El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha reconocido este martes "disfunciones en la gestión" del rescate de los espeleólogos en Marruecos porque el avión que trasladó a los policías y guardias civiles "no estuvo allí en el momento" en el que a España le hubiera gustado. No obstante, ha asegurado que su departamento "ha hecho todo lo humanamente posible para que este desenlace" no se produjera.
García-Margallo ha hecho estas declaraciones a los periodistas antes de participar en un acto celebrado en la Fundación Telefónica sobre el Consejo de Seguridad de la ONU, en el mismo día en el que el montañero Juan Bolívar, único superviviente del accidente del cañón de Wandrass, ha abandonado la clínica Chifa de Uarzazate donde estaba convaleciente tras su llegada en la noche del pasado domingo y ha emprendido su viaje de vuelta a España.
El avión en el que el espeleólogo regresa a España no traslada los cadáveres de Gustavo Virués y José Antonio Martínez, que viajarán en un vuelo posterior, dijeron a Efe fuentes oficiales marroquíes, ya que se les ha de practicar la autopsia, para lo que sus cuerpos se han llevado a Marrakech.
Margallo asegura que Marruecos "se ha volcado"
Margallo ha dicho, ante las críticas del Sindicato de Policía Unificado (SUP) sobre la gestión del Gobierno en las labores de rescate, que el Ministerio pidió autorización para el vuelo que iba a trasladar a policías y guardias civiles en cuanto el avión estuvo preparado.
Según ha señalado, en un primer momento hubo "una primera noticia de las más altas instancias marroquíes" de que esa autorización se iba a producir inmediatamente.
"Ha habido, como se producen en todas las desgracias, disfunciones en la gestión", ha dicho, antes de asegurar que Marruecos "se ha volcado" en este asunto.
Marruecos aseguró que no necesitaba asistencia
El ministro ha señalado que al día siguiente le comunicaron desde la Embajada que el Ministerio del Interior del país alauí había trasladado al español -que dirige Jorge Fernández Díaz- que no necesitaban asistencia de ningún tipo, que los espeleólogos estaban localizados y que tenían medios.
"Se volvió a insistir y el domingo se recibió la autorización para hacerlo. En ese momento el avión salió para Marruecos", ha destacado García-Margallo.
No obstante, ha reconocido: "No estuvo allí en el momento que nos hubiese gustado". "El Ministerio pidió desde el primer momento la autorización", ha agregado.
"La segunda jefatura, el cónsul y el agregado de interior han estado en todo momento disponibles y actuando. Yo he estado en el teléfono y la unidad de emergencias consulares trabajando", ha dicho.
"El Ministerio ha hecho todo lo humanamente posible para que este desenlace no se hubiese producido. Ahora lo importante es repatriarlos cuanto antes y aliviar el dolor de las familias", ha manifestado el jefe de la diplomacia española.
Ha señalado que en tragedias como el atentado en Túnez, el avión siniestrado en los Alpes franceses o lo ocurrido en Marruecos "todo el mundo intenta hacer lo humanamente posible para que no se produzca un desenlace fatal".
“El Ministerio pidió desde el primer momento la autorización“
"Las autoridades marroquíes no tenían el menor interés en que el desenlace fuera este, sino lo contrario", ha apuntado. No obstante, ha señalado que "habrá qué ver qué es exactamente lo qué ha pasado". "Ellos se han volcado, si tenían o no medios yo no lo sé, lo ha llevado Interior directamente, han considerado que podían hacerlo, por desgracia no ha sido así", ha precisado.
García-Margallo ha subrayado que se están haciendo todas las gestiones posibles con las autoridades marroquíes para que la repatriación de los dos espeleólogos fallecidos en al Atlas marroquí se produzca lo antes posible.
"Lo que más nos importa ahora es el dolor de lo familiares que han perdido a sus seres queridos", ha añadido.