Noticias

Decenas de detenidos en la segunda jornada de protestas por el aniversario de la muerte de Michael Brown

RTVE.es
4 min.

La tensión ha vuelto a instalarse en Ferguson, en el estado de Misuri, Estados Unidos, un año después del asesinato del joven negro Michael Brown por un policía blanco que no fue condenado.

El domingo, la manifestación pacífica acabó con un tiroteo en el que un hombre resultó gravemente herido, y el lunes por la mañana más de 50 personas fueron detenidas tras una marcha pacífica hasta el juzgado. Las protestas se han alargado durante la madrugada del martes, coin nuevos arrestos aunque sin escenas de violencia.

Las autoridades estatales y federales han llamado a la calma y han declarado el estado de emergencia.

Protestas ante el juzgado

El segundo día de protestas tras el aniversario, el domingo, de la muerte de Brown comenzó con una marcha pacífica de centenares de personas hasta el juzgado federal de la localidad.

Los manifestantes corearon lemas como "Las vidas negras importan" ("Black lives matter", lema de una campaña que se ha extendido por redes sociales) y "El mundo entero está observando". Muchos pedían la disolución del departamento de Policía de Ferguson, acusado de racismo.

Alrededor de la mitad de los manifestantes saltaron una barrera policial que bloqueaba la entrada del juzgado, se sentaron en el suelo y enlazaron sus brazos. La Policía del condado, equipada con material antidisturbios, detuvo a 57 personas. Otras 60 fueron arrestadas por cortar durante media hora el tráfico en la carretera interestatal 70, a las afueras de San Luís, según The New York Times.

La protesta en la avenida West Florissant se ha alargado hasta pasadas las tres de la madrugada, hora local, cuando los manifestantes se han dispersado finalmente. La Policía ha realizado otras 23 detenciones pero, según un comunicado, no ha habido escenas de violencia ni daños, más allá del lanzamiento de objetos.

El joven herido continúa grave

Mientras tanto, el joven herido en la noche del domingo continúa grave. El hombre, identificado como Tyrone Harris Jr., de 18 años, resultó gravemente herido por disparos de la Policía.

Las autoridades locales han acusado a Harris de cuatro cargos de asalto en primer grado a agentes de seguridad, cinco cargos de acción criminal armada y un cargo por descargar un arma de fuego contra un vehículo, y han fijado una fianza por valor de 250.000 dólares.

Según el relato policial, Harris formaba parte de un grupo de jóvenes, aparentemente enfrentados los unos con los otros, que empezaron a dispararse entre sí la noche del domingo.

Varios manifestantes corren en Ferguson para protegerse tras escuchar disparos de la Policía durante la manifestación por el aniversario de la muerte de Michael Brown. Rick Wilking

Cuatro policías que se encontraban en un todoterreno sin distintivo comenzaron entonces a seguir a Harris, quien abrió fuego contra el vehículo, y siguió disparando a los agentes una vez que salieron del automóvil, según la Policía. Los agentes devolvieron los disparos a Harris, quien resultó gravemente herido, y llamaron a una ambulancia.

Los cuatro policías, que han recibido una baja administrativa mientras se investiga el suceso, no llevaban cámaras de acción en el uniforme, una práctica cada vez más recomendada para aportar claridad en los casos de acusaciones sobre violencia policial.

"Mi hijo ni siquiera iba armado"

El padre del joven herido, Tyrone Harris, ha defendido la inocencia de su hijo y ha puesto en duda el relato de la Policía. "Mi hijo ni siquiera iba armado cuando le dispararon", ha asegurado Harris en una entrevista con el diario The Washington Post.

La Policía asegura que en el lugar de los hechos se encontró una pistola de 9 milímetros robada en otra localidad del estado, pero Harris negó que perteneciera a su hijo.

Según el padre, el joven fue atacado por la Policía cuando "corría para salvar su vida" del tiroteo que había estallado entre dos grupos de jóvenes en la avenida West Florissant, el epicentro de las protestas, y dos chicas que se encontraban con su hijo en ese momento le aseguraron que no iba armado.

La fiscal general de EE.UU., Loretta Lynch, ha condenado "rotundamente" todo tipo de violencia en Ferguson, "incluida (la ejercida) contra los agentes de policía". Por su parte, el gobernador de Misuri, el demócrata Jay Nixon, ha afirmado en un comunicado que quienes "aterrorizan a las comunidades con disparos y cometen violencia contra agentes de Policía son criminales".

Después del asesinato de Brown, en agosto de 2014, el Departamento de Justicia ya intervino la Policía de Ferguson, mayoritariamente blanca, y descubrió que los agentes mantenían prácticas abusivas contra la población afroamericana. El caso ha puesto de nuevo de actualidad el conflicto racial en Estados Unidos.

Noticias

Televisión

Radio

Deportes

Infantil

A la Carta

Playz