La reacción de los mercados mundiales al triunfo del Brexit no se ha hecho esperar y las bolsas asiáticas y la libra se han desplomado.
En Tokio, el selectivo Nikkei ha cerrado con una caída del 7,92%, hasta situarse en los 14.952,02 puntos. En la plaza nipona el desplome del euro y el dólar ante el yen contribuyó a hundir más al Nikkei -que llegó a perder más de un 8%-. El desplome de Tokio es similar al vivido con la quiebra de Lehman Brothers en 2008.
Con unas 1.300 compañías en el país, Japón es el segundo mayor inversor foráneo en Reino Unido por detrás de Estados Unidos y la salida de la UE perjudica enormemente a estas empresas, que previsiblemente perderán acceso directo al mercado comunitario.
El músculo exportador nipón se ha visto enormemente perjudicado además con los mínimos que han alcanzado el dólar y la moneda única europea con respecto al yen, que se ha situado respectivamente en máximos de finales de 2013 y diciembre de 2012 con estas dos divisas.
Un yen fuerte perjudica a las empresas exportadoras japonesas
Un yen fortalecido mina la competitividad de las grandes empresas de electrónica o del motor, que además ven recortados sus beneficios al repatriarlos, un panorama ante el cual valores como Sony o Nissan Motor (que además exporta a la UE el 80% de su producción británica), cedieron un 8%.
La Bolsa de Hong Kong ha caido un 2,92% en su índice de referencia, el Hang Seng, que retrocedió hasta los 20.259,13 puntos tras restar 609,21 enteros. El grupo bancario británico HSBC sufrió las mayores pérdidas, un 6,99%, tras rozar el 12% en algunos momentos de la sesión. El Standard Chertered, otro banco británico que cotiza en el parqué hongkonés, se desplomó un 10,03%.
El índice general de la Bolsa de Shanghái, el principal indicador de los parqués chinos, cerró con una caída del 1,3% (37,67 puntos) hasta 2.854,29 puntos. En el otro mercado de valores, la Bolsa de Shenzhen, el índice de referencia local cayó un 1,05% hasta 10.147,70 puntos.
El Banco de Japón podría inyectar liquidez
Ante el nerviosismo existente por la salida del Reino Unido de la UE, el Banco de Japón ha dicho que está "listo para inyectar liquidez".
El ministro Finanzas japonés, Taro Aso, ha señalado que harán todo lo que sea necesario para calmar a los mercados después de la decisión británica de abandonar la Unión Europea.
El Ministerio de Finanzas de Corea del Sur ha anunciado que tomará "todas las medidas necesarias, incluidas operaciones de atenuación para estabilizar el mercado de divisas". El viceministro, Choi Sang-Mok, adelantó que "comprobará el estado de liquidez en moneda extranjera de las empresas financieras locales", además de monitorizar el mercado de divisas y la salida de capitales extranjeros para reducir la volatilidad.
El Banco de Corea (BOK) también convocó una reunión para abordar posibles modos de estabilizar el mercado financiero de la cuarta economía de Asia. El Kospi, principal indicador del mercado de valores surcoreano, experimentó altibajos durante toda la sesión y cerró con una bajada del 3,09%.
China inyecta liquidez
Por su parte, el Banco Popular de China ha inyectado 170.000 millones de yuanes (25.850 millones de dólares, 22.850 millones de euros) en su sistema bancario para garantizar la liquidez tras el Brexit. "Hemos tomado nota de la reacción de los mercados financieros después de que fuera anunciado el resultado y hemos puesto en práctica un plan de contingencia", indica la autoridad monetaria china en un comunicado.
El banco central del gigante asiático se compromete a utilizar su política monetaria para mantener la liquidez del sistema financiero "en volúmenes adecuados y razonables" y preservar la estabilidad financiera.
El ente emisor chino añade que "mejorará" su régimen cambiario basado en el mercado para garantizar que la cotización de su moneda, el yuan, se mantiene en tasas "básicamente estables y en un nivel adaptativo y de equilibrio".