Al coronavirus lo pararemos con vacunas, pero el cambio climático será imparable. Lo ha asegurado en el programa Encuentros de RNE el delegado de AEMET en Cantabria, José Luis Arteche. “Sí, esta aquí ya…en el mundo de la ciencia no hay negacionistas al respecto. Hay discrepancias en cuanto a sus consecuencias, pero está aquí, no es ninguna broma, y convendría que nos preparásemos para ello”, apunta.
Entrevista completa:
Encuentros. Con José Luis Arteche Escuchar ahora
“Hay que buscar nuevas fuentes de energía, porque para esta pandemia no hay vacuna, y los efectos, aunque ya están presentes, no los vemos tan claros. Pero lo vamos a notar. Nuestros hijos lo notarán más, y como digo, posiblemente al coronavirus lo vamos a parar con las vacunas, pero el cambio climático no podremos pararlo. En cuanto el océano coja carrerilla, empiece a dilatarse por calentamiento y a subir los niveles del mar…de hecho, ya hay lugares del mundo, en islas del Pacífico, donde se suceden las inundaciones y los gobernantes están pensando en trasladar a sus habitantes”.
“Hay que pensar en una economía verde, en un crecimiento con un consumo energético menor“
Los acuerdos de la cumbre del clima de París, van camino de incumplirse, como ya ha denunciado el presidente de la Organización Meteorológica Mundial. Arteche señala que “la emisión de Co2 y metano ha sido brutal, por mucho que se haya reducido algo durante la pandemia… Precisamente esta situación nos ha demostrado que se pueden tomar decisiones a nivel estatal por el bien de todos, decisiones que permitan aminorar esto. Hay que pensar en una economía verde, en un crecimiento con un consumo energético menor”.
El delegado de AEMET en Cantabria lamenta que “son asuntos que no se tienen muy en cuenta en los programas políticos”, pero apunta al respecto cómo Joe Biden, presidente de los Estados Unidos, ha nombrado recientemente a John Kerry, quien fuera Secretario de Estado, como enviado especial presidencial de los EE.UU. para el clima. “Es evidente que la administración americana entiende que el cambio climático es importante. Esperemos que sea así, y otros países sigan su ejemplo”.
Control de la navegación aeronáutica
La delegación de AEMET en Cantabria es uno de los centros aeronáuticos nacionales, responsable de las predicciones para todo el norte del país. “Tenemos un grupo de predictores pendientes de todos los aeropuertos del norte de España. Se hacen predicciones para aterrizaje y despegue a varias horas, muy útiles para las compañías aéreas. Aviones que van a llegar a Santander, Vigo, Pamplona o Bilbao desde cualquier parte de Europa, necesitan conocer las condiciones meteorológicas. También se emiten avisos de fenómenos meteorológicos adversos, que se comunican a las torres de control para que los trasladen a las aeronaves en vuelo y tomen las medidas oportunas”, señala José Luis Arteche.
El Día Meteorológico Mundial nos recuerda la importancia del trabajo de los meteorólogos, que tiene implicaciones en múltiples facetas de nuestra economía y de la vida cotidiana. Precisamente por su trascendencia, todos los países destinan cuantiosos fondos para predecir el tiempo. “El proceso de predicción científica es costoso”, señala el delegado de AEMET en Cantabria. “En todo el mundo realizamos observaciones, lanzamos globos aerostáticos, tenemos barcos en el mar que son estaciones meteorológicas, y todos esos datos van a los centros de cálculo, en los cuales todos los países juntos, porque individualmente no podrían, mantienen aportaciones para que superordenadores interpreten mediante modelos matemáticos lo que va a pasar”.
Después, compañías privadas compran esos datos y nos acercan del modo más atractivo posible las predicciones. Una información, como bien sabemos quienes nos dedicamos a la comunicación, de las más seguidas y demandadas por los ciudadanos.