El Gobierno de Donald Trump ha cancelado el Estatus de Protección Temporal, el llamado TPS, para miles de hondureños. Se estima que la medida afecta a unas 55.000 personas -según datos del Ejecutivo de Honduras- que viven en Estados Unidos y que ahora disponen de un plazo de 18 meses para regularizar su situación o volver a su país.
Este TPS se estableció por la Administración Clinton en 1999 para dar amparo a los hondureños que estaban en EE.UU. por la destrucción causada por el huracán Micht. El Departamento de Seguridad Nacional ha decidido acabar ahora con el programa después de haber evaluado las condiciones sobre el terreno y haber concluido que existe una "notable" mejora en las circunstancias que provocaron su designación.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, ha resuelto que la "interrupción de las condiciones de vida en Honduras por el huracán Mitch que sirvió de base para su designación del TPS ha disminuido a tal grado que ya no debería ser considerado sustancial", ha explicado en un comunicado. Y ha asegurado que Honduras ha hecho un "progreso sustancial en la recuperación posterior al huracán", pero no ha detallado a qué tipo de mejoras estaba haciendo referencia.
La suspensión del TPS anunciada por el Departamento de Seguridad Nacional no se hará efectiva hasta dentro de 18 meses, el 5 de enero de 2020, para favorecer una "transición ordenada". Pero el programa no abre ninguna vía para la residencia permanente ni ningún otro estatus de regulación migratoria, de manera que la decisión del Gobierno obliga a sus beneficiarios a volver a Honduras, buscar otras vías de residencia o convertirse en indocumentados, lo que abre la vía para su deportación.
Honduras lamenta la medida
En un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores de Honduras ha señalado que el Gobierno "reconoce que es una decisión soberana" del Gobierno de EE.UU. como política de la Administración de Donald Trump, "sin embargo lamenta profundamente la cancelación del programa TPS".
El Gobierno de Juan Orlando Hernández ha señalado, además, que los inmigrantes han adoptado "sus costumbres y tradiciones", y han contribuido "de manera significativa a la economía y sociedad de ese país, mantenido una excelente conducta, trabajando arduamente y siendo respetuosos de las leyes".
En el comunicado, Honduras reconoce y agradece la solidaridad de Estados Unidos por haber acogido a más de 100.000 hondureños bajo el TPS durante dos décadas y por las ampliaciones otorgadas hasta ahora. A los hondureños que han vivido en EE.UU. con el beneficio del TPS, la Cancillería les ha reiterado que "son y serán siempre bienvenidos en su patria, donde se les recibirá con los brazos abiertos".
Estados Unidos acaba con el programa migratorio TPS
El TPS es un programa migratorio creado en 1990 con el que EE.UU. concede permisos de forma extraordinaria a los nacionales de países afectados por conflictos bélicos o desastres naturales.
Durante décadas, Estados Unidos renovó de manera automática por periodos de 18 meses el TPS, pero Trump ha decidido acabar con esos permisos, argumentado que son temporales y corresponde al Congreso aprobar una ley para regularizar la situación de sus beneficiarios.
En concreto en los últimos seis meses ha acabado con el TPS para 195.000 salvadoreños, 50.000 haitianos, 9.000 nepalíes y algo más de 5.000 nicaragüenses, grupos a los que ha dado entre 12 y 18 meses para que regresen a su país o logren de alguna forma cambiar su estatus migratorio.
El único país que ha logrado una extensión del TPS es Siria, debido a la persistencia del conflicto armado.