La senadora Kamala Harris fue la protagonista del segundo debate entre candidatos a las primarias demócratas para la Casa Blanca, donde a priori todas las miradas estaban puestas en el exvicepresidente Joe Biden y el senador Bernie Sanders.
Harris atacó a Biden, primero en las encuestas, y ensombreció así a Sanders, que aparece segundo. Ambos hombres simbolizan, respectivamente, al partido demócrata centrista y conservador y al ala más a la izquierda, que no duda en usar el término "socialismo".
El debate se celebró en Miami un día después de que otros diez candidatos se vieran las caras en el primer debate, en el que destacó la senadora Elizabeth Warren, otra de las favoritas.
El racismo, tema estrella
Harris, exfiscal general de California, criticó tanto al presidente, Donald Trump, como a Biden, y sacó a relucir las buenas relaciones de este con políticos racistas.
"No creo que sea usted un racista - dijo Harris, hija de padre jamaicano y madre india, a Biden - "Pero también creo, y es personal, que fue doloroso escucharle hablar de las reputaciones de dos senadores que han levantado sus reputaciones y sus carreras sobre la segregación de razas en este país".
"Es una malinterpretación de mi posición: no elogio a los racistas - ha respondido Biden - Si vamos a basar esta campaña en quién apoya los derechos civiles y si yo lo hice o no, me parece bien". "Todo lo que he hecho en mi carrera lo hice por los derechos civiles, y creo que hay que continuar con cambios fundamentales; y esos derechos civiles, por cierto, incluyen no solo a los afroamericanos sino también a la comunidad LGTBI", ha añadido.
La ampliación de la cobertura médica ha sido otro de los temas a los que se ha dedicado más tiempo, con diferentes propuestas. Biden defendió el legado de Barack Obama en este sentido, con el Obamacare. "Estoy en contra de cualquier demócrata que quiera acabar con Obamacare", dijo rotundo sobre un apoyo a una reforma fiscal que contó con el respaldo del , que dijo que él avanzaría en cobertura partiendo de lo logrado por Obama
Sanders, por su parte defendió un seguro médico público "para todos".
Los otros candidatos, como la senadora Kirsten Gillibrand, el senador Michael Bennet, y el alcalde Pete Buttigieg, han intentado sin éxito ganar algo de atención, lo que ha llevado a momentos de confusión, en los que todos intentaban hablar a la vez y se interrumpían unos a otros. "Los americanos no quieren ver una buena pelea - ha advertido Harris - Quieren saber cómo vamos a poner comida en su mesa".
El congresista Eric Sawlwell puso de manifiesto que Biden tendrá 78 años si llega a la Casa Blanca en las elecciones de 2020. Sanders, con 77 años, negó que el problema fuera de edad, sino de voluntad de enfrentarse a los más ricos.
Ataques a Trump
Los ataques al actual presidente han sido también numerosos, en especial por su tratamiento de la inmigración.
"Los americanos entienden que Trump es un fraude, que es un mentiroso patológico y un racista y que mintió a los americanos durante su campaña", ha asegurado Sanders.
"Nos ha puesto en una situación horrible. Tenemos una enorme desigualdad de ingresos", ha criticado por su parte Biden, quien ha prometido revertir los recortes fiscales para los más ricos.
El propio Trump no perdió la oportunidad de responder con un tuit desde Osaka, donde asiste a la cumbre del G-20. "Todos los demócratas están a favor de dar atención sanitaria ilimitada a millones a inmigrantes ilegales. ¿Qué tal cuidar de la sanidad de los americanos primero? ¡Ese es el final de esa carrera".