranjeros unidas a la incertidumbre que genera la evolución del virus.
Mientras tanto, los viajes al extranjero siguen sin recuperar sus números dada las restricciones impuestas en otros países respecto a la vacunación de la COVID-19. Además, el miedo a la infección ha hecho que los turistas españoles deseen descubrir entornos desconocidos, alejados de las grandes ciudades y en plena naturaleza donde la probabilidad de contagio es mínima.
Previsiones para 2022
Las previsiones para el próximo año vuelven a colocar al turismo nacional como el principal emisor ante las restricciones de movilidad por la pandemia que afectan a los viajes al extranjero y la llegada de la variante ómicron refuerza esta postura. Profesionales del sector turístico creen que los españoles seguirán apostando por desplazarse dentro del país en 2022 y la tendencia será muy similar a la del último año.
Ramón Estalella, secretario general de CEHAT, confía en que "van a seguir apostando por el turismo nacional, ya que han descubierto que el viaje es un componente importante del ocio y disfrute y así se ha demostrado este año en los puentes". Además, ha afirmado que el turismo nacional mejorará sus datos respecto al último año.
Playa de la Malvarrosa de Valencia en septiembre. EFE / Juan Carlos Cárdenas
El Observatorio Nacional del Turismo Emisor, ObservaTUR, en el que están incluidas unas 5.000 agencias, ha publicado su informe sobre las previsiones para 2022 en el que manifiestan optimismo de cara al próximo año. Aunque siguen sin atreverse a dar una fecha concreta sobre la reactivación del sector, muchos confían en que llegaría en 2023.
Los expertos de ObservaTUR reclaman que se completen los procesos de vacunación en todos los países y piden a los Gobiernos directrices "claras, unificadas y homogéneas" respecto a las restricciones para generar confianza en los viajeros. La mayoría de las agencias creen que el turismo internacional, el de cruceros y parques temáticos se recuperará a lo largo de 2022, pero habría que esperar más allá de comienzos de año.
Desde la Mesa del Turismo de España, mantienen la misma línea sobre el nivel de viajes al extranjero. "Van a continuar viajando por nuestro país, pero es verdad que a medida que vayan cambiando las condiciones y esa vacunación en el resto de países se vaya produciendo habrá una parte de la población española que ya se animará a viajar fuera", ha desvelado Carlos Abella en declaraciones a RTVE.es.
“Habrá una parte de la población española que ya se animará a viajar fuera“
El secretario general de la Mesa de Turismo reconoce que hay un "deseo latente de viajar en todo el mundo" y esta actitud será fundamental para que el turismo vacacional logre activarse por completo tras sufrir pérdidas millonarias como consecuencia de la pandemia. Aun así, las previsiones de cara a 2022 refuerzan el turismo nacional y se espera que los españoles sigan demandando lugares alejados de las aglomeraciones, al espacio libre y en plena naturaleza.
¿Qué hacer en el extranjero el año que viene?
Aunque no ha tenido relevancia a lo largo de este año, el deseo de viajar fuera de España y conocer nuevos entornos permanece vivo entre la población. Los turistas se han adaptado a la situación sanitaria teniendo que cambiar sus tradicionales vacaciones en destinos internacionales por lugares dentro del país. Las restricciones de movilidad son una amenaza tanto para el sector turístico como para la población en general, pues llevan cerca de dos años obedeciendo las medidas impuestas por la COVID-19.
La variante ómicron está volviendo a revolucionar el mundo y la incertidumbre se convierte nuevamente en protagonista. El ritmo de vacunación en España es positivo con el 90% de la población con pauta completa. La industria es optimista y confía en que a partir de 2022 las mejoras en el sector turístico sean manifiestas, aunque la recuperación completa del sector no se conseguirá aún en los próximos 12 meses. Todos coinciden en que el turismo nacional predominará de nuevo frente al resto de viajes, pero los más valientes optarán por volver a salir fuera de España cumpliendo con los protocolos básicos para combatir el virus.
Imagen de archivo de pasaporte COVID. GETTYIMAGES
Entre una de las opciones para recuperar la tradición de viajar al extranjero se encuentra el carnaval de Río de Janeiro. De momento, el evento se celebrará, pero cabe la posibilidad de suspenderlo ante el aumento de los contagios. El alcalde de Río ya se ha visto obligado a suspender la Nochevieja para evitar aglomeraciones que pongan en peligro a la población.
"No voy a crear pánico en la población. Si tenemos que adoptar restricciones, no será solo en Carnaval. Si hay que cancelar, cancelaremos. Planifiquemos hasta el último momento. Todavía queda mucho para Carnaval", apuntó sobre la celebración prevista entre el 25 de febrero y el 5 de marzo.