El Partido Popular ha anunciado que recurrirá la sentencia de la Audiencia Nacional que le condena por responsabilidad civil en la trama Gürtel porque, asegura, "en ningún caso conocía los hechos". Además, recuerda que "ninguno de los condenados por el procreso está ya en el partido". La decisión ha sido confirmada este jueves por el coordinador del partido, Fernando Martínez-Maíllo, en declaraciones a los medios.
Maíllo ha subrayado además que se trata de una condena en el ámbito "civil", diferenciándola del carácter "penal" que tendría una sentencia por "financiación irregular o ilegal", señalando al PSOE en referencia al caso Filesa. No obstante, si bien fueron condenados cargos del Partido Socialista, la formación no figuró como condenada -como sí lo ha sido el PP- por no estar tipificado el delito en esas fechas.
En un comunicado emitido poco después de darse a conocer la sentencia, que condena al PP como partícipe a título lucrativo, el PP recuerda que "los hechos que se han juzgado se circunscriben a las elecciones municipales de 2003 en los ayuntamientos de Pozuelo de Alarcón y Majadahonda, dos localidades de los más de 8.000 ayuntamientos que hay en España". Esto implica, a juicio de la formación, que "el Partido Popular nacional no puede conocer los gastos extracontables en los que incurra algún candidato a título individual".
El PP se desmarca, aunque "respeta" a los tribunales
El comunicado señala que el PP está cumpliendo "con su compromiso con la corrupción" y que ninguno de los condenados por el proceso "está imputado en esta causa y algunos acudieron al juicio como testigos, lo que acredita una absoluta falta de responsabilidad en los hechos juzgados".
El Partido Popular asegura que respeta "a los tribunales y sus resoluciones judiciales, pero -en este caso- no comparte su contenido".
La sentencia condena al PP al pago de una multa de 245.459 euros por lucrarse de la trama Gürtel a través de los exalcaldes de Majadahonda y Pozuelo de Alarcón, Guillermo Ortega y Jesús Sepúlveda, respectivamente.
En sus declaraciones, Fernando Martínez-Maíllo, ha arremetido contra el líder de Cs, Albert Rivera, por cuestionar el apoyo de su partido al Gobierno tras la sentencia de Gürtel y le ha acusado de estar dispuesto a poner en riesgo la estabilidad de España "por unos votos".
En declaraciones en el Congreso, Maíllo ha calificado de "equivocada y errónea" la sentencia y ha subrayado que hay "muchos fundamentos y esperanzas" para pensar que en segunda instancia el fallo será favorable para el partido.
Ha insistido además en que los hechos que se han juzgado se produjeron en 2003, cuando Mariano Rajoy no era aún presidente del PP; ha recalcado que el partido "desconocía" el uso de fondos irregulares y ha subrayado lo "muy bien fundamentado" que está el voto particular del magistrado que rechazaba condenar al partido.