El ministro francés de Sanidad, Olivier Véran, ha pedido a la población "no usar mascarillas . En una entrevista en televisión, ha anunciado que el viernes el país galo prohibirá el uso de estos dos tipos de mascarillas en el espacio público. Solo se permitirán las mascarillas quirúrgicas, las FFP2 y aquellas de tela reutilizables que filtran más del 90% de partículas.
Francia se une así a Alemania, que solo permite en el transporte público y los comercios las mascarillas quirúrgicas o las FFP2, en medio de un debate global sobre la idoneidad de los distintos tipos de mascarillas para protegerse contra el coronavirus. El Gobierno francés ha alertado de la necesidad de restringir las mascarillas menos seguras debido a la expansión de nuevas variantes del virus, como la británica o la sudafricana, más contagiosas que la mayoritaria.
En España, el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, no se ha mostrado partidario en principio de hacer obligatorias este tipo de mascarillas. "Aprobar el uso de la FP2 en algunas situaciones puede ser razonable, pero lo de que toda la población tenga que llevarla es muy debatible, siempre y cuando todos llevemos la protección", aseguró el pasado miércoles.
En su lugar, Simón cree que la protección se puede conseguir si todas las personas en un espacio concreto llevan una mascarilla, ya sea quirúrgica o FFP2.
Las mascarillas de tela, las menos recomendadas
"Una mascarilla de tela no está homologada y por tanto la eficacia de filtración no está controlada", ha asegurado a TVE Iván Espada, del Consejo General de Farmacéuticos, que advierte de la "falsa sensación de seguridad" que crean estas mascarillas caseras.
Además, existe el peligro de reutilizarlas demasiadas veces, lo que reduce aún más su protección. "La mascarilla quirúrgica, cuando es utilizada también por la otra persona, hace que la posibilidad de contagio sea altamente improbable", ha valorado Julián Domínguez, de la Sociedad Española de Medicina Preventiva.
Domínguez sí que recomienda portar la FFP2 en espacios cerrados sin ventilación. Estas mascarillas filtran un 94% de los aerosoles, las partículas más finas (0,6 micrometros) y que estudios recientes han demostrado que pueden contagiar el virus. Las quirúrgicas, por su parte, filtran al menos un 95% de partículas de tres micrometros.
Una obligación difícil de hacer cumplir
El decreto que se publicará el viernes en Francia es más una apelación a la responsabilidad individual que una medida restrictiva efectiva, ya que el ministro de Sanidad no cree que "las fuerzas del orden vayan pidiendo a cada persona el nivel de protección de su mascarilla".
Además, las mascarillas reutilizables que se comercializan solo muestran el nivel de filtración en el paquete, y no en la mascarilla en sí, lo que hará aún más difícil hacer cumplir esta norma.