El informe Barómetro Juventud y Género 2021se ha presentado este miércoles en el Centro Reina Sofía con un resultado llamativo: uno de cada cinco chicos de entre 15 y 29 años niega que exista la violencia machista y opina que es “un invento ideológico”, un porcentaje que tan solo dos años atrás alcanzaba únicamente el 12%. No obstante, a la vez que aumenta esta cifra, el feminismo crece entre las mujeres jóvenes y actualmente un 67,1% se considera feminista, casi un 20% más que en 2019.
La investigación de la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD) lleva analizando la percepción de los adolescentes y jóvenes sobre áreas como las desigualdades de género y la violencia machista desde 2017. Gracias a este seguimiento se ha podido observar cómo el porcentaje de hombres que niegan la violencia de género se ha duplicado. También aumenta entre los varones jóvenes la opinión de que la violencia es inevitable, con un 24,4% en 2021 frente al 21% de hace cuatro años.
El feminismo crece entre las jóvenes
El feminismo continúa creciendo entre las mujeres adolescentes y jóvenes, pero no sigue el mismo camino en el sexo opuesto. Actualmente y de acuerdo con el informe, el porcentaje de chicas que se considera feminista ha pasado del 46,1% al 67,1%. No obstante, el de hombres solo se ha acentuado del 23,6% al 32,8%, reduciéndose cerca de 5 puntos porcentuales desde 2019.
Una mayoría de las chicas cree que el feminismo busca superar barreras tradicionales de las mujeres para acceder a la igualdad (63%), pero solo el 40% de los varones jóvenes tiene la misma opinión. El estudio ofrece otros porcentajes significativos que señalan la diferente forma en que ambos sexos consideran el movimiento feminista: entre ellos un 28% destaca que el feminismo no se ocupa de los problemas reales de las mujeres (17% ellas), un 26,4% que no es necesario (13% ellas) y un 24% que busca perjudicar a los hombres (14% ellas).
En cuanto a la percepción de equidad entre sexos, uno de cada 10 chicos considera que las desigualdades de género no existen. Asimismo, solo cuatro de cada 10 hombres observa la gravedad de dichas desigualdades en España frente a las siete de cada 10 chicas que las contemplan como elevadas.
Los celos como una prueba de amor normalizada
El estudio de la FAD muestra cómo, mientras entre las mujeres avanza la tendencia hacia una percepción más igualitaria de las relaciones de pareja, en el caso de los hombres se observa una cierta persistencia de las visiones tradicionales de género. Concretamente, es destacable la mayor propensión al control entre los varones: un 18,1% destaca que es normal mirar el móvil de la pareja, frente al 12,7% de ellas, y un 28% entiende los celos como una prueba normalizada del amor (15% entre ellas).
Las formas más habituales de violencia presenciada, tanto en ellas como en ellos, son revisar el móvil (59,7% ellas, 38,7% ellos), controlar todo lo que hace la otra persona (54,5% ellas, 28,4% ellos), decirle con quién puede hablar o salir (51,6% ellas, 23,5% ellos), insultar y humillar a su pareja (49,8% ellas, 23,5% ellos) y tratar de aislarla de sus amistades (46% ellas, 22,5% ellos). No obstante, solo el 50,4% de los hombres jóvenes cree que la violencia de género es un problema grave, frente al 74,2% de ellas.
En cuanto a los modos de violencia en la pareja sufridas más habituales entre las mujeres, el informe señala revisar el móvil (21,8%), forzar una relación sexual no deseada (20,5%)y controlar toda la actividad (18,2%). En el caso de los hombres, únicamente revisar el móvil (15,4%), controlar toda la actividad (11,5%) y tratar de que no vea a sus amistades (10,5%) se sitúan por encima del 10% de casos.
El debate político ha afectado a la juventud
De acuerdo con las declaraciones de la subdirectora del Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud, Anna Sanmartín, son múltiples los factores que pueden haber influido en el aumento de las visiones tradicionales machistas entre los hombres. No obstante, Sanmartín ha señalado que "el debate político" sobre la violencia de género puede haber afectado a este incremento.
Beatriz Martín, directora general de la FAD, también se ha pronunciado al respecto y ha mencionado el confinamiento y las redes sociales como otros desencadenantes del aumento de las formas de control que recoge el estudio. "Las redes sociales hacen que la barrera de lo privado se haya extendido" y ahora "la tecnología nos hace estar constantemente disponible", ha explicado durante la rueda de prensa. Asimismo, Martín ha hecho hincapié en que los jóvenes ahora reconocen mejor los tipos de violencia, algo que es "clave" para comenzar el cambio social.
“Necesitamos muchos actores sociales para observar cambios significativos“
Ante esta situación, la FAD ha realizado un llamamiento a los partidos políticos para que "se trabaje con datos y sosegadamente", pero también ha pedido la colaboración de las instituciones públicas. "Creemos que no es solo la FAD la que tiene que trabajar en esto. Nosotros ponemos la investigación, pero necesitamos muchos otros actores sociales para observar cambios significativos", ha señalado la directora de la fundación.