Pablo Casado ha afirmado que la prórroga del estado de alarma "ya no tiene sentido" y que "a día de hoy" no se dan las condiciones para que el PP la apoye, y así se ha comunicado este lunes a Pedro Sánchez.
El Partido Popular no ha querido desvelar el contenido de la conversación que ambos líderes han mantenido, pero sí asegura que Casado ha trasladado al presidente del Gobierno las mismas ideas que había defendido antes en una entrevista en Onda Cero en la que rechazaba el apoyo del los populares a la prórroga.
"En los términos que conocemos, no podemos apoyar la prórroga del estado de alarma que propone Pedro Sánchez", avanzaba esta mañana Casado en una entrevista, en la que no quiso anunciar si la posición del PP será un 'no' o una abstención en la votación de la convalidación del decreto del estado de alarma en el Congreso el próximo miércoles.
Tras estas declaraciones, Sánchez y el líder de la oposición han mantenido una conversación que ha durado una hora y en la que Casado no se ha movido de su postura inicial.
Sánchez ya conoce de primera mano el "no" de Casado a la prórroga del estado de alarma
Medidas legales distintas al estado de alarma
El líder del PP ha subrayado que hay otras medidas legales para llevar a cabo la desescalada del confinamiento decretado el pasado 14 de marzo ante la pandemia del Covid-19, para mantener el mando único o limitar la movilidad de la población sin necesidad del estado de alarma.
"Una vez que Sánchez dice que estamos en la fase de desescalada, parece incompatible la medida de restricciones de movilidad", ha afirmado Casado, que ha criticado también que el estado de alarma se prolongue más allá de 60 días, plazo máximo que tienen otros estados más severos como el de excepción.
Casado ha recordado que apoyaron las anteriores prórrogas porque consideraron que era necesario para evitar el "colapso" de las UCI, pero ha subrayado que una vez que el propio Sánchez dice que se puede salir a "tomar el vermut", hay que adaptar la normativa legal a la situación. Y ha insistido también en que el plan alternativo tiene que pasar por hacer tests masivos, medidas de protección y ayudas económicas y sociales.
Desvincular las ayudas por los ERTE del estado de alarma
Además, ha puesto como condición para negociar un cambio de su postura que "se desvinculen" de la prórroga del estado de alarma el pago de las prestaciones de los ERTE y de las ayudas a la liquidez de pymes y autónomos.
En este sentido, ha acusado a Sánchez de "tomar como rehenes" a los parados y todas la personas que están percibiendo prestaciones y lo ha calificado de "chantaje", porque cree que quiere presionar así a la oposición para apoyar una prórroga que no es necesaria.
Asimismo ha pedido que la desescalada se haga con "una mayor coordinación con las comunidades autónomas" y ha reprochado a Sánchez que el Gobierno no tenga un plan B de desescalada si no se aprueba la prórroga del estado de alarma, pues ha señalado que incluso sus propios socios de investidura ya le están dando de lado.
El presidente del PP ha advertido al Gobierno de que si quieren negociar, lo primero que tiene que hacer es informar a la oposición, pues ha señalado que "no pueden buscar complicidad" para "esta unilateralidad y para ser tan ineficaz y tan incompetente".
El Gobierno pide "responsabilidad": "La alternativa es el caos"
Por su parte, desde el Gobierno piden a la oposición "responsabilidad" y "compromiso" y defienden la prórroga alegando que es el "único instrumento" que permite hacer frente a algo "tan excepcional como limitar la libertad de circulación".
El ministro de Transportes, José Luis Ábalos, que ha asegurado que no quiere ser "alarmista", pero que sin esta declaración de excepcionalidad toda la actividad deberá recuperarse, trabajos y estudios, ha dicho, y se corre el riesgo de que se produzca un rebrote de contagios por coronavirus. "Es tanto como condenarnos a un caos del que algunos tendrán que ser responsables", ha afirmado en rueda de prensa.
Desde el PP han respondido a Ábalos que se deje de "chantajes y amenazas" y se dedique a gestionar y a salvar vidas, en lugar de "hundir la economía". "Si nosotros somos culpables de un posible rebrote, ¿significa que ellos serían los culpables de las muertes que se han producido?", aseguran fuentes populares.