El 'efecto Illa' podría haber tocado techo en Cataluña, pero aún podría valer la victoria al PSC en las elecciones catalanas del próximo 14 de febrero. En medio de la primera semana de campaña, el PSC de Salvador Illa sigue en cabeza y sería la fuerza más votada en las urnas el 14 de febrero, con un 23,7 % de los votos, seguido de ERC (19,9 %) y un Junts que remonta posiciones y recorta su desventaja frente a la lista de Pere Aragonès, con un 14,6 % de estimación de votos, protagonizando la mayor subida, según las estimaciones de la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
A continuación, Catalunya en Comú Podem sería la cuarta fuerza más votada (8,9 %), por delante de Ciudadanos (7,9 %), que continuaría su caída en apoyos; como sexta fuerza irrumpiría Vox, con un 6,9 % -la formación de extrema derecha tendría más apoyos que los antisistema de la CUP, con un 6,8 %- y, en último lugar, el PP, con un 5,9 % de estimación de voto. No es posible, sin embargo, conocer la proyección de escaños de estos partidos y quién estaría en condiciones de sumar mayorías suficientes para gobernar, puesto que este sondeo solo ofrece estimaciones de voto y horquillas de variación de dicho porcentaje de voto. De este modo, el PDeCAT, con un 1,5 % de las papeletas, podría no obtener ninguna representación.
La institución que preside el sociólogo y exdirigente socialista José Félix Tezanos ha presentado este jueves lo que denomina una "encuesta flash" de las elecciones catalanas (ver en pdf), su segundo sondeo sobre los comicios autonómicos del próximo 14 de febrero, tras la tradicional encuesta preelectoral una semana antes de iniciarse la campaña. La justifica con el propósito de conocer cómo evolucionan las tendencias del voto una vez que ha comenzado una campaña en la que hay un gran porcentaje de indecisos. Todavía el 26,3 % de los catalanes reconoce que no sabe a quién votar -aunque ya es un porcentaje casi 13 puntos menor que en la encuesta anterior a la campaña-.
En los términos del propio CIS, se trata de "conocer y valorar mejor la realidad en contextos en los que cada vez es mayor el número de indecisos, persistiendo una alta volatilidad en el voto hasta el último momento". La legislación electoral permite publicar sondeos hasta cinco días antes de terminar la campaña electoral.
El independentismo crece en apoyos, pero ERC no
Más interesante que las posiciones es, en este caso, el movimiento, la tendencia. Desde la publicación del sondeo preelectoral del CIS el 21 de enero, una semana antes de empezar la campaña -con una encuesta realizada entre el 2 y el 15 de enero a 4.106 entrevistados-, hasta la actual encuesta, cuyo trabajo de campo se hizo con 1.838 entrevistas entre el 1 y el 3 de febrero, la foto se ha movido, y ERC podría ser el mayor perjudicado, perdiendo fuelle ante un PSC que se mantiene y viendo por el retrovisor la remontada de Junts.
En su encuesta preelectoral hecha pública el pasado enero, el CIS recogía el llamado 'efecto Illa', es decir, de la candidatura del exministro de Sanidad a presidir la Generalitat, y situaba al PSC y a ERC en pugna por el primer puesto, con ventaja inicial para los socialistas, con un 23,9 % de los votos y una horquilla de 30-35 escaños frente al 20,6 % de los republicanos (31-33 escaños). Ahora, el "efecto Illa" se estanca, pero mientras el PSC se mantiene en los mismos parámetros, con un 23,7 % de los votos (una horquilla del 22-26 %), ERC pierde terreno (19,9 %, con una variación entre el 19-21 %, según el CIS)
Pero, sobre todo, el partido del actual vicepresidente en funciones, Pere Aragonès, ve como su socio y actual rival, el Junts de Laura Borràs, da un salto de dos puntos en estimación de voto, del 12,5 al 14,6 % (con un margen de variación que el CIS sitúa entre el 13 y el 18 %). En el extremo más favorable para Junts y el más perjudicial para ERC, solo les separaría un punto.
Es decir, la lucha por el liderazgo del independentismo está más abierta cuando aún falta más de la mitad de la campaña, y el resultado en esa carrera será trascendental si el partido de Oriol Junqueras quiere tener la última palabra en la formación de mayorías después de las elecciones. Está en juego no solo la presidencia del Govern catalán, sino quién está en condiciones de dictar la hoja de ruta del independentismo.
La situación es más preocupante para las aspiraciones de Pere Aragonés si se ve que además las demás siglas independentistas mejoran su estimación de voto respecto al último sondeo preelectoral del CIS: la CUP sube 0,8 puntos, hasta el 6,8 % de estimación de voto (una horquilla del 6-8 % de los apoyos), y hasta el PDeCAT duplica sus estimaciones, del 0,7 al 1,5 % en el mes transcurrido entre ambas encuestas del CIS.
Cs y los 'comunes' caen; el PP, estancado ante el crecimiento de Vox
De la misma manera, en el bloque de partidos no independentistas, al margen del citado caso del PSC, las tendencias muestran malas noticias para casi todos. Ciudadanos, que en el sondeo preelectoral del CIS ya sufría una sangría de dos terceras partes de sus votos respecto a las últimas elecciones, donde obtuvo un 25,37 %, ahora caería al 7,9 %, casi dos puntos en un solo mes. Los 13-15 diputados que le señalaban como posibles (un derrumbe respecto a los 36 actuales) podrían ser aún menos si la candidatura de Carlos Carrizosa no logra mantener la fidelidad de sus votantes o impedir que se queden en casa.
Por su parte, Catalunya En Comú sufriría también una pérdida de casi un punto en sus apoyos en estas semanas, del 9,7 % al 8,9 % de esta encuesta, lo que le llevaría a perder escaños de la estimación de 9-12 antes de empezar la campaña electoral.
Otro partido con motivos para la preocupación por la escasa movilización que está consiguiendo es el PP, que se mantendría en el mismo 5,8 % de estimación de voto de la última encuesta (con una horquilla del 5-7 %), pese a la movilización de sus líderes nacionales en actos electorales en Cataluña.
De esta manera, aunque los cálculos del CIS eran de siete escaños para la candidatura de Alejandro Fernández, mejorando los cuatro actuales en el Parlament catalán, no lograría desmarcarse de Vox, que sigue subiendo en estimación de voto hasta llegar al 6,8 % (ocho décimas más que hace un mes) y una estimación de entre el 5 y el 8 %, es decir, con capacidad para lograr un 'sorpasso' al PP en la primera ocasión en que este partido concurre a unas elecciones en Cataluña, de la mano de su candidato, el hasta ahora diputado en el Congreso Ignacio Garriga. Los 6-10 escaños que calculó el CIS hace un mes que podría obtener Vox en las urnas podrían ser incluso más.
Por otra parte, Salvador Illa sigue siendo el candidato mejor valorado, con una nota media de 4,4 puntos sobre diez. Sin embargo, ha perdido el aprobado del anterior sondeo, y ahora casi empatan con él Laura Borràs y Pere Aragonès (4,3). Las siguientes mejores notas las obtienen también una candidata independentista, Dolors Sabater (CUP), con un 3,8; y siguen Jèssica Albiach (En Comú Podem), con un 3,7; Àngels Chacón, del PDeCAT (3,5); Marta Pascal (PNC), con un 3,1 %; los candidatos de Cs y PP, Carlos Carrizosa y Alejandro Fernández, empatan con un 2,5 sobre diez, y cierra las valoraciones Ignacio Garriga (Vox), que obtiene la peor valoración media, con 2,2 puntos.
También Illa es el candidato al que la mayor proporción de encuestados preferiría como presidente de la Generalitat (23,5 %, 1,5 puntos más que en la encuesta de enero); es el único entre los favoritos que aumenta su "presidenciabilidad", junto a Aragonès, al que el 10,6 % ve como preferido para encabezar el Govern.
CIS frente a CEO, diferentes tendencias
La comparación con otros sondeos recientes, como el difundido al comenzar la campaña por el Centro de Estudios de Opinión (CEO) -institución dependiente de la Generalitat de Cataluña-, muestra tendencias divergentes cuando se enfrenta al del CIS -aunque las comparaciones han de ser más prudentes por provenir de organismos diferentes con sus propias metodologías-.
En todo caso, al confrontarse se ve que el PSC experimenta un notable crecimiento, y la CUP es la única formación independentista que mejora su estimación de voto, y el mayor contraste está en la estimación de ERC (partido más votado, según el CEO) y Junts, y entre estos dos partidos y el de los socialistas catalanes.