Los precios al consumo en la eurozona han caído un 0,2% en abril respecto a un año antes, con lo que vuelven a entrar en terreno negativo, según la estimación preliminar publicada por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat. La tasa de inflación vuelve al nivel de febrero pasado tras situarse en el 0% en marzo.
La inflación regresa a tasas negativas arrastrada por la energía, que se ha abaratado aún más (-8,6%) respecto al dato de abril de 2015 (-5,8%), aunque se mantiene respecto a caída interanual de marzo (-8,7%).
El resto de grupos sí que han registrado subidas de precios. En servicios han crecido un 1% (frente al 1,4% de marzo) También han repuntado los precios de alimentos, el alcohol y el tabaco un 0,8% interanual (igual que en marzo). Mientras, los de las manufacturas no energéticas se han incrementado un 0,5% (también igual que en marzo).
Cae la inflación subyacente
De este modo, sin tener en cuenta el impacto de la energía, la tasa de inflación de la zona euro en abril fue del 0,8%, dos décimas por debajo del dato de marzo.
Al excluir del índice tanto el precio de la energía como de los alimentos, el alcohol y el tabaco, la tasa de inflación subyacente de la zona euro también bajó al 0,8%, frente al 1% del mes anterior.
El cálculo rápido del indicador europeo difundido este viernes se basa en la información preliminar sobre inflación que proporcionan los Estados miembros, así como en la información sobre la evolución del precio de la energía. El cálculo definitivo sobre la inflación de enero, tanto para la zona del euro como para el conjunto de la Unión Europea (UE), será difundido por la oficina estadística comunitaria el próximo 18 de mayo.