La defensa de la política catalana Clara Ponsatí pedirá llamar a declarar al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y al expresidente Ejecutivo Mariano Rajoy en el juicio de extradición a España, que la requiere por el referéndum ilegal de independencia de Cataluña en 2017.
Así lo ha comunicado el abogado de Ponsatí, Aamer Anwar, que ha acudido junto a la política a la vista preparatoria del juicio celebrada este jueves en la corte del Sheriff de Edimburgo. La defensa también solicitará la declaración de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría; los exministros de Exteriores del PP y PSOE, José Manuel García-Margallo y Josep Borrell, respectivamente; el eministro de Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, y el líder de Vox, Santiago Abascal.
Según el abogado, los procesos judiciales abiertos contra los líderes del proceso independentista en Cataluña "están impulsados por la venganza y el desprecio total y la falta de respeto por el derecho internacional y los derechos humanos". Y "sobre esa base", pretenden citar a los responsables políticos "cuyas opiniones sobre los juicios políticos de los catalanes son de dominio público".
La exconsejera de Educación se reincorporó a la Universidad de Saint Andrews en marzo de 2018 tras unos meses huida en Bruselas junto al expresidente catalán, Carles Puigdemont. El juez Pablo Llarena reactivó la eurooden de detención contra ella por un delito de sedición el pasado 14 de octubre, tras la sentencia del juicio del 'procés' por el referéndum ilegal de independencia del 1-O y los posteriores actos del Gobierno catalán. Ponsatí se entregó voluntariamente a la justicia escocesa el pasado 14 de noviembre y la jueza la dejó en libertad provisional.
La defensa mantendrá la estrategia contra un juicio "injusto"
"Clara considera surrealista que sea acusada de traición cuando el gobierno catalán ejecutó una ley votada democráticamente en el Parlamento catalán elegido por el pueblo catalán", ha señalado Anwar, a la vez que ha añadido que mantendrán la estrategia que sigue la defensa desde que empezó el procedimiento judicial en marzo de 2018. Así, inistirán en que la causa está "motivada políticamente" y que de ser extraditada no tiene garantizado "un juicio justo".
Su defensa considera que la euroorden se basa en un "delito arcaico" que "no existe" en la legislación escocesa, de modo que podría equipararse al de "traición". "Los fiscales escoceses que actúan en nombre de España consideran que la conducta de Clara constituiría un delito de traición bajo la ley de Escocia", segñun fuentes consultadas por Efe.
El juez Nigel Ross ha acordado con los representantes de Ponsatí y la Fiscalía española fijar una nueva vista para el 23 de enero, en la que preparar el juicio que arrancará en primavera de 2020.