El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha desvinculado el plan de inversiones para ampliar el aeropuerto de El Prat (Barcelona) de la mesa de diálogo sobre Cataluña con el Gobierno Central. Sin embargo, tras la suspensión este miércoles de dicho plan por la falta de consenso y después de que el Gobierno haya dicho que no será posible ya llevarlo a cabo en esta legislatura, ha vuelto a cargar contra “operación de chantaje” y la "maniobra de presión" del Ejecutivo.
Aragonès ha dicho que en la mesa, que se reunirá la semana que viene aunque todavía no tiene fecha fijada, no se hablará de inversiones y ha negado que el choque con el Gobierno central no afectará al diálogo: "No solo no afecta, sino que vamos con más fuerza que nunca".
"Hay gente que quiere que la mesa de negociación fracase. Por mí no será", ha apuntado el presidente catalán, que ha añadido que "no renunciará" a reclamar la autodeterminación y la amnistía "por el boicot del Gobierno a una ampliación sostenible del aeropuerto de El Prat".
Denuncia la "maniobra de presión"
De cualquier forma, Aragonès ha vuelto a denunciar la que a su juicio es “una maniobra de presión”: "Nos querían poner entre la espada y la pared. O aceptáis como queremos nosotros o no hay nada. Eso es claramente un chantaje inaceptable y que detrás del cual está la falta de voluntad crónica del Estado de invertir en Cataluña".
Gobierno y Generalitat se culpan mutuamente del fracaso en la ampliación de El Prat
El Gobierno ha aclarado que ya no será posible cometer esta inversión en lo que queda de legislatura y que solo podrá hacerse a partir de 2026. La ministra de Transportes, Raquel Sánchez, ha explicado que esto se debe a que el documento de AENA con las inversiones previstas para el período 2022-2026 "no se puede modificar" y el límite de tiempo para llevar el proyecto al Consejo de Ministros es el próximo 28 de septiembre, algo que descarta dada la falta de consenso.
El Ejecutivo firmó un acuerdo con el vicepresidente de la Generalitat, Jordi Puigneró (JxCat) el pasado 2 de agosto para acometer las inversiones por valor de 1.700 millones de euros en el aeropuerto. Aragonès (ERC), sin embargo, ha mostrado su rechazo dadas las implicaciones medioambientales que podría suponer la ampliación tal y como está planteada. Por eso, ha denunciado que el Ejecutivo no haya querido, ha dicho, dialogoar. El Gobierno, que dio por suspendido el plan este miércoles, ha atribuido a Aragonès y a la falta de consenso en el seno de la Generalitat la responsabilidad de lo ocurrido.
El Gobierno niega un "chantaje" y también desliga El Prat de la mesa
La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha negado haber chantajeado a Aragonès con la ampliación del aeropuerto de El Prat y apunta que "tal vez no sea capaz de explicar cómo ha dejado escapar para su tierra una inversión de 1.700 millones de euros".
La portavoz del Ejecutivo ha expresado este jueves el descontento del Gobierno de Pedro Sánchez por la falta de apoyo de la Generalitat, que ha llevado a dar marcha atrás a la inversión. "No nos ha gustado tener que adoptar esta decisión", ha afirmado ante los periodistas a su llegada a la Junta de Gobierno de la Federación Española de Municipios y Provincias.
Además, ha defendido la ampliación de El Prat como "un proyecto transformador de país, pero también de Cataluña, y generador de empleo en un marco de desarrollo sostenible".
La ministra de Política Territorial también ha negado que el choque por la ampliación del aeropuerto vaya a complicar la mesa de diálogo, que sigue sin fecha y sin que se haya confirmado si asistirá o no el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
"Estamos ultimando los trabajos; el Gobierno mantiene la agenda, y el objetivo de trabajar en la recuperación y el encuentro en Cataluña", ha dicho Rodríguez.