El producto interior bruto (PIB) de Estados Unidos ha caído a un ritmo anual del 32,9 % en el segundo trimestre de 2020 como consecuencia de la pandemia del coronavirus COVID-19, frente a la contracción del 5 % anual en los primeros tres meses del año. Se trata de la mayor caída trimestral desde que se tienen registros, según los datos facilitados este jueves por la Oficina de Análisis Económico del Gobierno (BEA, por sus siglas en inglés). Aun así, la cifra es levemente inferior a la estimada por los analistas, que habían pronosticado una caída del 35 %.
El organismo, sin embargo, ha alertado de que los efectos económicos completos de la pandemia no se pueden cuantificar, ya que los datos en los que se basa todavía están incompletos y tardarán en actualizarse. Además, gran parte de las medidas de confinamiento decretadas en marzo y abril comenzaron a levantarse en mayo y junio, lo que provocó cierta aceleración en la actividad económica.
No hay precedentes en la historia reciente de Estados Unidos que igualen a una contracción tan severa como la registrada en el segundo trimestre. Desde que comenzó la serie histórica, en 1948, la mayor caída se observó en el primer trimestre de 1958, cuando el descenso fue del 10 %. Durante la última recesión, el mayor descenso se registró en el cuarto trimestre de 2008, cuando el PIB registró una caída anualizada del 8,4 %.
Los principales componentes del PIB registran datos negativos
Prácticamente todos los componentes del PIB han registrado datos negativos en el segundo trimestre. El gasto de los hogares, que supone dos tercios de la actividad económica en EE.UU., se ha contraído un 34,6% entre abril y junio en datos anualizados, frente al descenso del 6,9% del primer trimestre. Esto supone la peor lectura del dato desde que hay registros. El gasto en bienes ha descendido un 11,3 %, mientras que el gasto en servicios se desplomó un 43,5 %.
De su lado, la inversión de las empresas descendió un 27 %, frente a la caída del 6,7 % del primer trimestre. Esto supone la peor lectura del dato desde el tercer trimestre de 1952. En concreto, la inversión en estructuras ha caído un 34,9 %, mientras que la inversión en equipos ha descendido un 37,7 % y la realizada en propiedad intelectual se ha reducido un 7,2 %.
Asimismo, la Oficina ha desglosado que los ingresos personales disponibles de los estadounidenses se han elevado un 42,1 % en el trimestre, lo que supone el mejor dato de la serie histórica. Asimismo, la tasa de ahorro se ha triplicado, hasta el 25,7 %.
Los economistas esperan mayor crecimiento en el tercer trimestre del año
A partir de junio, varios estados del país aplicaron una gradual reapertura de la actividad, por lo que los economistas consideran que en el tercer trimestre volverá el crecimiento.
No obstante, en las últimas semanas ha habido un repunte de los contagios en estados del sur y oeste del país como California, Texas y Florida, que han obligado a dar marcha atrás en algunas de las medidas de contención.
El pasado miércoles, el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, indicó "que parece que los datos apuntan a una ralentización en el ritmo de la recuperación", pero precisó que todavía es demasiado pronto para decir cómo de grande y lo sostenido que será".