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Semana de la Alta Costura

París renuncia a lo ambiguo y apuesta por una feminidad desbordante

  • Fendi mezcla la suntuosidad de la piel con la delicadeza de las flores

  • Valentino contrasta el estilo monacal con generosas transparencias y volantes

  • Jean Paul Gaultier reinterpreta el exotismo de La India

RAFAEL MUÑOZ(@MUNOZ_RAFA)
4 min.

Fendi ha puesto fin al calendario de la alta costura con una colección primaveral en la que las flores lo invaden todo con sus colores alegres y su belleza, a veces imperfecta. La colección es de una feminidad desbordante que contrasta con la tendencia sin género que recorre las pasarelas de prêt-á-porter.

Las vemos aplicadas al encaje o al guipur, formando capas como su fueran un bouquet y adornando sensuales vestidos en tonos suaves. Otras veces juegan a tapar los descaros de las transparencias pero lo más atractivo es el contraste de texturas cuando se mezclan flores de seda con otras realizadas en visón.

La riqueza de los tejidos marca la propuesta de Fendi. AFP noticias

La casa, orquestada por Karl Lagerfeld desde 1965, trabaja sobre todo la piel y ahora propone elegantes abrigos en tonos pastel que combinan con los vestidos de fiesta y chaquetas cortas que llevan elegantes aplicaciones de encaje. Los vestidos de plumas, en degradé de azules y blancos, resultan encantadores.

El famoso rojo Valentino no falta en el desfile. AFP noticias

Cada salida del desfile de Valentino era diferente a la anterior pero en conjunto resulta una colección coherente, atractiva y moderna.Pierpaolo Piccioli, su director creativo, dibuja prendas de patrón arquitectónico y crea siluetas de trazo escultural.

Monacales abrigos y vestidos en paño de lana, algunos decorados con motivos vegetales, contrastan con la ligereza cristalina de los vestidos en gasa de seda, algunos con el cuerpo de nido de abeja, un tanto retro.

Valentino contrasta tejidos opacos con otros transparentes. AFP noticias

Los volantes recorren el cuerpo con alegría y destacan los escotes, sencillos o con atractivos juegos de tirantes pero siempre en forma de uve de Valentino. No faltaron los vestidos rojos, símbolo de la casa, que vemos con el patrón de un caftán o realizados con una sencilla gasa transparente y falda de volantes.

Jean Paul Gaultier reinterpreta el típico sario de La India. AFP noticias

El invierno se instaló durante unos minutos en París para ambientar el desfile de Jean Paul Gaultier, uno de los más esperados de la semana.

El francés, un genio a la hora de trasladar el mestizaje cultural a la moda, firma un rico encuentro entre Oriente y Occidente en el que destacan los guiños al folclore ruso y al exotismo de la India.

Los saris inspiran vestidos asimétricos de líneas sensuales que envuelven el cuerpo y la cabeza. Otros, en contraste, llevan los hombros rectos, muy marcados, como los trajes de los antiguos guerreros asiáticos.

Detalles del desfile de Jean Paul Gaultier. AFP noticias

Pero la aguja de Gaultier es inquieta y todo le parece poco. Por eso añade, además, prendas de clara inspiración ochentera, con colores pop, plumíferos y detalles deportivos, como las cremalleras. Y además, jerséis de lana de estilo après-ski que se combinan con sofisticadas faldas de encaje y transparencias.

Destacan los sofisticados vestidos en seda rojo intenso, las plumas que se aplican o estampan a vestidos de ensueño, los paisajes invernales dibujados sobre vestidos de noche y el minivestido de novia sobre su body de cuerpo entero dorado que llevó la modelo Coco Rocha que hizo una salida triunfal en bicicleta.

La propuesta artística de Viktor&Rolf. AFP noticias

Viktor&Rolf vuelven a deslumbrar con su original puesta en escena convirtiendo a las modelos en muñecas de ojos saltones y las viste con prendas acolchadas que modelan de forma caprichosa para lograr infinidad de formas: volantes, pliegues, petalos…

Los lazos se desarrollan en todos los tamaños, pequeños y gigantes. El gris, de nuevo, domina la propuesta pero también vemos tonos metalizados y dibujos de patchwork, motivo que se estampa también en camisetas y pantalones vaqueros.

Naomi Campbelle desfiló para Azzedine Alaïa. AFP noticias

Decepcionante ha sido el regreso a la costura de Azzedine Alaïa a pesar de contar con Naomi Campbell para abrir y cerrar su desfile. Los abrigos sesenteros del principio aburren a la enésima versión y los vestidos en punto de colores no convencen. Tan solo tienen sentido los vestidos de noche, en metal o en negro, color que se adueña de los diseños festivos, aunque ninguno resulta fabuloso.

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