El presidente ruso, Vladímir Putin, ha obtenido el apoyo mayoritario de los rusos para seguir en el Kremlin más allá de 2024, en un plebiscito constitucional muy criticado por la falta de transparencia y las excepcionales condiciones sanitarias en las que se celebró debido a la pandemia de coronavirus COVID-19.
Con el 98% de los votos escrutados, el 78 % de los electores votó "sí" a las enmiendas constitucionales propuestas por Putin y el partido del Kremlin, según los datos preliminares de la Comisión Electoral Central (CEC).
El resultado del plebiscito es muy similar al de las elecciones presidenciales de 2018, cuando Putin obtuvo el respaldo del 76,69 % de los electores.
Con esta victoria, Putin tiene las manos libres para ejercer otros dos mandatos presidenciales de seis años cada uno hasta 2036, lo que le convertiría en uno de los dirigentes que más tiempo permanece en el poder en los más de mil años de historia de Rusia.
El presidente ruso, que votó en su lugar habitual, la sede de la Academia de Ciencias en la Avenida Lenin, afirmó recientemente que aún no ha decidido si presentará su candidatura dentro de cuatro años, si bien afirmó que "hay que trabajar y no buscar sucesores". "Después de Putin vendrá Putin", proclamó Viacheslav Volodin, presidente de la Duma o Cámara de Diputados.
Más de 50 millones votaron por adelantado
En un caso sin precedentes, más de la mitad de los electores ejercieron su derecho al voto por adelantado, aprovechando que las autoridades abrieron los colegios con una semana de antelación, el 25 de junio, para evitar aglomeraciones y un posible rebrote de COVID-19.
Según la CEC, más de 50 millones de rusos acudieron a las urnas en los primeros seis días y solo unos cuantos millones en la jornada grande de este miércoles, mecanismo que la oposición consideró un caldo de cultivo para el fraude.
El Ministerio del Interior ha informado de más de 800 denuncias de irregularidades, aunque agregó que ninguna tuvo entidad suficiente como para influir en los resultados electorales.
Las principales enmiendas
En total, los rusos han votado 206 modificaciones a la ley fundamental, aunque la más importante, según coinciden los expertos, es la enmienda que permite a Putin presentarse a la reelección en 2024, algo que le impide la actual Carta Magna.
Entre otros cambios en la Constitución, que entrarán en vigor con un "sí" mayoritario en el plebiscito, destacan también la indexación anual de las pensiones de los rusos, la inclusión de Dios en la Carta Magna y la prohibición de ceder territorios a otros países, entre otras enmiendas de carácter político y social. Estas son las claves de los cambios constitucionales que penden del visto bueno de los rusos.
¿Putin 2000-2036?
El punto más discutido de la reforma constitucional hace referencia al posible "borrón y cuenta nueva" de los mandatos de Putin, quien ya ha anunciado que no se cierra a la posibilidad de volver a postularse a la presidencia en 2024.
La correspondiente enmienda fue propuesta el mismo día en que los diputados rusos estudiaban la reforma constitucional en segunda y decisiva lectura y enseguida recibió el apoyo de la mayoría de los parlamentarios, con la única oposición de los comunistas.
Putin, que lleva en el poder desde 2000, podría volver a aspirar a otros dos mandatos de seis años en el Kremlin, algo que le prohíbe la actual Constitución.
Prohibición de ceder territorios
Una de las enmiendas más patrióticas de la nueva Constitución consiste en la prohibición de ceder territorio a un Estado extranjero.
Su autor, el actor Vladímir Mashkov, abogó por prohibir llevar negociaciones sobre la cesión de cualquier territorio, con la vista puesta, sobre todo, en la península de Crimea, anexionada a Ucrania en 2014, y la disputa sobre las islas Kuriles con Japón.
Lengua rusa
Las enmiendas - 206 en total - incorporan también el concepto de "pueblo fundador del Estado" al señalar que su idioma, el ruso, es la lengua oficial del país.
La modificación generó críticas entre representantes de algunas minorías étnicas que opinaron que a los cerca de 190 pueblos que viven en Rusia les será poco grato considerarse 'no fundadores del Estado'.
Heredera de la URSS
Las enmiendas en la ley fundamental fijarán también la condición de Rusia como heredera leal de la extinta Unión Soviética, lo que incluye los bienes de la URSS en el extranjero y su participación en acuerdos y organismos internacionales.
Mención a Dios
Otra de las enmiendas más destacadas han votado los rusos es la inclusión de la figura de Dios en la Constitución rusa.
La propuesta, apoyada por el presidente, llegó de la mano del patriarca Kiril quien argumentó que la gran mayoría de los rusos creen en la existencia de un ser divino superior, sin que se trate necesariamente del Dios de los cristianos ortodoxos, sino también del de los musulmanes y de "muchos, muchos otros".
"Si en el himno se puede decir 'patria querida protegida por Dios', ¿por qué no se puede decir en la Constitución?", dijo el máximo jerarca ortodoxo de este país.
Prioridad sobre el derecho Internacional
Entre las modificaciones más importantes a la Carta Magna figura también la enmienda que establece la prioridad de la Constitución rusa sobre el Derecho internacional.
Con las enmiendas aprobadas, "por primera vez en la historia moderna de Rusia, el país se apoyará en su Carta Magna, si las decisiones de instituciones internacionales las contradicen", ha afirmado Viacheslav Volodin, jefe de la Cámara Baja.
Memoria histórica
En línea con la campaña rusa contra el "revisionismo" sobre la Segunda Guerra Mundial, la Carta Magna incluirá un artículo sobre la defensa de la "verdad histórica".
"La Federación Rusa honra la memoria de los defensores de la Patria y garantiza la protección de la verdad histórica. El menoscabo de la gesta del pueblo durante la defensa de la Patria es inadmisible", reza la enmienda incluida a propuesta del presidente ruso.
Veto al matrimonio homosexual
Con el visto bueno de los rusos, la Constitución enmendada establecerá el matrimonio como únicamente una unión entre un hombre y una mujer, prohibiendo constitucionalmente el matrimonio homosexual.
Putin dijo previamente que mientras él sea presidente en el país nunca se legalizarían los matrimonios entre personas del mismo sexo.
"Mientras yo sea presidente, no habrá progenitor uno y progenitor dos, habrá mamá y papá", señaló el mandatario ruso en febrero, durante una reunión con el grupo de expertos encargados de redactar las enmiendas constitucionales.
Salario mínimo y pensiones
Entre las modificaciones más saludadas a la Constitución, se encuentra la indexación anual obligatoria de las pensiones, así como el establecimiento del salario mínimo por encima del índice mínimo de subsistencia.
Cultura rusa
Otra de las enmiendas hace alusión a la cultura rusa como "legado único del pueblo multinacional" del país y que debe ser protegida como tal por el Estado.
Uno de sus autores, el director del museo Hermitage de San Petersburgo, Mijaíl Piotrovski, explicó que la cultura es uno de los símbolos de Rusia, como su bandera o el escudo, pero si los últimos dos se pueden cambiar, "Dostoevski, Pushkin y Chaikovski siempre quedarán con nosotros".