La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha apuntado a Sudamérica como "nuevo epicentro" mundial de la pandemia de coronavirus, siendo Brasil "claramente" el país más afectado de la región, según ha explicado el doctor Mike Ryan, experto en emergencias de la OMS.
El país que dirige Jair Bolsonaro cuenta ya más de 310.000 contagios, con más de 20.000 fallecimientos con Covid-19, mientras su curva sigue ascendiendo. Esta semana han superado por primera vez la cifra de 1.000 muertes diarias, tan solo unos días después de convertirse en el tercer país más golpeado por la enfermedad, adelantando a Reino Unido. La pandemia se ha cobrado ya más de 335.000 vidas en todo el planeta.
Además, el doctor Ryan se ha mostrado crítico con las recomendaciones que han hecho las autoridades brasileñas de utilizar la hidroxicloroquina, un medicamento contra la malaria. El alto cargo de la OMS ha recordado que los estudios actuales no revelan que haya evidencias clínicas de beneficios en su uso contra la Covid-19.
Ryan ha destacado también que hay nueve países africanos en los que se ha observado un incremento de casos del 50% en la última semana, mientras que otros han conseguido estabilizar su curva. La baja mortalidad del continente africano puede deberse a que la mitad de su población está por debajo de los 18 años, pero el doctor Ryan ha mostrado su preocupación por los "vacíos significativos" en cuanto a servicios de cuidados intensivos y equipos de respiración asistida en el continente.
La OMS alerta del peligro de obstaculización de los servicios de vacunación para niños
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha advertido de que la pandemia de COVID-19 "amenaza con socavar los servicios de inmunización que salvan vidas en todo el mundo", lo cual podría poner en peligro "a decenas de millones de niños en países ricos y pobres" frente a "enfermedades mortales como la difteria, el sarampión y la neumonía". Al menos 68 países, según los estudios iniciales, verán "considerablemente obstaculizada" la realización de dichos servicios, poniendo en riesgo a alrededor de 80 millones de niños menores de 1 año.
"Desde el cambio de siglo, la mortalidad infantil se ha reducido a la mitad, en gran parte gracias al poder de la vacunación segura y eficaz. A medida que el mundo se une para desarrollar una vacuna segura y eficaz para COVID-19, no debemos olvidar las docenas de vacunas que salvan vidas que ya existen y que deben seguir llegando a los niños de todo el mundo", ha argumentado el director de la OMS.
Tedros Adhanom Ghebreyesus ha apuntado que toda suspensión de los servicios de vacunación infantil es "una importante amenaza para la vida". Igualmente, ha argumentado que "la epidemia de desinformación" también ha perjudicado a la vacunación en los últimos años, por lo que ha hecho "un llamamiento a todos para que hagan más por evitar que los rumores y la pseudociencia socaven los esfuerzos de salud pública que salvan millones de vidas".