La película Un monstruo viene a verme, de Juan Antonio Bayona, ha sido la gran triunfadora de la IX gala de los Premios Gaudí del cine catalán al conseguir ocho de los 11 galardones a los que aspiraba. La superproducción ha logrado, entre otras, las estatuillas a mejor dirección y mejor película en lengua no catalana.
La cinta que contaba con más nominaciones, La propera pell, de Isaki Lacuesta e Isa Campos, un total de 14, no sale de la velada como derrotada, pues ha conseguido el máximo galardón, el Gaudí a la mejor película en lengua catalana, el de mejor actriz protagonista, para Emma Suárez, y el de mejor guión, firmado por ambos cineastas junto a Fran Araújo.
El premio a mejor actor ha sido para Eduard Fernández por El hombre de las mil caras, en la que interpreta al espía español Fernando Paesa y que ya le valió para conseguir la Concha de Plata en el Festival de San Sebastián.
El director Isaki Lacuesta y la actriz Emma Suarez en los IX Premios Gaudí de Cine. Quique García
Un monstruo viene a verme además ha ganado los galardones en áreas técnicas como mejor dirección de producción, montaje, fotografía, efectos visuales, dirección artística y sonido y se colocado en buenas posición de cara a los próximos Premios Goya, que se celebrarán el próximo sábado 4 de febrero y en los que el filme de Bayona cuenta con 12 nominaciones.
Sin embargo, el director ha asegurado, en declaraciones a Efe, que no se esperaba triunfar en los Gaudí y que "en los Goya la cosa está complicada". "No creo que gane", ha afirmado Bayona, quien ha reconocido que su favorita para los galardones de la Academia del Cine Español es Tarde para la Ira, de su amigo Raúl Arévalo.
100 metros y La mort de Loius XIV, dos premios cada una
El drama 100 metros, basado en la experiencia real de superación de Ramón Arroyo, al que diagnostican esclerosis múltiple, que partía en los Gaudí con 11 nominaciones, ha cosechado finalmente dos premios, los dos de mejor actuación secundaria, para Alexandra Jiménez y Karra Elejalde. La mort de Louis XIV, de Albert Serra, que partía con siete nominaciones, ha conseguido dos Gaudí: mejor vestuario y mejor maquillaje y peluquería, previsibles en un filme de época.
Las grandes derrotadas de la noche han sido El rei borni de e Marc Crehuet, que partía con ocho nominaciones; y The Chosen, que contaba con 3, y que han concluido la noche con su casillero vacío de premios.
Con un decorado de inspiración cinematográfica, la gala, dirigida por Lluis Danés, ha sido más entretenida que en la pasada edición, cuando la presentó Rossy de Palma, y además de la conducción cómica de Bruno Oro, trufada con gags sobre la situación del cine catalán y algunas referencias a la actualidad política, ha contado con la participación de Els Amics de les Arts, Sopa de Cabra y Marina Rossell.
Josep Maria Pou, Gaudí de honor
El momento más emotivo de la gala se ha producido durante el discurso del Gaudí de honor a Josep Maria Pou, que ha reclamado "trabajo, condiciones dignas para ejercer la profesión y no caer en la complacencia" y siendo un hombre de teatro no podía faltar una cita al Tío Vania del ruso Anton Chejov.
El actor y director Josep María Pou, tras recoger el Gaudí de Honor. Alberto Estévez
La hora de la reivindicación ha venido del equipo del filme Alcaldessa, premio al mejor documental, que ha dedicado el galardón a la Plataforma de Afectados por la Hipoteca y a la propia Ada Colau, protagonista de esta historia. La intervención de la presidenta de la Academia del Cine Catalán, Isona Passola, ha vuelto a ser reivindicativa, y en esta ocasión ha demandado a la Generalitat que destine "más dinero a la ficción en catalán", que, según ha explicado, ha pasado de ser un 8% en 2008 a un 1% el último año.