"Me mandaron una foto que me dio ganas de llorar: los niños en el patio, con un rectángulo dibujado en el suelo para que no se salieran de ahí. Los niños necesitan moverse, socializarse... y no puedo evitar que lo toquen y lo chupen todo. ¿Y qué hacemos con los de necesidades especiales? ¿Y los que faltaban mucho a clase, van a venir? Lo veo muy difícil".
Marta Blázquez es profesora de infantil en un colegio público del sur de Madrid. Sus 20 años de experiencia le dicen que ningún curso es igual, pero el que viene se va a llevar la palma gracias al coronavirus. El Ministerio de Educación adelantaba cómo será la nueva normalidad en septiembre en colegios e institutos: se prevé que todos los alumnos puedan regresar a clase de forma presencial en septiembre en grupos reducidos de 20 personas y con una distancia de metro y medio en lugar de dos, como indicó en un primer momento el Gobierno. Y se plantea que los alumnos de hasta 10 años no tengan que guardar la distancia mínima de seguridad ni usar mascarillas.
Asociaciones de profesores y de padres han recibido positivamente el anuncio de que el control de la pandemia permitirá volver a las aulas en septiembre. Reconocen que esperaban la llamada del Ministerio para concretar las medidas, que este jueves Celaá ha compartido con las comunidades autónomas, y aún queda mucho por definir. Nicolás Fernández, presidente del sindicato de profesores ANPE, ha declarado en Radio Nacional de España que confía en que las administraciones aportarán los fondos necesarios para incrementar las plantillas "al menos un 15% durante el próximo curso".
La Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA) ya propuso, en la comisión de reconstrucción puesta en marcha en el Congreso, empezar cuanto antes a trabajar "en la conversión y adecuación de los espacios de los centros educativos para adaptarlos a las nuevas necesidades" e incluso utilizar "otras instalaciones públicas municipales y espacios naturales cercanos a las escuelas". Una de las propuestas que la ministra Celaá ha puesto sobre la mesa.
Medidas sanitarias y educativas
Marta Blazquez cree que en su colegio no tendrán problemas de espacio, y el centro intentará adecuar los espacios disponibles a la nueva situación.
“El centro no puede hacerse cargo de la limpieza, nos arruinaríamos“
Sí le preocupan las medidas de higiene y limpieza del centro: "Ahora las limpiadoras, contratadas por el Ayuntamiento, vienen a partir de las cuatro, cuando el centro cierra. Pero en la jornada escolar no están, y el Ayuntamiento ya ha dicho que no piensa reforzar el servicio. El centro no puede hacerse cargo de la limpieza", sentencia.
No es falta de voluntad, es económicamente imposible: "Nos arruinaríamos. Tenemos una dotación que ya es escasa. Ahora hay que poner gel hidroalcohólico, jabón y papel de manos en las aulas, limpiar entre clases... Solo en el mes de junio, con el colegio cerrado, el gasto ha sido considerable en material para que los profesores podamos ir a cerrar el curso. No es viable".
El presidente de ANPE insta al Gobierno a que cumpla el compromiso "de aportar 2.000 millones a la Educación. Las medidas de higiene se necesitan con mucha intensidad, hay que reforzar la plantilla para atender a los alumnos que no puedan estar en un grupo homogeneo", explica.
“Hay que reforzar a la plantilla para atender a todos los alumnos“
Y aunque parece descartada la opción de un mix entre educación presencial y on line, no se puede descuidar la dotación "del plan de digitalización para que todo el alumnado tenga acceso a herramientas digitales". Un rebrote en octubre podría mandar a los chavales de nuevo a casa, y estos tres meses han demostrado que centros y familias no estaban preparados para afrontar la educación on line.
Críticas al cambio de criterio del Gobierno sobre la vuelta al cole
El coste social y emocional
Quedan muchos flecos que discutir de ese primer borrador que Educación ha puesto sobre la mesa, a juicio de los profesores y familias, que piden que se cuente con ellos para cerrarlos cuanto antes.
Marga tiene una niña de 9 años: "Si hay cuatro clases por curso, con 25 niños, ¿qué van a hacer con los que sobran? ¿Quién decide qué niños salen del grupo? Les cambian de amigos, de tutor, a dar clase en no sabemos dónde porque no hay sitio... ¿Y el comedor? ¿Y las extraescolares?", se pregunta preocupada.
“¿Qué pasa con el comedor y las extraescolares?“
"Somos maestros, enfermeros, compañeros de juegos... no puedo dedicarme a limpiarlo todo después de cada uso. ¿Y qué pasa con los materiales que hasta ahora eran comunes? Hemos fomentado siempre la socialización, valores como ayudarse y compartir, y ahora va a ser "no toques eso". Vamos a pasar al individualismo", reflexiona la profesora de Infantil.
Celaá plantea para el próximo cruso grupos reducidos de alumnos de hasta 10 años sin guardar distancia de seguridad
Le preocupa tener que estar más pendiente de la higiene que de los propios niños y su educación, aunque está deseando volver a estar en contacto con ellos: "Somos seres sociales, los niños necesitan contacto, así desarrollan su creatividad".
"Yo no puedo dejar de consolar a un niño que llora porque no está su mamá", dice. Este año vuelve a empezar ciclo con los de tres años, que se incorporan al cole. Un contacto estrecho que estará permitido en las aulas de los menores de 10 años, que funcionarán como si alumnos y profesores fueran "convivientes".
“Somos seres sociales, los niños necesitan contacto“
"¿Y si se ponen malos tres profesores a la vez? En el cole hay profesores mayores, o con otros factores de riesgo. ¿No van a poder trabajar?". Muchas preguntas que aún no tienen respuesta.
CEAPA pone también sobre la mesa una de sus reivindicaciones históricas: la incorporación de una enfermera o enfermero en las plantillas de colegios e institutos: "Su presencia ya no es solo una opción", insistió en el Congreso su presidenta, María del Carmen Morillas.
La realidad de las aulas
Desde ANPE calculan que hay unos 500.000 profesores trabajando en la educación pública y unos 200.000 en la privada. Esperan que las plantillas se incrementen "entre un 15% y un 20%". Y exigen que se elabore un protocolo claro cuanto antes para que los centros puedan estudiarlo y exponer sus necesidades a las autoridades.
14 Horas - Vuelta a las aulas: la ANPE pide un protocolo claro y más profesores - Escuchar ahora
Marta Blazquez es poco optimista en cuanto a la ampliación de personal. Al margen del coronavirus, su centro tiene otros problemas de cara a septiembre: "Me temo que la previsión es contar con menos personal, que nos reduzcan el apoyo porque no hay niños diagnosticados, pero los problemas están ahí. Espero que no nos quiten lo poco que ya teníamos", relata.
“Si no traen su mascarilla se la podemos facilitar, pero si dejan de venir... “
Además, teme que ahora se incremente el nivel de absentismo, una preocupación frecuente en su centro, donde el nivel social, cultural y económico de los alumnos es muy diverso: "Muchos dejaron de venir antes de que entrara en vigor la suspensión de las clases. Si no traen su mascarilla se la podemos facilitar, pero si no vienen... ".
"Yo soy la que estoy en la realidad del aula, y no tiene que ver con las leyes y los papeles", concluye. La pandemia se ha llevado la vida de más de 27.000 españoles. Marta espera que no se lleve también el futuro de sus alumnos.