Mientras que desde el Ministerio de Exteriores aseguran estar haciendo todo lo posible para que los españoles que continúan atrapados en el extranjero regresen a España, quienes están viviendo esa situación lejos de sus hogares dicen sentirse “abandonados” y “desamparados”. No saben con certeza cuándo podrán volver ni qué precio deberán pagar.
Para María, lo que iban a ser unas vacaciones de un mes en Argentina se ha convertido en una “pesadilla de ficción”. Ella viajó al país latinoamericano junto a su pareja el pasado 3 de marzo y, una semana después, “el mundo se vino abajo”.
Su vuelo de vuelta debía partir desde Buenos Aires el 28 de marzo, pero debido a la expansión de la pandemia en todo el mundo decidieron acelerar el regreso, y solo ella ha podido pisar suelo español. Su novio, nacido en Argentina pero residente en España, sigue atrapado en el aeropuerto.
“Mi pobre padre, autónomo y sin muchos recursos me ha pagado 1.000 euros para que pudiera volver en uno de los últimos vuelos. Desde el minuto uno ha sido todo impotencia porque nunca pudimos hablar con nadie de Iberia”, explica a RTVE.es María, que asegura que tampoco desde el teléfono de emergencia del Ministerio de Exteriores ni desde consulado les están ayudando.
"Viviendo" en un aeropuerto de Buenos Aires
Lo peor de todo, dice, es que su pareja, sigue en Buenos Aires sin saber cuándo podrá volver a Ibiza con ella: “Le he comprado dos vuelos para salir de Argentina y los dos han sido cancelados. Está viviendo en el aeropuerto sin sitio donde dormir ni asearse, ni comer, porque su familia está en Mendoza, a 1.500 kilómetros. Sigue sin saber si podrá volver en los próximos días, si tardará un mes o cuánto en volver. No sabe qué hacer ni a dónde dirigirse”, explica María, a cuyo drama se suma, dice, el de haberse quedado sin trabajo y tener que seguir haciendo frente a un alquiler.
El coste del regreso de ambos está siendo muy alto, lamenta, porque a los 1.000 euros que pagó su padre se suman otros 800 euros de un vuelo cancelado por la aerolínea, que no le ha dado opción de reembolso.
“Lo que necesitamos es que se flete un avión con gente atrapada. No creo que sea mucho pedir. Si en una situación de pandemia no se hace, ¿cuándo se puede esperar que me rescate mi Gobierno?, se pregunta la joven.
Atrapados en Uganda: "Es vergonzoso que para volver haya que tener la billetera llena"
La misma incertidumbre que María y Pedro están sintiendo es la que describe otra pareja que se encuentra atrapada en Uganda.
Son Irene y Álvaro, quienes partieron al país africano para hacer labores de voluntariado y ahora lamentan que las compañías a las que confiaron sus vuelos se “laven las manos”.
Sus opciones eran quedarse en Uganda al menos 32 días más, que son los días que decretó el presidente del país, Yoweri Museveni, el pasado sábado; comprar un billete de elevado precio para llegar a Doha e intentar conseguir otro vuelo desde Catar; o esperar al próximo miércoles para ver si sobran dos huecos en un avión de la compañía KML.
Ambos se han decantado por la última opción, sin tener la certeza de que finalmente puedan subir al avión.
“En principio, la opción que nos dieron era pagar o 1.200 euros para volar el lunes o 2.000 para el miércoles. Mucha gente estaba desesperada y compró los vuelos”, explica Irene, que precisa que ni ella ni su novio, que tienen 22 años, podían haber asumido ese coste por los billetes.
Finalmente, han logrado comprar un billete por 750 euros cada uno, pero tampoco les han podido asegurar que vayan a devolverles el dinero si finalmente no hay hueco en el avión.
"Nos parece vergonzoso que la única solución para volver a nuestro país sea la de tener una billetera llena (...). Mucha gente se quedará atrapada en el extranjero únicamente por no poder permitirse pagar la vuelta", dice esta pareja, que ha decidido alojarse en un hotel en Kampala para poder descansar y asearse, pero que sigue pasando gran parte del día en el aeropuerto a la espera de nuevas noticias.
"Hay gente que te dice 'blanco, vete a tu país'"
En caso de no poder volver el miércoles a su país, ellos podrían regresar al norte de Uganda, donde estaban realizando el voluntariado, pero el país está adoptando cada día medidas más restrictivas y no saben si podrían desplazarse hasta allí.
A esto hay que sumar el "caos" que, subrayan, se vive en Uganda durante la cuarentena y el hecho de que los taxis hasta el aeropuerto se hayan encarecido en los últimos días.
También ha aumentado la xenofobia: “Hay gente que te increpa y te dice ‘blanco, vete a tu país’. Es miedo por lo que podamos traer”, relata Irene.
A pesar de que están viviendo un momento duro, la joven puntualiza que la embajada de España en Kenia se está portando “bastante bien” con ellos, pero admite que, aunque intentan ayudar, “la situación se les escapa de las manos”.
Temen verse obligados a quedarse en un país cuyo sistema sanitario está menos desarrollado en España y piden al Ministerio de Exteriores que tanto ellos como el resto de ciudadanos atrapados en el extranjero puedan regresar a sus casas pagando un precio razonable: "Que no sea la excusa de las aerolíneas para lucrarse de la desesperación de personas como nosotros”.
Exteriores: "No se puede enviar un avión a cada español desperdigado"
Mientras tanto, la ministra de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Arancha González Laya, ha asegurado en una entrevista de Ser Cataluña este martes que el Gobierno está trabajando en traer a España a los ciudadanos españoles que se encuentran en el extranjero, pero ha advertido: "No podemos enviar un avión a recoger a cada ciudadano español que esté desperdigado".
La ministra asegura ser consciente de que los vuelos desde algunos lugares tienen precios muy altos por la situación de "penuria" y, según ha explicado, lo que hace el Gobierno es dialogar con los Estados miembros de la UE y con líneas aéreas para conectar destinos a precios "razonables".
"No veo otra alternativa diferente a la que estamos utilizando porque no podemos poner un avión a cada español que esté desperdigado por las distintas partes de este mundo", ha subrayado. Como muestra de la acción colectiva de los europeos, ha señalado que durante la noche del lunes han salido desde Bali (Indonesia) 39 ciudadanos españoles en un avión de una aerolínea de Lituania.
Además, el Ministerio de Asuntos Exteriores ha comunicado que fletará este jueves un vuelo extraordinario para repatriar a 400 turistas españoles que se encuentran en Guatemala, El Salvador y Honduras junto a unos 50 europeos que no tienen ninguna alternativa ni posibilidad de transporte comercial.