Ciudadanos, que fue clave para definir los gobiernos autonómicos de la Comunidad de Madrid, Castilla y León, Murcia y La Rioja, aspiraba a lograr mayor poder autonómico y municipal en estas elecciones y lo ha conseguido, pero solo en parte. El partido no logra gobernar en ninguna comunidad autónoma ni en ninguna gran ciudad, pero sus 2.786 concejales jugarán un papel importante como apoyo tanto a izquierda como a derecha en la formación de ayuntamientos. Además, a nivel autonómico, sus votos también serán llave en comunidades como Madrid, Castilla y León o Murcia.
"Hoy Ciudadanos tiene un 80% más de concejales en toda España" y "duplica el número de diputados autonómicos" ha destacado el líder nacional, Albert Rivera, que ha dado por hecho que su formación va a entrar en los gobiernos de la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid. Allí, Ignacio Aguado y Begoña Villacís aspiraban a superar en votos al PP y convertirse en segunda fuerza y, aunque no lo han logrado, sus votos junto a los de Vox sirven para arrebatar la alcaldía de la capital a Manuela Carmena.
"A partir de mañana vamos a empezar a gestionar ese gobierno y otros muchos autonómicos en Murcia y en Castilla y León", ha enumerado Rivera, que ha afirmado que el pasado 28 de abril los españoles les dieron "un espaldarazo" que en las próximas elecciones generales garantizarán un gobierno naranja "después de hacerle oposición a Sánchez y a Iglesias".
En cuanto al resultado en la Comunidad de Madrid, que ha dado la victoria al PSOE, Ciudadanos se enfrenta al dilema de decidir si pacta con PP y Vox para que los de Pablo Casado conserven la alcaldía, o si, por el contrario, lo hace con Ángel Gabilondo, que ha afirmado que no descartará intentar formar gobierno como primera fuerza en la Asamblea madrileña.
Llave para PSOE y PP en Murcia y Castilla y León
Más allá de las celebraciones, los resultados en Castilla y León, la suma de los 11 escaños que han llevado a Ciudadanos a ser tercera fuerza en la comunidad y la de los 32 del PP serán suficientes para desbancar al PSOE, que ha ganado las elecciones en seis de las nueve provincias, aunque la puerta también está abierta al pacto con los socialistas.
Los de Rivera también ganan dos escaños en Murcia, pasan de cuatro a seis, lo que les sirve para encumbrarse como tercera fuerza y podría sumar con PP y Vox por la derecha, o con el PSOE, por la izquierda, para gobernar esta comunidad; y en Aragón, donde el PSOE ha ganado las elecciones, los siete escaños más de Cs en comparación con 2015 serán necesarios junto a los de Vox y PAR para que la izquierda no gobierne en la Xunta.
De este modo, Ciudadanos ha "robado" a Podemos el papel de fuerza "bisagra" que garantiza gobiernos y en los próximos días tendrá que decidir si lo hace con el PSOE, que ha pedido dejar a un lado el cordón sanitario de las generales, o con PP y Vox. Si Podemos salía del parlamento castellano manchego, Ciudadanos entra como tercera fuerza con cuatro escaños y en Extremadura, donde el PSOE ha logrado la mayoría absoluta, Ciudadanos gana ocho asientos y también se convierte en tercera fuerza por detrás del PP.
A nivel municipal, Ciudadanos pasa de 1.526 concejales en toda españa a 2.761 con un 8,25% del voto (1.876.417
papeletas) y, pese a no lograr su propósito de adelantar al PP, su salto de 11 a siete concejales en la ciudad de Madrid podría ser clave para hacer una suma a la andaluza en el consistorio de la capital.
Lo mismo ocurre en Zaragoza. Allí los seis concejales de Ciudadanos, sumados a los de Vox y PP, servirán para arrebatar la alcaldía a Pablo Santisteve, de Zaragoza en Común.
El apoyo de Ciudadanos también podría ser clave para el PP en Almería, aunque los populares también podrían sustentarse en Vox, que empata en escaños con los de Rivera.