BIOGRAFÍA
Lugar y fecha de nacimiento: Barcelona, 1964
Formación: Licenciado en Derecho por la Universidad de Barcelona y miembro del Ilustre Colegio de la Abogacía de Barcelona.
Años en Política: En Cs desde 2006 y miembro de su Ejecutiva desde 2007 -excepto en 2010-, es diputado autonómico desde 2012. Ha sido portavoz del partido en la Cámara desde 2016 y es líder de la formación en Cataluña desde agosto.
La paciencia es una virtud para los políticos que saben esperar. Carlos Carrizosa (Barcelona, 1964), un histórico de Ciudadanos, es el ejemplo vivo de ello. En el partido desde su fundación en 2006, y como diputado en el Parlament desde 2012, ha combatido con mano de hierro al independentismo, pero casi siempre a la sombra de otras figuras: Albert Rivera, Inés Arrimadas y luego Lorena Roldán. Sin embargo, ha sido la propia líder del partido nacional quien le ha sacado de su papel secundario para convertirle en protagonista como candidato a la Generalitat y ha puesto en él sus esperanzas de reconstruir una Cataluña .
Carrizosa tiene un gran reto por delante, el de intentar conservar la fuerza que Ciudadanos logró en las elecciones de 2017 gracias a una victoria histórica sobre el independentismo, pero que no le sirvió para gobernar. Y eso implica remontar el 14F los malos resultados que le dan las encuestas El candidato de Cs aspira a liderar el "constitucionalismo" y a pactar con el PSC para arrebatar juntos el Govern al secesionismo y evitar a su vez que los socialistas puedan conformar un gobierno con ERC.
Carrizosa es la apuesta personal de Arrimadas para Cataluña. En agosto, arrebató la candidatura a la Generalitat a Lorena Roldán por una decisión unánime del comité permanente de Ciudadanos, que se había reunido de forma extraordinaria. Como consecuencia, Roldán acabó dejando el partido y pasó a ser la número dos del candidato del PPC, Alejandro Fernández.
Y es que, si Roldán era la candidata de Rivera antes de dimitir como líder del partido, Carrizosa ha estado con Arrimadas en los momentos más difíciles de la política autonómica, durante el otoño de 2017, cuando se dieron las leyes de ruptura en el Parlament, el referéndum ilegal y la declaración unilateral de independencia. Se mantuvo combatiendo al independentismo en Cataluña incluso tras el salto de Arrimadas y otros importantes dirigentes del partido a la política nacional.
Licenciado en Derecho, Carrizosa es un político lleno de matices. Ha sido uno de los pocos que ha sido expulsado del Parlament de Cataluña tras un bronco enfrentamiento en septiembre de 2019 con el entonces ‘president’ Quim Torra y las fuerzas independentistas. Y si a Torra le ha llamado en ocasiones “xenófobo” y “okupa” por mantenerse en el cargo meses tras su sentencia de inhabilitación, tampoco se ha comedido en sus críticas a JxCat y ERC como portavoz parlamentario del partido.
Sin embargo, ha sabido tender la mano al Govern con una voz más templada para hacer frente a la pandemia de coronavirus, en la misma línea que la de la ‘política útil’ que ha mantenido Inés Arrimadas en el Congreso de los Diputados durante los últimos meses. También mostró su talante y capacidad de diálogo y de calmar los ánimos abogando por la “unidad” en el Consejo General más tenso que ha celebrado Ciudadanos, en marzo de 2020, tras la dimisión de Albert Rivera ante los malos resultados del 10N.
Carrizosa, en tres frases:
"Si el constitucionalismo no se moviliza, los independentistas 'lo volverán a hacer'"
"Illa es el muñidor de los pactos del Estado con Cataluña. Pactó con el partido de Puigdemont y en España arregló el pacto con ERC"
"Si hubiera que medir la potencia del PP y Cs en España por lo que pase en las elecciones catalanas, entonces -el presidente del PP, Pablo Casado debería ir pidiendo el ingreso en Ciudadanos a Inés Arrimadas".
Expectativas electorales:
Ciudadanos fue la fuerza más votada en las últimas elecciones en Cataluña, en diciembre de 2017. Sin embargo, el CIS augura una caída el 14F de más de la mitad de su representación, pasando de 36 diputados a una horquilla de entre 13 y 15. Si se cumplen los pronósticos, su rol de partido no independentista más votado lo ocuparía el PSC, a quien el CIS prevé ganador de las elecciones con entre 30 y 35 escaños. También podría sufrir una fuga de votos a otras formaciones como Vox -que entraría en el Parlament con entre seis y diez escaños- y el PP -que subiría de cuatro a siete.
Si se cumplen las encuestas, Ciudadanos estaría obligado a pactar con el PSC, aunque la suma de ambos no llegaría a mayoría absoluta, por lo que también debería mantener contactos con el PP e, incluso, con Vox -pese a las claras reticencias que tiene el partido naranja con respecto al de Santiago Abascal-. Y es que las fuerzas independentistas -ERC, Junts y la CUP- seguirían manteniendo una fuerza considerable con una suma total de entre 59 y 78 escaños-.